Roma amanecía con la mezcla de emociones de una intensa jornada inicial en el que España vivió la contraposición del regusto amargo y la alegría desmedida. Un bronce perdido en el último metro y un bronce ganado a la misma distancia de la línea de meta. Sin tiempo para más, el Estadio Olímpico daba el pistoletazo de salida a otro día de emociones, medallas, sinsabores, sorpresas, éxitos y fracasos. Diecinueve españoles saltarían a la pista, 13 ‘debutantes’ y 6 que ya habían participado el viernes. La pelea por medallas llegaría por la tarde, la búsqueda de esa fase era en parte cosa de la mañana.
Cinco atletas de la RFEA tenían el despertador puesto en la matinal. Dani Arce, Fernando Carro y Alejandro Quijada (3.000 obstáculos), Maribel Pérez (100 metros) y Berta Segura (400). Los tres primeros buscaban uno de los 16 billetes (8 por serie) que daban acceso a la final del lunes (22:00 horas), las dos chicas su pase a semifinales. Quijada abría el fuego. El campeón de Europa sub-23 debutaba con la Selección en un gran campeonato… pero estuvo lejos de pasar. 14º en meta (8:46.70) en la victoria del francés, Bedrani (8:33.63), el gran rival a priori de Arce en la pelea por las medallas.
Precisamente el burgalés de 32 años no quería dejar nada al azar y salió en cabeza en su eliminatoria, muy bien secundado por Carro. El madrileño (32 años), subcampeón de Europa en Berlín 2018, parecía volver a ser el que era en la prueba de obstáculos después de muchos cambios personales y coquetear con distancias más largas, pero en Roma tuvo problemas inesperados. Evitó a un rival teniendo que dar un doble salto en la ría, se chocó con un obstáculo… y sufrió una herida abierta en la tibia de la pierna izquierda que le obligó a retirarse. “No sé ni cómo ni con qué. Un clavo, el obstáculo… el tatuaje ha evitado que se abriera más la herida. Me han dado cinco puntos de sutura”, decía a AS.
En la situación exactamente opuesta, Arce. Victoria contundente y pase a la final dando una gran muestra de fuerza con 8:21.46. “Semifinal superada en una carrera difícil de correr con gente de mucho nivel. Decidí salir delante para intentar quitarme muchos golpes y así llegar a las mejores condiciones a la final. Buenas sensaciones,pero no hay que confiarse con ninguno de los 15 rivales que tendré en la final”, decía Arce. De manera mucho menos brillante y con más inconvenientes que Dani superaba la primera ronda Maribel Pérez en los 100 metros. Cuarta en su serie con 11.41. “En la salida de prueba me ha pinchado el abductor y encima me han dado la salida en falso. Me he salido mentalmente, pero al menos he podido pasar a semifinales y a ver qué me dicen los servicios médicos. Esperemos poder solucionarlo para correr las semifinales”, explicaba la sevillana.
La última representante de la mañana fue Berta Segura. La catalana de 21 años voló en su serie del 400 para entrar tercera con marca personal (51.92), séptima mejor marca española de todos los tiempos. Billete directo a semifinales con el cuarto tiempo de todas las contendientes teniendo en cuenta, eso sí, que el Top 12 se saltaba esta fase. La brava Segura fue hasta el 300 claramente en cabeza con muy buenos parciales: 100 (12.70), 200 (24.58 con 11.88 en ese parcial), 300 (37.54, 12.96 en ese parcial) y 51.92 en meta (14.38 en el último 100).
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