El magnate Donald Trump ganó las elecciones presidenciales en los Estados Unidos tras imponerse en los siete estados claves sobre la demócrata y vicepresidenta del actual Gobierno, Kamala Harris.
El candidato republicano, que ya se aseguró el regreso a la Casa Blanca, hasta el momento cuenta con 277 votos electorales frente a los 224 de su rival. Para eso fue determinante que se volcaran a su favor las votaciones de los considerados swing states (estados indecisos).
Los estados donde se habían planteado mayores dudas sobre quién sería el ganador eran Arizona, Georgia, Michigan, Nevada, Carolina del Norte, Pensilvania y Wisconsin. Se utiliza el término “swing”, porque puede que en una elección gane un demócrata y en otra gane un republicano.
También suele llamarse a estos estados “campos de batalla” (battlegrounds), ya que generalmente se ganan por pequeños márgenes y definen la elección.
Con el 60.39% escrutado hasta el momento, Trump se impuso en Arizona con el 51.9% frente al 47.2% de Harris, cuyo estado lleva al colegio electoral 11 de los 538 delegados. En Georgia, que lleva al colegio electoral 16 representantes, el escrutinio está prácticamente cerrado, el republicano alcanzó el 50.8% ante el 48.5% de su rival.
En Míchigan, que lleva al colegio electoral 15 representantes, se escrutó el 96.81% y Trump alcanzó el 50.0% frente al 48.2% de Kamala Harris. El estado de los Grandes Lagos ha elegido al candidato presidencial ganador en las dos últimas elecciones. A pesar de respaldar a Biden en 2020, se ha convertido en un símbolo de una reacción nacional por el apoyo del presidente a Israel durante la guerra de ese país en Gaza.
Con el 99% escrutado, el candidato republicano se impuso en Carolina del Norte (16 electores) por el 51.1% ante el 47.7% obtenido por Harris. En tanto, Trump alcanzó el 51.5% en Nevada (6 electores), que ya lleva un escrutinio del 84.1%, frente al 46.8% de la demócrata.
En Pensilvania (19 electores), Donald Trump obtuvo el 50.8%, con el 96.7% escrutado, mientras que su rival cosechó el 48.3%. Finalmente, el ex presidente alcanzó el 49.8% en Wisconsin (10 electores) frente al 48.8% de Harris.
El sistema electoral de Estados Unidos establece que los integrantes del Colegio Electoral son los que definen quién será el próximo Presidente. Con un total de 538 miembros en este organismo, un candidato necesita alcanzar al menos 270 votos para ganar. Trump se aseguró su regreso a la Casa Blanca cuando la tendencia en Wisconsin se volvió irreversible y se llevó sus 10 electores para alcanzar los 277, mientras aún quedaban estados por definir.
¿Cómo funciona el Colegio Electoral de Estados Unidos?
Cuando los estadounidenses emiten su voto, en realidad están votando por una lista de electores designados por los partidos políticos de su estado, que se comprometen a apoyar al candidato de ese partido.
En todos los estados y Washington D.C., excepto Maine y Nebraska, el candidato que recibe más votos populares consigue todos los votos electorales de ese estado. Esto se llama “sistema de ganador por estado”.
Esto lleva a un intenso enfoque en los estados clave en el campo de batalla, ya que los candidatos buscan aumentar su ventaja electoral apuntando a los estados que pueden ayudarles a alcanzar los 270 votos necesarios del total de 538 que hay en juego.
El mecanismo comienza con las celebración de las elecciones, donde los votos emitidos por los ciudadanos forman parte de un conteo estatal. Luego, son los 538 representantes los que se reúnen en una asamblea y votan por el Presidente y el Vicepresidente de la Nación.
D.D.