La ciudad de Nueva York ha generado controversia al anunciar la cancelación de un programa piloto diseñado para apoyar a los migrantes más necesitados. Esta iniciativa, que ofrecía tarjetas de débito prepagas para cubrir alimentos y artículos básicos, surgió como una respuesta de emergencia ante el incremento de solicitantes de asilo en la ciudad. A pesar de su objetivo, el programa enfrentó críticas por su elevado costo y la manera en que se implementó, dejando a muchas familias en incertidumbre sobre cómo satisfacer sus necesidades esenciales tras su eliminación.
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Aunque el alcalde Eric Adams no detalló las razones específicas para dar por terminado el programa de tarjetas de débito prepagas, un portavoz del Ayuntamiento de Nueva York señaló que la decisión está relacionada con la transición hacia contratos más competitivos para apoyar a los solicitantes de asilo. Según declaraciones difundidas por CBS News, el contrato de emergencia que respaldaba esta iniciativa no será extendido al concluir su primer año de vigencia. Sin embargo, no se precisó la fecha exacta en que el programa dejará de operar.
A pesar del cierre, el Ayuntamiento subrayó que seguirán explorando proyectos piloto innovadores, como el programa de tarjetas de respuesta inmediata, para atender las necesidades de las personas migrantes que continúan llegando a la ciudad en gran número.
Inmigrantes protestan en las calles de Nueva York.
JUSTIN LANE / EFE
Este programa, administrado por Mobility Capital Finance (MoCaFi), había sido señalado por sus altos costos y por el contrato sin licitación bajo el cual se adjudicó a la empresa cerca de 400 mil dólares. La iniciativa nació como una opción más práctica y económica que el sistema previo de entrega de cajas de alimentos, el cual no siempre lograba satisfacer las preferencias de las familias beneficiarias.
Migrantes en Nueva York, entre la incertidumbre y la necesidad
El fin del programa de tarjetas prepagas deja a muchas familias migrantes enfrentando mayores retos en su día a día. Desde su implementación, esta iniciativa logró apoyar a cerca de 2600 familias alojadas en hoteles financiados por la ciudad, proporcionando recursos esenciales para su subsistencia. Sin embargo, su conclusión genera incertidumbre y ha sido objeto de debate entre defensores de los derechos de los migrantes y críticos del uso de recursos públicos.
Aspectos clave del impacto del programa:
- Apoyo brindado: Se distribuyeron tarjetas prepagas por un total de 3,2 millones de dólares desde marzo pasado, beneficiando a familias con una ayuda semanal promedio de 350 dólares para un grupo de cuatro personas.
- Situación actual de los beneficiarios: Muchas de las familias que recibían este apoyo carecen de estatus legal en EE.UU., lo que dificulta su acceso a empleos formales y otros programas de asistencia.
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- Respuesta de las autoridades: Ante la suspensión del programa, se espera que la ciudad implemente nuevas alternativas, aunque hasta ahora no se ha anunciado un plan concreto.
- Preocupación de organizaciones: Grupos que defienden a los inmigrantes han advertido sobre el impacto negativo que esta decisión podría tener en las familias más vulnerables.
