Necesitaba el Barça volver a la senda del triunfo tras tres partidos seguidos en la Liga sin ganar y haber sumado solo un punto de los nueve posibles. Y lo hizo goleando a un correoso Mallorca en una segunda parte muy buena en la que destacaron Lamine Yamal y Raphinha. Entre ambos, rompieron el empate con el que se había llegado al descanso. El primero, provocando un penalti y con un centro con el exterior que solo pueden dar futbolistas elegidos como el de Rocafonda. El segundo, haciendo el segundo y el tercero del Barça culminando esas dos acciones. Transformando con seguridad la pena máxima y haciendo bueno el gran pase de Lamine.
Flick, en la previa, había enviado algún mensaje a sus hombres, los mismos que había hablado con ellos en el vestuario. Para volver a ganar, era necesario jugar como equipo, defender y atacar en bloque, estar concentrados durante todo el partido y ser efectivos ante la portería rival. Sus jugadores siguieron sus indicaciones a pies juntillas. Concentración absoluta para tirar la línea, presionar al jugador rival en posesión del balón. El resultado, volver a dejar al rival en fuera de juego como había hecho hasta los tres últimos encuentros. Un total de once veces cayó en la trampa el Mallorca.
El técnico alemán también pedía efectividad y la tuvieron sus delanteros, especialmente en la segunda mitad. La tuvo Ferran Torres, la gran sorpresa de la alineación, en una de las primeras oportunidades del Barça aprovechando un fallo de la defensa local. Y la tuvieron en la segunda parte Raphinha y dos de los hombres que entraron de refresco. El brasileño está cuajando una temporada excepcional. Suma ya once goles en la Liga y ocho asistencias. En el total de la temporada, son dieciséis los goles que lleva Raphinha y diez los pases de gol que ha dado.
A la fiesta se sumaron Pau Víctor y Frenkie de Jong, con un gol cada uno. Importante el del centrocampista neerlandés, que también fue el asistente de Pau Víctor. Necesita De Jong tener buenos minutos para ganar en confianza y ser importante para un equipo que necesita a todos sus efectivos.
Solventó el Barça con goleada el primero de los desplazamientos complicados que tiene esta semana. El segundo, el sábado en el Benito Villamarín ante el Betis. Viajará a Sevilla habiendo recuperado las buenas sensaciones que había dado hasta la derrota de Anoeta y volviendo a meter miedo a sus rivales. Entre ellos el Real Madrid, que tiene este miércoles un partido muy complicado en San Mamés contra el Athletic de Ernesto Valverde y el próximo fin de semana visita Montilivi.