Finresp ha presentado la Memoria Social del Sector Financiero 2023, en la que destaca que el sector financiero juega un papel fundamental en la sociedad, entre otros, por su capacidad para custodiar los ahorros de familias y empresas, gestionar sus operaciones financieras e inversiones, y proteger a las personas y sus bienes materiales a través de los seguros. En España, el pasado año, su actividad representó más del 5% de la economía española en términos de Valor Añadido Bruto y empleó a más de 200.000 personas.
Su contribución a la economía nacional se reflejó en una gestión de activos financieros por valor de 5,2 billones de euros en 2023, una cantidad superior al PIB de países como Alemania, India o Japón, y custodió más de 4 billones de euros de familias, empresas, organizaciones e instituciones españolas en distintos instrumentos de ahorro e inversión. Esta cifra equivaldría a 1,5 veces la riqueza financiera de las familias españolas a cierre de 2023.
En la presentación de la Memoria participaron la AEB, CECA, Inverco, Unacc y Unespa–, que representan a alrededor de 500 entidades del sector financiero. José María Méndez, presidente de la organización, ofreció una intervención inicial en la que quiso hacer mención a la catástrofe sufrida a causa de la DANA en el este peninsular y en especial en la Comunidad Valenciana, lamentando la pérdida de vidas humanas y mostrando la disposición del sector financiero a colaborar para apoyar a las comunidades afectadas.
Durante su discurso, Méndez subrayó que “desde el sector financiero queremos sumarnos a las enormes muestras de solidaridad nacionales e internacionales que hemos observado estos días ante estos hechos devastadores. Nuestras entidades están llevando a cabo valiosas iniciativas solidarias y desde las asociaciones estamos colaborando con las autoridades en la puesta en marcha de medidas normativas que mitiguen el impacto de la DANA en familias y pymes. Tras una noche larga de trabajo, hoy mismo se está aprobando un Real Decreto-Ley que da cobertura a las iniciativas de las asociaciones bancarias en el ámbito de las moratorias, avales y extensión del Código de Buenas Prácticas. Quisiera hacer especial mención también a la rápida respuesta del sector asegurador y al papel del Consorcio de Compensación de Seguros, que están trabajando de manera incansable por hacer frente a los daños y posibilitar cuanto antes que las comunidades afectadas salgan adelante en esta situación tan dolorosa.»