Sydney Marathon anunció este domingo su unión al selecto club de las Abbot World Marathon Majors, la prestigiosa asociación que integra a las mejores maratones del planeta y en la que ya figuran Tokio, Boston, Londres, Berlín, Chicago y Nueva York. Así, a partir de 2025, el Maratón de Sydney se convertirá en el primero del hemisferio sur en ingresar en la elite mundial de las carreras de maratón. El 31 de agosto es la fecha de su próxima edición.
Con más de 20.000 llegados a meta este curso, Sydney comenzó su idilio con los 42,195 kilómetros en los Juegos Olímpicos del año 2000, punto de partida de un legado que le ha catapultado hasta la primera línea internacional del atletismo en ruta. En la actualidad, es el maratón más grande de Oceanía.
Dawa Stone, máxima ejecutiva de las Abbot World Marathon Majors, declaraba que «estamos ansiosos por ver a nuestra comunidad abrazar el Maratón de Sydney y que puedan planificar su visita para recorrer las calles de una de las mejores ciudades del mundo. Corredores… ¡Vuestra estrella de Sydney ya os está esperando!».
Por su parte Wayne Larden, director del Maratón de Sydney, aseguraba que «convertirse en el séptimo Major es simplemente increíble, no solo para el evento sino también para la ciudad de Sydney y el estado de Nueva Gales del Sur. Nuestro equipo es de primer nivel y hemos trabajado mucho para que esto suceda. Es un día muy especial para todos nosotros».
Ciudad del Cabo y Shangái, a examen
Para formar parte de las AWMM es necesario reunir un conjunto de requisitos y unas condiciones de excelencia organizativa, criterios que, una vez superados, son analizados detenidamente por la ejecutiva de la asociación para dar un veredicto final. Así, tras el ingreso del Maratón de Sydney en este club elitista, otras dos ciudades opositan a completar un proceso de expansión internacional cada vez más evidente: Ciudad del Cabo (Sudáfrica) y Shangái (China). Ambos maratones podrían unirse en 2026 y 2027 respectivamente si superan los dos años de evaluación pertinentes.
De este modo, a medio plazo entrará en juego la Medalla de las Nueve Estrellas, un bastidor con nueve insignias, una por cada uno de los nueve maratones que, hipotéticamente, terminarán formando las AWMM. La idea es que este nuevo emblema conviva durante un tiempo con la Medalla de las Seis Estrellas, de modo que los aspirantes vigentes en este propósito puedan culminar su objetivo de completar las seis carreras principales.
