En los minutos finales de la victoria 3-1 de Liverpool sobre Leicester City, se escucharon cánticos de “Liverpool, líder de la liga” resonando desde el Kop. Hay un sentimiento creciente de que el equipo de Arne Slot podría estar rumbo a lograr algo especial esta temporada.
Antes del partido, se retransmitieron en las pantallas del estadio los momentos más destacados del último enfrentamiento en el “Boxing Day” entre ambos equipos, en 2019. En esa ocasión, el dominio de Liverpool fue tal que Jürgen Klopp llegó a calificarlo como una de las mejores actuaciones en la Premier League de su equipo, con goles de Roberto Firmino, James Milner y Trent Alexander-Arnold para asegurar una contundente victoria 4-0 en el King Power Stadium.
Este año, aunque el equipo de Slot no ha alcanzado el mismo nivel impresionante, la inconsistencia de sus rivales ha favorecido su camino. Un empate del Manchester City con Everton dejó a los de Guardiola 11 puntos por detrás en la tabla, habiendo jugado dos partidos más. Chelsea también sufrió una derrota que permitió a Liverpool consolidarse como favoritos para el título.
A pesar de un comienzo complicado con otro gol inesperado de Jordan Ayew para Leicester, Liverpool mostró su habilidad para sobreponerse. Cody Gakpo empató antes del medio tiempo con un gran disparo, y Curtis Jones adelantó a su equipo poco después de reiniciarse el segundo tiempo. Mohamed Salah cerró el marcador, asegurando que Liverpool sigue firme en su aspiración al título, con una ventaja de siete puntos en la cima de la tabla y un partido menos. Aunque Anfield sabe que el liderato navideño no garantiza un título, el optimismo está a flor de piel.