Pfizer y Glaxo tenían exclusividad, pero el Gobierno autorizó a la planta que dirige la química Luz Mery García para producir un genérico, lo que abaratará su precio
La Universidad de Antioquia no solo cuenta con la única planta pública de producción de medicamentos de Colombia, sino también con una que es referencia en América Latina, la Planta de Producción de Medicamentos Esenciales, con la que cada vez tienen una mayor capacidad para fabricar fármacos bien sea desabastecidos o para los que la oferta de la industria farmacéutica es insuficiente. Ahora, de la mano de los Ministerios de Ciencias y de Salud, podrán seguir consolidándose tras haber sido autorizados para comercializar un medicamento que ha dado buenos resultados en el tratamiento del virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).
Se trata de dolutegravir triconjugado, un principio activo que es comercializado por el laboratorio ViiV Healthcare bajo el nombre comercial Tivicay. Sobre este medicamento se dio un acontecimiento histórico en octubre del año pasado cuando el Ministerio de Salud, entonces ya con Guillermo Jaramillo a la cabeza, decidió declararlo de interés público, con lo que se le quitaba la exclusividad de fabricación a la farmacéutica para permitir que en el país se produjera una versión genérica.
Esto fue posible a través de un modelo conocido como “licencia obligatoria” y se dio después de consultar a un Comité Técnico Interinstitucional en el que estaba, entre otras personalidades, el exsuperintendente Pablo Felipe Robledo
La idea del Ministerio era abaratar los costos del medicamento, puesto que, según ellos, un frasco de 30 tabletas del de 50 mg podía valer $401.574, lo que lo hacía poco accesible. Esta decisión fue apelada por ViiV Healthcare, cuyos dueños son la británica GlaxoSmithKline y la estadounidense Pfizer, quienes querían mantener la exclusividad, pero terminaron perdiendo y ahora también tendrá derecho para producirlo la Universidad de Antioquia.
Así las cosas, la planta que desde 2005 es dirigida por Luz Mery García Velásquez -una química farmacéutica de la Universidad de Antioquia y magister en Ingeniería de la Eafit- podrá comenzar a investigar, desarrollar, producir, registrar y, finalmente, comercializar, este antiretroviral, el cual es una de las opciones preferidas para el tratamiento de la enfermedad que afecta a cerca de 150 mil personas en Colombia gracias a su alta eficacia y a su poca probabilidad de generar resistencia.
Todo esto podría ponerse en marcha dentro de los próximos 12 meses, después de lo cual serían cada vez más los pacientes que podrían acceder a un tratamiento con costos asequibles. De igual manera, la universidad pública paisa está en camino de construir una nueva planta de medicamentos en El Carmen de Viboral, Antioquia, que le permitiría aumentar considerablemente sus capacidades.