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Si pensamos en ingredientes asociados a la dieta mediterránea podemos pensar en algunos grupos de alimentos imprescindibles, pero sin lugar a dudas quizá sea el aceite de oliva el que más titulares haya acaparado a lo largo de los años.
Algo que a nadie puede sorprender si tenemos en cuenta que, más allá de sus propiedades organolépticas, el denominado oro líquido ha demostrado ser un aliado indispensable para la salud hasta el punto de que su ingesta se relaciona con un aumento de la esperanza de vida.
Sin ir más lejos, una investigación de este mismo año publicada en European Journal of Clinical Nutrition trataba de analizar la relación entre el consumo de este ingrediente y la mortalidad teniendo en cuenta las cucharadas (10 gramos) que los participantes, 22,892 hombres y mujeres italianos mayores de 35 años, utilizaban para cocinar y aderezar sus elaboraciones.
Los resultados del trabajo, fruto de más de una década de seguimiento, indicaban que un mayor consumo de aceite de oliva, especialmente más de tres cucharadas diarias, se asociaba con un menor riesgo de cáncer y una reducción en la mortalidad por enfermedades cardiovasculares y en la mortalidad general en comparación con tomar sólo una.
Y, aunque los firmantes del trabajo piden en sus conclusiones “preservar o fomentar el uso diario” de aceite de oliva en el marco de la dieta mediterránea, tampoco sería nada descabellado buscar en su origen, ese impulso que nos permita vivir más años de forma saludable. Hablamos, evidentemente, de comer aceitunas.
El snack de la longevidad
Al menos es lo que comparte Dan Buettner, uno de los mayores expertos en longevidad del mundo, que se ha pasado las últimas dos décadas hablando de las excelencias de las zonas azules, es decir, regiones del planeta donde la esperanza de vida es mayor que la media y en las que la proporción de personas centenarias es elevada.
Cerdeña (Italia) e Icaria (Grecia), junto con Okinawa (Japón), Loma Linda (California, EEUU) y Península de Nicoya (Costa Rica), dan forma a ese mapa de la longevidad y, como no podía ser de otra forma, el consumo de aceitunas es elevado. Pero el periodista, escritor y explorador de National Geographic, va un paso más allá y pide directamente que, además de formar parte de diversas elaboraciones, se consuma como snack.
“Comparto un snack en el que probablemente ni siquiera hayas pensado. En algunas zonas azules como Cerdeña o Icaria, las ves por todas partes: son las aceitunas. Son un aperitivo atemporal repleto de grasas saludables, antioxidantes y una rica historia que se remonta a miles de años. Y saben muy bien”, asegura Buettner.
“Estas pequeñas fuentes de energía -prosigue- no sólo añaden un toque especial a sus comidas, sino que también contribuyen a una vida más larga y saludable, como le sucede a las personas de las zonas Azules. Come aceitunas para disfrutar de una dosis de beneficios cardiosaludables y del sabor de la longevidad”.
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“Así pues, en lugar de coger una bolsa de patatas fritas a media tarde, prueba a comer unas pocas olivas y nos veremos cuando seas centenario”, concluye el experto. Y no le falta razón a Buettner ya que no hay un remedio milagroso ni una píldora mágica que permita que vivamos más años sino más bien, entre otras cosas, un conjunto de buenas decisiones en relación a la dieta.
Álvaro Piqueras es experto en deportes y en el último lustro se ha especializado en fitness, nutrición y otros temas de salud. Trata de mantenerse al día en lo que se refiere a nuevas investigaciones y tendencias de los campos que domina para poder compartir con rigor la rutina de entrenamiento que puede inspirar un cambio en tus hábitos, las propiedades de los alimentos que deberían formar parte de tu dieta o los hallazgos científicos que pueden mejorar el bienestar físico y mental de personas como tú.
Comenzó su trayectoria en medios locales y regionales de la tierra de Don Quijote, concretamente en Albacete. De ahí dio el salto a medios de ámbito nacional tras un enriquecedor paso por una maravillosa agencia de publicidad independiente con nombre de canción de los Beatles (GettingBetter), aunque siempre mantuvo intacta su vocación periodística.
De ahí que persiguiera su sueño de trabajar para alguno de los principales grupos editoriales del país como Prisa, Vocento y ahora también Hearst. Quizá le hayas leído en la versión digital del Diario As, abordando infinidad de temáticas, o en ABC y otras cabeceras y revistas del grupo elaborando reportajes de branded content para grandes marcas, multinacionales e instituciones. Y si no has tenido la ocasión, este es el momento de hacerlo en Men’s Health y Runner’s World.
Como no podía ser de otra forma, confiesa ser un amante de la práctica deportiva y desde muy pequeño ha probado con disciplinas tan dispares como atletismo, fútbol, baloncesto, tenis, ciclismo o natación. Unas veces sintiendo la adrenalina de la competición, y otras simplemente disfrutando de los beneficios de la actividad física. Ahora le ha dado por los ejercicios funcionales y el boxeo porque tiene la certeza de que el saco es incapaz de devolverle los golpes.
Licenciado en Publicidad y Relaciones Públicas por la Universidad de Alicante, también posee formación específica en gestión y dirección de RRSS, planificación estratégica y diseño gráfico. Últimamente se ha adentrado en el universo de la inteligencia artificial generativa aplicada al periodismo, pero jura y perjura que no la emplea profesionalmente porque, entre otras consideraciones, sigue disfrutando de cada palabra que escribe tras 20 años de experiencia en el sector de la comunicación.
