La contracrónica del Barcelona-Leganés
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LUIS F. ROJO
Actualizado
El Barcelona volvió a estrellarse. Y no será que no estaban advertidos porque en los anteriores cinco partidos solamente habían sido capaces de ganar uno. Pues a pesar de estos antecedentes, el equipo de Flick, aunque era Sorg el que estaba en el banquillo, salió dormido como si la cosa no fuera con ellos. A los tres minutos Iñaki Peña salvó al equipo en un mano a mano con Munir y del córner que provocó, el Leganés se adelantó en el marcador de jugada de estrategia haciendo valer un excepcional bloqueo sobre Sergio González.
A partir de aquí, un drama. Porque quedaban 86 minutos por jugarse y había tiempo para todo. Pero este Barça está ‘missing’. Lewandowski ha desaparecido en los últimos partidos, Raphinha lo intenta, Olmo también… pero de ahí no pasaron. El banquillo no aportó nada. Ferran esta vez no fue revulsivo como en los partidos anteriores; Gavi ofrece fuerza y ya está y Frenkie de Jong ni siquiera jugó. Lo del neerlandés empieza a ser el gran misterio de este equipo. El Barça no reacciona y está empezando a rifar el liderato. El Atleti ya le ha empatado a puntos. Un drama inexplicable.
Mal regreso el de Eric García. El defensa volvió al centro de la zaga después de meses de no jugar en esta posición porque cuando había salido Flick le utilizó como pivote. Entró en el lugar de Cubarsí y a los cuatro minutos no pudo seguir su marca sobre Sergio González que marco el único gol del partido.
Hay veces que no hace falta decir una palabra para echar una bronca. Sucedió a la hora de partido cuando Casadó tenía que sacar una falta y en vez de hacerlo estaba enzarzado en una discusión con el banquillo rival. Pedri fue a toda velocidad a por el balón lo plantó en el suelo y sacó rápido sin dirigir palabra a Casadó. Ya lo había dicho Flick en la previa, no quiere a sus jugadores discutiendo con los árbitros o contrarios.
¿Peroque le pasa a Lewandowski? Está irreconocible. Cuesta creer lo que le está sucediendo al polaco. Otra vez se fue al banquillo antes de tiempo cuando faltaban 25 minutos para la conclusión. Nada que objetar. El polaco falló frente al Leganés ocasiones clarísimas impropias del Pichichi de la competición.
Lo de Dmitrovic fue de traca. Hay veces que un portero le come la moral a los delanteros y eso sucedió en Montjuïc. El guardameta del Leganés fue una de las claves del partido. Sobre en todo en la primera parte en la que hizo tres paradas de enorme mérito. Dos a Lewandowski y una manopla excepcional a Raphinha.
