No es un secreto que el Carancho es un ave rapaz que caza presas para alimentarse, lo que la convierte en una parte importante de los ecosistemas en los que viven tras resultar un grupo de depredadores activos que se alimentan de pequeños mamíferos, reptiles, insectos y aves. Les gusta habitar en un ambiente de clima frío, húmedo y fuertes vientos.
Este pájaro de gran belleza y habilidad, que se encuentra en una amplia variedad de hábitats en América del Sur, se destaca por tener un plumaje marrón claro y su característica cresta en la cabeza. ¿Por qué suele llamar mucho la atención? Por el espectáculo impresionante en vuelo que realiza gracias a sus alas largas y estrechas que le permiten planear durante largos períodos.
Su nombre científico es Phalcoboenus Australis, proveniente de la familia Falconidae, que se caracteriza por adaptarse a diferentes entornos y contar con 10 especies diferentes hasta ahora descriptas. Su área de distribución va desde el sur de los Estados Unidos hasta el fin del mundo, haciendo referencia a las islas de Argentina y Chile.
¿Por qué esta ave tiene mala fama? Si bien vivió aislada de la humanidad por miles de años, sin tener contacto alguno con los seres humanos, todo indica que esto es una simple percepción de personas que no saben convivir con otras especies. “Los Caranchos no le hacen daño a los humanos. Solo cuando una persona se acerca al nido, los adultos pueden golpearla”, explicó el doctor en ciencias biológicas Ulises Balza en exclusiva para el portal digital de Infobae.
Según la estación del año, la alimentación del Carancho varía y esto puede afectar a su dieta, es decir, se considera un problema a futuro en relación a su población. “Los ejemplares juveniles o los que no se reproducen sí se alimentan de animales ya muertos. En cambio, cuando se trata de ejemplares que están reproduciéndose, son totalmente cazadores”, apostilló el biólogo para dicho medio de comunicación.
Por último, es cierto que muchos consideran erróneamente que este pájaro solo se alimenta de carroña, pero puede hacer caza cooperativa para predar en torno a las aves de mayor tamaño, tales como los Coscorobas o las Garzas Moras. Además, a menudo roba huevos de nidos y ayuda a controlar plagas tras atrapar animales perjudiciales para la salud del ser humano, como ratas o palomas domésticas.