Nick Hague, de la NASA, y Alexander Gorbunov, de Rusia, son los encargados de recoger a Butch Wilmore y Suni Williams, quienes no pudieron regresar por problemas en su vuelo y están viviendo en el espacio desde marzo. Reviva las imágenes del despegue.
Por Marcia Dunn — The Associated Press
SpaceX lanzó con éxito este sábado una misión de rescate para los dos astronautas atrapados en la Estación Espacial Internacional, enviando una tripulación reducida para traerlos a casa… pero eso no sucederá hasta el próximo año.
La cápsula se puso en órbita para recoger a los pilotos de prueba cuya nave espacial Boeing regresó a la Tierra vacía, a principios de este mes, debido a problemas de seguridad. Nick Hague, de la NASA, y Alexander Gorbunov, de Rusia, son los encargados de recoger a Butch Wilmore y Suni Williams.
Como la NASA rota las tripulaciones de la estación espacial aproximadamente cada seis meses, este vuelo recién lanzado con dos asientos vacíos reservados para Wilmore y Williams no regresará hasta finales de febrero. Los funcionarios dijeron que no había manera de traerlos de vuelta antes en SpaceX sin interrumpir otras misiones programadas.
Para cuando regresen, la pareja habrá pasado más de ocho meses en el espacio. Cuando se inscribieron para el primer vuelo de astronautas de Boeing, que despegó en junio, esperaban estar fuera sólo una semana.
¿En qué consiste la misión?
Se trata de la primera misión de vuelos espaciales tripulados lanzada desde el Complejo de Lanzamiento Espacial 40. Los astronautas regresarán a la Tierra como parte de este vuelo tripulado en febrero de 2025.
Los veteranos astronautas Williams y Wilmore viajaron al espacio a bordo de la nave Starliner de Boeing en junio de este año para una misión de ocho días. Sin embargo, el Starliner se enfrentó a problemas técnicos y regresó sin su tripulación para garantizar la seguridad de los astronautas.
Hague y Gorbunov se dirigirán a la Estación Espacial Internacional a bordo de la nave Dragon. Conocido por su reutilización y fiabilidad, el cohete Falcon-9 transportará a estos dos astronautas y tendrá dos asientos de repuesto para Williams y Willmore.
Esta misión será otro hito en la asociación de SpaceX con la NASA, demostrando las capacidades de la nave espacial Dragon, que ha desempeñado un papel importante para facilitar los vuelos espaciales tripulados desde su primer viaje tripulado en 2020.
Anteriormente, Hague dijo: “El foco de esfuerzo en las últimas tres semanas es qué necesitamos hacer de manera diferente para poder lanzar como una tripulación de dos, como una tripulación sin piloto. Ahora, tenemos que hacer el papel del piloto y del comandante como una sola persona. En última instancia, el comandante tiene la responsabilidad de asegurarse de que la tripulación está a salvo y tomar decisiones al respecto”.
Inicialmente, la nave iba a despegar con cuatro miembros. Pero, las dificultades con Starliner obligaron a la NASA a alterar sus planes. El cambio en la misión original obligó a los cuatro astronautas a entrenarse para llevar a cabo con éxito la misión.
La agencia espacial estadounidense añadió que, en febrero de 2025, Hague, Gorbunov, Wilmore y Williams subirán a bordo de Dragon y se desacoplarán de forma autónoma, abandonarán la estación espacial y volverán a entrar en la atmósfera terrestre.
La NASA decidió finalmente que el Starliner de Boeing era demasiado arriesgado después de que una serie de problemas con los propulsores y fugas de helio estropearon su viaje al complejo orbital. La agencia espacial suprimió a dos astronautas de este lanzamiento de SpaceX para tener asientos disponibles en el trayecto de vuelta a Wilmore y Williams.
Desde entonces, Williams ha sido ascendida a comandante de la estación espacial, que pronto volverá a tener su población normal de siete personas. Cuando Hague y Gorbunov lleguen este fin de semana, los cuatro astronautas que viven allí desde marzo podrán partir en su propia cápsula de SpaceX. Su regreso a casa se retrasó un mes por las turbulencias del Starliner.
Hague señaló antes del vuelo que el cambio es la única constante en los vuelos espaciales tripulados.
“Siempre hay algo que cambia. Quizá esta vez ha sido un poco más visible para el público”, dijo.
Hague asumió el puesto de comandante de la misión de rescate gracias a su experiencia y a la gestión de una emergencia en el lanzamiento de hace seis años. Un cohete ruso falló poco después del despegue, y la cápsula que lo transportaba a él y a un cosmonauta salió catapultada hacia un lugar seguro.
La astronauta novata de la NASA Zena Cardman y la veterana aviadora espacial Stephanie Wilson fueron retiradas de este vuelo después de que la NASA optara por usar los servicios de SpaceX para traer a casa a los astronautas atrapados. Según la agencia espacial, ambas podrán participar en futuras misiones. Gorbunov permaneció bajo un acuerdo de intercambio entre la NASA y la Agencia Espacial Rusa.
“No sé exactamente cuándo será mi lanzamiento al espacio, pero sé que llegaré”, dijo Cardman desde el Centro Espacial Kennedy de la NASA, donde participó en la transmisión en directo del lanzamiento. Wilson la acompañó en el despegue a primera hora de la tarde.
“Un viaje dulce”
Momentos antes del despegue, Hague rindió homenaje a sus dos colegas que quedaron atrás: “Inquebrantables. Lo hicimos juntos”. Una vez en órbita, lo calificó de “viaje dulce” y dio las gracias a todos los que lo habían hecho posible.
Antes, Hague reconoció los retos de despegar con media tripulación y regresar con dos astronautas entrenados en otra nave espacial.
“Tenemos ante nosotros un reto dinámico”, dijo Hague tras llegar de Houston el pasado fin de semana. “Nos conocemos y somos profesionales y damos un paso adelante y hacemos lo que se nos pide”.
SpaceX ha sido durante mucho tiempo el líder del programa de tripulación comercial de la NASA, establecido cuando los transbordadores espaciales se estaban retirando hace más de una década. SpaceX se adelantó a Boeing en la entrega de astronautas a la estación espacial en 2020 y ya lleva 10 vuelos tripulados para la NASA.
Boeing ha luchado con una variedad de problemas a lo largo de los años, repitiendo un vuelo de prueba Starliner sin nadie a bordo después de que el primero se desviara de su curso. El Starliner que dejó a Wilmore y Williams en el espacio aterrizó sin problemas en el desierto de Nuevo México el 6 de septiembre, y desde entonces ha regresado al Centro Espacial Kennedy. Hace una semana, el jefe de defensa y espacio de Boeing fue sustituido.
Retrasado por el huracán Helene que azota Florida, el último despegue de SpaceX fue el primero para astronautas desde el Complejo de Lanzamiento 40 de la Estación Espacial de Cabo Cañaveral. SpaceX se hizo cargo de la antigua plataforma de cohetes Titán hace casi dos décadas y la utilizó para el lanzamiento de satélites, mientras que las tripulaciones volaban desde la antigua plataforma Apolo y del transbordador de Kennedy, situada al lado. La empresa quería más flexibilidad a medida que se disparaban más cohetes Falcon.
