Por Char Adams —NBC News
En sus últimos meses en la Casa Blanca, el presidente, Joe Biden, hace un último esfuerzo para confirmar a los nominados judiciales, y está por convertirse en el mandatario que más jueces federales de minorías étnicas o raciales ha elegido en Estados Unidos.
El lunes, el Senado confirmó a la nominada judicial de Biden para el Distrito Norte de Georgia, Tiffany Johnson, convirtiéndola en la 40.ª mujer negra que ha nombrado para cargos de juez federal vitalicios, más que cualquier presidente en un solo mandato.
En general, cerca del 60% de los 233 designados por Biden son personas no blancas, según cifras que la Casa Blanca compartió con nuestra cadena hermana, NBC News. Benjamin Cheeks y Serena Raquel Murillo, otros dos nominados para juez de distrito de Estados Unidos, esperan la confirmación del Senado después de que el Comité Judicial del Senado presentara sus nominaciones el jueves. Si se aprueba a Cheeks, Biden habrá designado a 63 jueces federales negros, la mayor cantidad en una presidencia de cualquier duración, según la Conferencia de Liderazgo sobre Derechos Civiles y Humanos.
El director de comunicaciones de la Casa Blanca, Ben LaBolt, dijo en una declaración enviada por correo electrónico que Biden está “orgulloso de haber fortalecido el poder judicial al hacerlo más representativo del país en su conjunto y que ese legado tendrá un impacto en las próximas décadas”.
“Incluso antes de asumir el cargo, el presidente Biden le indicó al Senado que quería asegurarse de que las personas que históricamente habían sido excluidas de nuestro poder judicial” estuvieran incluidas, comentó Lena Zwarensteyn, directora sénior del programa de tribunales justos y asesora de la Conferencia de Liderazgo sobre Derechos Civiles y Humanos.
“La investigación muestra que cuando hay más jueces que tienen diferentes perspectivas porque han trabajado en diferentes tipos de problemas o provienen de diferentes comunidades, mejora la toma de decisiones y ciertamente mejora la confianza que las comunidades pueden tener en estas instituciones. Por lo tanto, es realmente importante asegurarnos de que tengamos jueces imparciales en todos los niveles”.
Barack Obama nombró a 26 jueces vitalicios negros durante sus dos mandatos, y Donald Trump nombró a dos jueces negros para el tribunal federal en su primer mandato.
Jimmy Carter nombró a 37 jueces vitalicios negros en su único mandato. Tanto Obama como Bill Clinton nombraron a 62 jueces negros cada uno en el transcurso de sus dos mandatos. Si Cheeks es confirmado, Biden batiría su récord por uno, según la Conferencia de Liderazgo.
Estas cifras incluyen a los jueces multirraciales y dan cuenta de los designados para varios tribunales bajo el mismo presidente.
Los demócratas del Senado prometieron confirmar a tantos nominados de Biden como fuera posible antes de que Trump asuma el cargo en enero y los republicanos tomen el control del Senado. Han confirmado a docenas desde el día de las elecciones, pero estos nominados del circuito están en el limbo en medio de cierta oposición de los demócratas y los senadores republicanos.
En noviembre, el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, demócrata por Nueva York, escribió en una publicación en X que “este Senado seguirá trabajando para confirmar a más de los excelentes candidatos judiciales del presidente Biden”.
En una entrevista, Marge Baker, vicepresidenta ejecutiva de People For the American Way, una organización progresista nacional enfocada en combatir el extremismo de extrema derecha, señaló que era crucial que se confirmaran los nominados restantes.
“Aunque estamos muy satisfechos con la calidad y cantidad de los nominados que se han confirmado hasta ahora, estos nominados para los tribunales de circuito también son muy, muy importantes”, señaló Baker. Los cuatro jueces de circuito en el limbo son Adeel Abdullah Mangi de Nueva Jersey, nominado para el Tribunal de Apelaciones del Tercer Circuito; Julia M. Lipez de Maine, 1er Circuito; Karla M. Campbell de Tennessee, 6to Circuito; y Ryan Young Park de Carolina del Norte, 4to Circuito.
“Estos tribunales toman decisiones que afectan las vidas de cientos de millones de personas”, agregó Baker. “Deciden cuestiones sobre el derecho al voto, los derechos de los consumidores, los derechos de los trabajadores, las leyes antimonopolio, el cambio climático, el aborto. Hay toda una gama de cuestiones en las que estos tribunales de apelaciones suelen ser los que toman las decisiones finales”.
Biden se ha propuesto desde hace tiempo, mientras esté en el cargo, remodelar el poder judicial federal, abrumadoramente blanco y masculino, nombrando jueces de diversos orígenes profesionales y demográficos. Lo ha logrado, al confirmar una cantidad récord de exdefensores públicos, abogados de derechos civiles o abogados que representan a trabajadores. Más de la mitad de sus designados han sido mujeres, según la Casa Blanca, y sus nombramientos incluyen a varios jueces LGBTQ y jueces de varios grupos raciales y étnicos minoritarios.
Biden hizo historia al nombrar a la jueza Ketanji Brown Jackson, la primera mujer negra en la Corte Suprema de Estados Unidos. Decenas de sus nombramientos representan varios “primeros” momentos.
“Biden ha sido un líder en términos de nombramiento de jueces negros”, afirmó Dedrick Asante-Muhammad, presidente del Centro Conjunto de Estudios Políticos y Económicos, un grupo de expertos con sede en Washington. “Lo bueno de esto es que estos nombramientos tendrán impactos a largo plazo, al menos en términos de representación. Esto le está mostrando al público que la inclusión de jueces negros debería ser natural, regular”.
Ahora, los expertos dicen que hay mucho en juego, ya que estos nombramientos pueden afectar las decisiones judiciales durante el segundo mandato de Trump.
Elliot Mincberg, experto en la Corte Suprema y asesor de People For the American Way, dijo que los jueces designados por Biden han “tenido un enorme impacto en la mejora de la justicia para los estadounidenses en todo el país”.
Zwarensteyn lo llamó “una parte tremenda y a menudo no discutida” del legado de Biden.
“Realmente lo ha llevado a lo que yo diría que es el siguiente nivel en términos de administraciones que han hecho esto”.