Las autoridades creen que es cuestión de días para capturar a al menos uno de los sicarios que participó en la masacre de la familia Lora, ejecutada hacia el mediodía del 29 de diciembre pasado en Aguachica (Cesar).
Mientras las autoridades locales le piden al Gobierno aumentar el pie de fuerza en la región, convertida de nuevo en epicentro de bandas criminales, un grupo de expertos de la Policía avanza rápidamente en la identificación de los autores materiales e intelectuales.
El sepelio del capo
Los investigadores de la Dijín que viajaron desde Bogotá aún no quieren descartar la hipótesis de que se trató de una confusión de los asesinos que iban por la pareja de un capo del narcotráfico de la zona que supuestamente estaba igual vestida que Ángela Lora, la hija del pastor Marlon y de su esposa Yorley.
La pista más fresca que se tiene del caso es que ese día iban a enterrar al señalado narcotraficante en el cementerio de Aguachica y por eso su pareja estaba en la zona.
Esta última está siendo ubicada para saber si estaba en ‘Sorbetes y Jugos’, el local en donde estaban los Lora tras asistir al culto en la Iglesia Príncipe de Paz.
“Ese día, la joven Ángela tenía un pantalón negro y una blusa blanca y tenía recogido el pelo. Su madre, la pastora Yorley, tenía puesto un conjunto de camisa y pantalón rosados, sandalias doradas y un saquillo blanco“, explicó uno de los investigadores.
Y agregó que están revisando cámaras para establecer si alguien más en el restaurante estaba vestida de esa manera. Y si se enterró al capo como estaba previsto.
La huella
Y aunque el sicario tuvo la frialdad y sevicia de asesinar a los Lora de disparos en el tórax y en la cabeza, dejó varias pistas sobre su identidad.
Tal como lo reveló EL TIEMPO, su rostro quedó registrado en cámaras de seguridad cuando se quitó el tapabocas para hablar por celular, al parecer, para recibir la ubicación exacta de sus víctimas.
Además, las motos usadas en el crimen fueron abandonadas a dos kilómetros de Aguachica y la Policía ya encontró una huella de uno de los sujetos que participó en la masacre.
El alias y un extranjero
Como lo reveló EL TIEMPO, un informante ya suministró el alias de uno de los sicarios y ahora se trabaja en establecer la estructura delincuencial a la que pertenece.
“Al parecer, uno de los implicados en la masacre es un extranjero y estaría buscando salir hacia Venezuela por Santander. Los otros se movieron hacia municipios vecinos“, dijo la misma fuente.
Y agregó que no se ha descartado que alguno de los Lora estuviera siendo extorsionado.
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