Casi 70 personas migrantes murieron cuando su barco se hundió mientras intentaban llegar a España este mes, dijeron autoridades malienses.
En un comunicado de prensa emitido este jueves, el ministro de Malí para los malienses residentes en el extranjero, Mossa Ag Attaher, anunció que un barco de migrantes con destino a España se hundió el pasado 19 de diciembre. Los migrantes en este barco “eran 80 al inicio, con solo 11 sobrevivientes”, según el Ministerio. Las autoridades malienses han identificado a nueve nacionales entre los supervivientes, y “lamentablemente, 25 jóvenes malienses han sido formalmente identificados entre las víctimas“, añadió el ministro.
La ruta atlántica para los migrantesde África Occidental hacia las Islas Canarias es una de las más mortales del mundo. Ubicado más cerca de África que la península española, el archipiélago es visto por la mayoría como un paso hacia Europa continental. Muchos de los que emprenden el viaje provienen de Malí, Senegal, Mauritania y otros países de África Occidental, buscando mejores oportunidades laborales en el extranjero o huyendo de la violencia y la inestabilidad política.
El grupo español de defensa de los derechos de los migrantes Caminando Fronteras reveló recientemente que 10.457 migrantes murieron en el mar mientras intentaban llegar a España en 2024, lo que supone un aumento del 58% de las muertes en comparación con el año pasado.
“Les animaron a venir”
Varias de las víctimas malíes del naufragio del 19 de diciembre son de la región de Kayes, en el oeste de Malí, según Doulaye Keita, asesor del Ministerio, en declaraciones a AP este viernes. “Entre los 25 malienses fallecidos (confirmados), hay ocho de mi comuna”, dijo Mamadou Siby, alcalde de la comuna de Marena en la región de Kayes, a la agencia.
“Estos jóvenes fallecidos dejaron mi comuna hace siete meses para trabajar en la industria de la construcción en Mauritania. Desafortunadamente, estuvieron en contacto con sus amigos en Europa y Estados Unidos, quienes les animaron a venir a estos países, y en la mayoría de los casos, emprendieron el peligroso viaje sin siquiera informar a sus familias en casa”.
Caminando Fronteras destacó en su informe un “fuerte aumento” de las embarcaciones que zarparon de Mauritania en 2024, el principal punto de partida de los migrantes hacia as Islas Canarias. En febrero, España prometió una ayuda de 210 millones de euros a Mauritania para ayudar a frenar el tráfico de personas y evitar la salida de embarcaciones.