Del 20 al 22 de agosto de 2024 se llevó a cabo la Expo MED | Hospitalar México 2024, un evento que reunió a más de 160 expositores, entre ellos fabricantes, distribuidores y proveedores nacionales e internacionales, quienes mostraron las últimas tecnologías para todas las especialidades médicas y la administración hospitalaria. Su éxito se debió a paneles de discusión como el titulado “Innovaciones tecnológicas indispensables para los hospitales del mañana”, conformado por personalidades del sector salud como Iván Zavala, Head of Innovation en Hospitales MAC; Alejandro Hernández, responsable del negocio de salud para Latinoamérica Norte en Nuance, Microsoft; Enrique Culebro, fundador de Central Media; y Carlos Medina, presidente del Capítulo HL7 México.
El tema central del panel fue cómo usar la inteligencia artificial (IA) en la atención hospitalaria y aprovechar sus ventajas para cerrar brechas de acceso a la salud en México. Aunque existen tecnologías en las instituciones de salud y datos que se pueden consultar, la información está relacionada principalmente con reportes epidemiológicos y no tanto con la operación o comunicación entre hospitales.
Además, los programas de atención hospitalaria tienen aproximadamente 10 años de antigüedad, por lo que es crucial acelerar el cambio y comenzar a usar infraestructura que optimice los procesos y brinde una mejor atención al paciente. Todos los expertos invitados coincidieron en que la IA debe estar presente en las siguientes áreas:
– Área administrativa: La tecnología puede ayudar a realizar tareas tan sencillas como tomar notas durante la consulta, crear historiales clínicos electrónicos o alimentar una base de datos con información personal de los pacientes, medicamentos recetados, seguro de gastos médicos, etcétera. Esto permitiría a los especialistas consultar la información sin importar el lugar en que se encuentren.
– Análisis financiero: Los datos recolectados a través de estudios de laboratorio o del expediente clínico electrónico del paciente pueden ayudar a predecir qué tipo de enfermedades se desarrollarán en el futuro y cuáles necesitarán más recursos.
– Diagnósticos: A través de datos recopilados de archivos y comunicación de imágenes (PACS), reportes de patología o análisis farmacogenéticos, entre otros estudios, los algoritmos de IA realizan un diagnóstico que debe ser confirmado por el médico para tomar decisiones respecto al tratamiento de los pacientes.
De acuerdo con los expertos, el paciente mexicano está muy interesado en buscar sus síntomas en internet y utiliza herramientas digitales para conocer más sobre su padecimiento; por lo tanto, el uso de la inteligencia artificial en la salud no solo se limita a las instituciones, sino que también transforma la forma en que el paciente se involucra con sus médicos y hospitales.
Aunque ya existen tecnologías relacionadas con la salud, como redes sociales, tutoriales en plataformas de video y servicios de mensajería para enviar resultados de análisis, la industria debe aspirar a interconectar diferentes sistemas y hacerlos operables para todos, es decir, asegurar que cualquier especialista pueda dar seguimiento al expediente.
Un punto importante al que llegaron los panelistas es que tanto los profesionales de la salud como gobernantes e instituciones privadas relacionadas con el sector médico deben analizar la tecnología disponible en el mercado y adquirir la que más les convenga después de realizar una investigación que permita identificar las necesidades reales de la institución.
También mencionaron que uno de los retos es convencer a médicos y pacientes de los beneficios de la tecnología en la salud, ya que algunos aún encuentran complejo su uso, no están familiarizados con las plataformas y prefieren métodos tradicionales de seguimiento médico.
A manera de conclusión, los panelistas mencionaron que la inclusión de la inteligencia artificial en la atención hospitalaria debe ser un esfuerzo conjunto: Es necesario acercarse a las áreas operativas de los hospitales, a las autoridades regulatorias para facilitar la incorporación de estas plataformas tecnológicas, a los médicos y especialistas para que puedan actualizarse, y al paciente para escuchar sus demandas y necesidades; además, hicieron énfasis en que los expertos no deben confiar completamente en el diagnóstico de la inteligencia artificial, ya que se trata de un modelo de información predictiva que no analiza la información, sino que solo arroja datos generales o poco precisos que deben ser estudiados por los médicos para tomar decisiones acertadas sobre el tratamiento del paciente.
