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EUGENIO MUÑOZ
Actualizado
Una tragedia está golpeando el corazón de los Estados Unidos de América. Los fuertes vientos del sur de California desencadenaron unos terribles incendios en Los Ángeles. Hasta 30.000 personas han recibido órdenes de evacuación de la zona y se estima que hay más de 13.000 estructuras que podrían arden en Pacific Palisades, próspero barrio residencial en la zona oeste de la ciudad.
El deporte, algo muy menor en una desgracia del calibre de los incendios, también sufre afectación. Es el caso concreto de uno de grandes protagonistas e icono por su rol en la ciudad como damnificado, JJ Redick. El que fuese jugador y es actual técnico de Los Ángeles Lakers confesó que la desgracia natural le está tocando de primera mano. Por algo muy duro, vive allí.
“Es donde vivo. Ha sido evacuada mi familia, mi mujer, la familia de mi mujer y la hermana gemela de mi mujer. Conozco a mucha gente que está ahí fuera ahora, incluyendo a mi familia. Hay mucha gente asustada, por cómo suena todo, por los vientos que vienen”, explicó el entrenador de los oro y púrpura tras caer (118-97) en la cancha de los Mavericks.
Redick, como no podía ser de otra forma, quiso mandar un mensaje de ánimo a los que peor lo pasaban. “Rezamos y enviamos ánimos a la gente que está ahora mismo en Palisades. Espero que todos estéis a salvo”, comentó en la rueda de prensa tras la finalización del partido.
Es donde [Palisades] vivo. Ha sido evacuada mi familia, mi mujer, la familia de mi mujer y la hermana gemela de mi mujer
JJ Redick
No fue el único que comentó su historia personal en relación a los incendios. También Steve Kerr, técnico de los Golden State Warriors. “Mi madre vive allí y tuvieron que evacuarla. Mandamos ánimos a toda la gente de Los Ángeles”, confesó. La zona de Palisades es una de las más conocidas de la ciudad y destaca enormemente por su gran conexión con los puntos más importantes de Los Ángeles. Apenas está separada por 20 minutos de distancia respecto a lugares icónicos como Beverly Hills, Hollywood o la zona de West Los Ángeles.
El incendio, de momento, sigue activo y se informó de su peligroso estado en las horas de madrugada de los Estados Unidos. Además, sigue dejando imágenes terribles como las decenas de coches abandonados en las calles del barrio residencial o las imágenes de los vecinos descendiendo montaña abajo para refugiarse en algún lugar seguro.