Starlink, el servicio de internet satelital, gana cada vez más adeptos con el paso del tiempo. Particularmente en estados que combinan áreas rurales con urbanas, en las que hay conectividades flexibles o a veces inexistentes.
En Orlando, los usuarios que cuenten con el servicio de Starlink deben pagar US$120 al mes por el plan residencial estándar. Este ofrece velocidades de descarga que oscilan entre los 20 y 150 Mbps y una capacidad de datos ilimitada.
Sumado a la tarifa mensual, hay que agregar el costo inicial del equipo, que incluye el receptor parabólico y el router y su precio es de US$599. El arancel total puede ser financiado en cuotas mensuales de US$50 para poder fraccionar el pago y facilitar el acceso a más personas, según Starlink.
Starlink dispone también de planes adicionales. Por ejemplo el plan Roam, que fue diseñado para usuarios que necesitan conexión mientras están en movimiento, que tiene un valor de US$150 al mes. A su vez, existen opciones empresariales más costosas, que están dirigidas a clientes con mayores necesidades de datos y prioridades de conexión, con precios que pueden alcanzar hasta los US$500 al mes. La variación es porque depende del uso y de la velocidad requerida.
Entre los principales puntos a favor del servicio de internet satelital de Elon Musk se encuentra la buena capacidad del sistema para causar un impacto positivo en áreas complejas. En la situación puntual de Florida, posee varias comunidades rurales dispersas y una alta incidencia de fenómenos naturales como huracanes.
Este es un mercado ideal para Starlink debido a que su tecnología de satélites de órbita baja permite proporcionar una conexión más estable y rápida en este tipo de sitios. Es una oportunidad de acceso confiable, incluso en momentos de emergencia, porque puede permitir el mantenimiento de las comunicaciones en épocas de desastres naturales.
En cuanto a los inconvenientes que los potenciales clientes deben saber, se destaca el mencionado costo elevado que puede ser imposible de costear para familias de bajos ingresos. Además, en muchos casos la velocidad del internet en las zonas rurales es menor que en las urbanas, en donde se le da un mayor mantenimiento al servicio.