Unas imponentes auroras boreales iluminaron el cielo durante la noche del miércoles primero de enero, un fenómeno raro en las latitudes bajas donde fue observado debido a la intensa actividad solar de los últimos días.
Desde Indre hasta Córcega pasando por los Pirineos, donde el cielo estaba despejado, los franceses publicaron decenas de fotografías en redes sociales de los destellos color violeta. El espectáculo también se observó en Gran Bretaña, Suiza o Austria, entre otros lugares.
“¡El espectáculo de la aurora boreal comienza de nuevo! Si el cielo está despejado, ¡tome fotografías con exposición prolongada hacia el norte!”, escribió el astrofísico Eric Lagadec en la red BlueSky.
Las auroras polares aparecen cuando chorros de partículas magnéticas calientes, generadas por erupciones solares y llamadas eyecciones de masa coronal (CME), alcanzan el medio ambiente de la Tierra.
Las corrientes de partículas ionizadas proyectadas a velocidades colosales chocan contra el campo magnético de la Tierra, que sirve como escudo para proteger el planeta.
Luego son aceleradas hacia los polos magnéticos. Esto explica por qué se observan comúnmente en latitudes más allá de los círculos polar, ártico y antártico. En este último caso, se conocen como las auroras australes.
Pero si las CME son más poderosas, estas auroras descienden más al sur, hacia el ecuador, alcanzando latitudes poco usuales.
En mayo, una tormenta solar histórica incendió el cielo en todo el mundo, incluso en lugares tan lejanos como California y Australia.
Esto ha ocurrido porque cada once años nuestra estrella experimenta un pico de actividad ligado a la inversión de sus polos magnéticos.
“Estamos en vías de alcanzar el máximo de actividad, es decir, erupciones solares, eyecciones de masa coronal”, explica Milan Maksimovic, astrofísico del Observatorio de París – PSL.
Este máximo de actividad solar “debería producirse en 2025 o principios de 2026”, añade. “Habrá fenómenos como este durante al menos uno o dos años más, después de eso, disminuirá”.
Sin embargo, entre más cerca se esté del ecuador estos fenómenos son difíciles de ver a simple vista. “A menos que la aurora boreal sea muy intensa, en el cielo sólo se ve una especie de banda lechosa”, advierte Maksimovic.
La mejor manera de capturar este fenómeno es usar una cámara o un teléfono inteligente y “hacer una pausa de tres segundos” para acumular la luz y ver aparecer en la pantalla un cielo teñido de violeta, rojo o rosa, aconseja.