Actualmente, no hay nada que iguale a McLaren. El equipo británico de Lando Norris y Oscar Piastri ha desarrollado un coche de F1 rapidísimo en un espacio de tiempo relativamente corto, manteniéndose por delante de la competencia casi todos los Grandes Premios. Con un coche tan fuerte en este momento, acechan varios peligros. La cuestión va a ser cómo se las arregla McLaren para afrontarlos en las próximas semanas.
Aunque tengas un coche que gane todos los Grandes Premios menos uno y tengas un comienzo excelente la temporada siguiente, eso no es garantía de acabar primero en el campeonato de constructores. Red Bull Racing lo sabe todo, ya que el equipo de Max Verstappen y Sergio Pérez, antaño tan dominante, ha sido superado ahora también por McLaren en la clasificación, y Ferrari y Mercedes también son regularmente más rápidos.
Las decisiones equivocadas de Red Bull
El hecho de que Red Bull ya no sea el estandarte de la Fórmula 1 se debe en parte a no saber desarrollar correctamente el RB20. En los últimos meses, el equipo austriaco ha introducido actualizaciones en sus coches, que al final han resultado empeorar el coche en lugar de mejorarlo. Ese es el dilema constante con el que luchan los equipos de F1: Por un lado, tienes que intentar mantenerte a la cabeza evolucionando constantemente; por otro, esas actualizaciones también pueden llevarte en la dirección equivocada, con todas sus consecuencias.
Ése es precisamente un dilema con el que McLaren está luchando ahora mismo. Para el Gran Premio de EE.UU., todos los competidores de McLaren -incluido, por tanto, Red Bull- traen importantes actualizaciones. Aunque los británicos mostraron una tremenda superioridad en la carrera anterior de Singapur y nada hace pensar que ésta vaya a desaparecer sin más en Austin (aunque el Circuito de las Américas es incomparable con el circuito urbano de Marina Bay en Singapur), el equipo no puede relajarse. Luego viene el riesgo de si también sus nuevas piezas mejoran o empeoran su coche.
Mientras tanto, la decisión está tomada: en Austin, McLaren presentará realmente un paquete de actualización radical. Al fin y al cabo, el director del equipo, Andrea Stella, sostiene que en Fórmula 1 nunca hay que levantar el pie del acelerador. No sólo McLaren va a mirar con recelo si esto hará que su coche sea más rápido, la competencia seguro que también.
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