by Ingrid Valero Rivero
Sat, October 26th 2024 at 8:38 PM
Updated Sat, October 26th 2024 at 8:51 PM
Faltando 11 días para las elecciones, los candidatos a la presidencia fijaron sus miradas en Texas. Donald Trump estuvo el viernes en Austin y la vicepresidenta Kamala Harris en Houston. El candidato republicano llegó a un hangar de aviones privados donde habló de la seguridad fronteriza con la prensa, repitiendo sus duros ataques de siempre sobre inmigración. (Foto: Telemundo Austin)
Faltando 11 días para las elecciones, los candidatos a la presidencia fijaron sus miradas el viernes en Texas, Donald Trump estuvo en Austin y la vicepresidenta Kamala Harris en Houston.
Aunque el estado de la estrella solitaria se considera un baluarte republicano, los expertos dicen que cada voto podría marcar la diferencia en estas elecciones.
El despliegue logístico en Austin incluyó clausuras viales a lo largo de la autopista 71 y calles secundarias entre la 183 y la calle Howard. Cerca del mediodía, Donald Trump llegó a un hangar de aviones privados para hablar con la prensa de la seguridad fronteriza e inmigración: “estamos hoy aquí, en el gran estado de Texas, que me gusta y que bajo el mando de Kamala Harris se ha convertido en la zona cero de la mayor invasión fronteriza de la historia del mundo”.
El gran ausente a la conferencia fue el Gobernador Greg Abbott; sin embargo, allí estuvieron sus aliados el Fiscal General Ken Paxton y el Vicegobernador Dan Patrick.
Al expresidente también lo acompañaba el Senador Ted Cruz, quien se encuentra en una reñida contienda con el congresista Colin Allred: “no podría pedir un mejor resumen de esta campaña, Harris y Allred del brazo, al mismo tiempo que el presidente Trump y yo estamos juntos”.
En estas elecciones, los demócratas buscan la oportunidad para derrotar a quien ha ocupado un puesto del senado por 12 años y las encuestas revelan que hay posibilidad.
“Texas se está deslizando lentamente hacia la columna competitiva, y cuando miras a los estados que tradicionalmente consideramos como estados clave o estados en disputa o competitivos, Texas en realidad está apenas fuera de esa lista de posibilidades”, dijo Joshua Blank, director de investigación del Proyecto para las Políticas de Texas.
Los republicanos han hecho campaña sobre la inmigración y la frontera a pesar de que fue el mismo Donald Trump quien presionó a la bancada para rechazar una propuesta bipartidista de seguridad fronteriza.
En su discurso, el candidato repitió los duros ataques de siempre: “están sacando a su gente de las cárceles y trayendo a los nuestros. Somos como un vertedero. Lo que Kamala Harris ha hecho en nuestra frontera es cruel, vil y absolutamente despiadado, su política de importar pandillas de inmigrantes es un crimen contra nuestro país”.
Trump también se refirió a la polémica que ha causado la depuración del padrón electoral de Texas: “eliminar a los votantes ilegales del censo electoral debería ser una gran prioridad para este país; sin embargo, un juez en virginia nos desprecia, esto es descaradamente antiestadounidense y es una interferencia electoral”.
Mientras esto ocurria, muchos residentes de Austin salieron a las calles para expresar su sentir sobre la visita de Trump.
“Casi nunca miramos un presidente que viene aquí a Austin, a veces no tenemos el dinero para ir a la capital Washington, D.C., donde está el presidente”, dijo Esther Govea.
Numerosos partidarios del expresidente se apostaron a lo largo de la ruta de su comitiva, “lo apoyo porque siento que los valores que faltan volverán para mis nietos”, afirmó Debbie Ayala.
Mientras tanto, un grupo de demócratas y activistas se congregó en la calle Sexta para expresar su rechazo al abanderado republicano y sus políticas.
“Me temo que lo que ha estado sucediendo en nuestro país es que la gente está tan dividida y hostil entre sí. Antes de que él fuera presidente, el país era bastante bueno”, dijo Linda Baker, detractora de Donald Trump. “Están en juego las vidas de las personas, de las mujeres, de los inmigrantes. las personas que estuvieron aquí antes que nosotros eran inmigrantes, incluido él y toda su familia, todos lo somos, excepto los nativos de esta tierra”.
Tras la conferencia, se esperaba que Trump grabara un episodio del popular podcast del comediante Joe Rogan en un esfuerzo de llegar a los votantes jóvenes.
“Este tipo de cosas son las que van a marcar la diferencia en una elección que, de lo contrario, probablemente será muy reñida”, dijo Blank.
Finalmente, la campaña decidió hacer la grabación en el aeropuerto y luego Trump partió a Michigan.