Es el encuentro más esperado, algo además que no se producía desde hacía ocho años, y es que en 2020, la transición de poderes no fue lo más caballerosa que se recuerde. El presidente saliente, el demócrata Joe Biden, ha recibido al presidente entrante, el republicano Donald Trump.
Biden se reunió con el magnate republicano en el Despacho Oval, como marca la tradición, para hablar sobre la transición de poder. El presidente de EE UU, durante su discurso para analizar los resultados de las elecciones del 5 de noviembre ya anunció que la transición sería “ordenada y pacífica”, tal y como se merece el pueblo estadounidense.
Trump no invitó a Biden en 2020
Una deferencia que no tuvo el republicano cuando era el presidente de Estados Unidos y perdió las elecciones frente al demócrata. Lo cierto es que Biden ha tenido un gran gesto con Trump con esta invitación a la Casa Blanca. Su imagen, dándose la mano frente a la lumbre del Despacho Oval es una estampa de un valor incalculable en estos tiempos de polarización.
El futuro mandatario aseguró al actual jefe del Estado que apreciaba mucho que la transición fuera “tan suave como fuera posible”. No sin antes reconocerle que la política “es dura”. “Y en muchos casos no es un mundo agradable, pero hoy es un mundo agradable”.
La conversación que pudo escucharse fue la siguiente: “Bueno, señor presidente electo y expresidente”, empezó Biden. “Muchas gracias, Joe”, contestó Trump. “- Y- Donald, felicitaciones”, prosiguió Biden. “Muchas gracias”, respondió el magnate.
“Y con ganas de tener, como hemos dicho, la transición sin problemas – hacer todo lo posible para asegurarse de que está cómodo, lo que necesita. Vamos a tener la oportunidad de hablar de algo de eso hoy. Así que… Bienvenido. Bienvenido de nuevo”.
“Muchas gracias. La política es dura. Y es, en muchos casos, no es un mundo muy agradable, pero es un mundo agradable hoy. Y lo aprecio mucho – una transición que es tan suave como sea posible. Te lo agradezco mucho, Joe”.
“De nada”, concluyó Biden.
Ucrania, la prioridad para el presidente
En su encuentro a puerta cerrada, ya sin cámaras, Biden le transmitirá a Trump lo importante que es defender a Ucrania. Según el asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, el presidente saliente hará hincapié en que el presidente entrante mantenga la continuidad de la ayuda estadounidense a Ucrania, que se enfrenta a una brutal invasión de Rusia desde febrero de 2022.
Trump dejó esta mañana Mar-A-Lago, su centro de operaciones y residencia en Florida para viajar hasta Washington. A primera hora, el futuro presidente de Estados Unidos se reunió con políticos republicanos en el Congreso.
Allí, presumió de su aplastante victoria. También hizo una broma que no hizo gracia a millones de estadounidenses. “Sospecho que no me presentaré de nuevo a menos que digan que es bueno, entonces pensaremos en otra cosa”, dijo, para mofa de los presentes. En Estados Unidos es ilegal presentarse a unas elecciones después del segundo mandato.
Melania Trump afea el encuentro
Después partió hacia la Casa Blanca, donde llegó tarde. Trump no estuvo acompañado por su esposa, Melania Trump. La actual primera dama, Jill Biden, como también marca la tradición, invitó a su antecesora a tomar el té, pero Melania Trump ha rechazado la cita con Biden. Un hecho que ya apunta a cómo será Melania Trump en esta segunda etapa como primera dama de Estados Unidos.
Con todo, Jill Biden tuvo un detalle con ella. Saludó al magnate republicano al llegar a la residencia presidencial y le dio algo para Melania Trump. “Entregó a Trump una carta manuscrita de felicitación para la señora Trump, en la que también expresaba la disposición de su equipo a ayudar en la transición”, explicó la Casa Blanca a los periodistas de la BBC dice la Casa Blanca.