Ayrton Senna logró reconocimiento y fama mundial por ser uno de los mejores pilotos de la Fórmula 1 de la historia. Sin embargo, también fue un hombre atractivo para muchas mujeres, y con varias de ellas mantuvo romances que se volvieron noticia.
La primera pareja del brasileño fue Lilian de Vasconcelos Souza, la única con la que se casó y a quien conoció cuando era un niño. Se unieron en matrimonio el 10 de febrero de 1981, cuando la estrella aún no era parte de la Fórmula 1, y la fiesta se realizó en la casa de la familia Senna.
“No amaba a Ayrton porque era un piloto de carreras, amaba al chico que siempre vivió en mi corazón”, comentó la mujer a la prensa muchos años después de su trágica muerte. La pareja se disolvió en 1982.
La siguiente relación del corredor fue la que mantuvo con Adriane Yamin, pero esta fue secreta y se reveló después de la muerte. “Mi chica” es como la llamaba el famoso y ambos se conocieron en el barco de la familia de ella.
“Mi padre y el de Ayrton fueron vecinos en mi infancia y aunque sus vidas se distanciaron a medida que prosperaron, se formó una gran admiración mutua y mantuvieron su vínculo. Muchos años después, mi padre se cruzó con Ayrton caminando por Playa Dos Macacos en Angra dos Reis, lo reconoció, lo saludó y lo invitó a acompañarnos al día siguiente. Fue entonces cuando Ayrton y yo nos conocimos”, manifestó Yamin.
En 1988 llegó para Senna uno de los amores más fuertes que vivió: Xuxa. La presentadora y animadora infantil estaba en la cúspide de su fama cuando se reunió por primera vez con el corredor, para organizar lo que sería un especial de Navidad que lo tendría como invitado.
Juntos fueron tapa de revistas de todo el mundo, y si bien soñaban con formalizar, sus carreras tan distintas y ajetreadas los separaron. “Puedo decir que una sola vez en toda mi vida sentí aquí dentro el deseo de tener una nueva familia. Una sola vez en toda mi vida soñé con tener un hijo. Fue con ella. Con Xuxa”, manifestó el nacido en Sao Pablo en una entrevista con la revista Playboy.
Los últimos años de la vida del piloto transcurrieron al lado de Adriane Galisteu, una joven de 19 años que llegó para darle alegría y relajación a un hombre de 34 que ya estaba en la cúspide y tenía una agenda laboral complicada.
Senna tenía planeado pedirle matrimonio a su novia, pero encontró la muerte de forma trágica en 1994, y los sueños de ambos quedaron truncos: “La última llamada de él fue para mí, 20 minutos antes de entrar en la pista. Él estaba muy nervioso. En los días anteriores, Ubinho (Rubens Barrichello) había sufrido un accidente grave y Ratzenberger había muerto en la pista. Ayrton estaba desesperado”, reveló Galisteu sobre el deceso de la leyenda.