Policía vigila seguridad del Sugar Bowl tras ataque con auto

No hubo información inmediata de que el Sugar Bowl, programado para iniciar a las 8:45 p.m. del este podría retrasarse. El partido entre el Notre Dame Fighting Irish y los Georgia Bulldogs es parte de los Cuartos de Final del College Football Playoff.

Una persona familiarizada con la situación dijo a The Associated Press que no había señales de que el partido se retrasaría, pero que los oficiales estaban esperando obtener autorización de las autoridades que sería seguro mantener el evento en el estadio con capacidad para 70,000 personas según lo programado. La persona habló con AP con la condición del anonimato debido a la naturaleza sensible y fluida de las discusiones con las autoridades.

La comisionada de la policía de New Orleans, Anne Kirkpatrick, señaló este miércoles que el Sugar Bowl se jugaría según lo programado.

La policía de Atlanta emitió un comunicado señalando que desplegaría unidades especializadas y personal adicional al área alrededor del Mercedes-Benz Stadium este miércoles. Atlanta recibe otro partido de los Cuartos de Final del College Football Playoff con el Peach Bowl, en el que los Texas Longhorns enfrentan a los Arizona State Sun Devils.

El ataque ocurrió alrededor de las 3:15 a.m., hora del centro, este miércoles en el distrito del Barrio Francés de New Orleans, conocido en todo el mundo como uno de los mayores destinos para las fiestas de la víspera de Año Nuevo. El conductor del vehículo murió en un tiroteo con la policía después del ataque, señaló el FBI, agregando que estaba realizando una investigación “con nuestros compañeros para investigar esto como un acto de terrorismo”.

Después de que el vehículo se detuvo, el conductor salió de la camioneta y abrió fuego contra los oficiales que respondieron, indicó la policía de New Orleans. Los oficiales respondieron el fuego y el conductor fue abatido a tiros, refirió la policía.

“Estaba empeñado en crear la carnicería y el daño que causó”, sentenció Kirkpatrick. “Fue un comportamiento intencional. Este hombre estaba tratando de arrollar tantas personas como pudiera”.

Alethea Duncan, agente especial asistente a cargo de la oficina del FBI en New Orleans, dijo que los oficiales estaban investigando el descubrimiento de al menos un presunto artefacto explosivo improvisado en el lugar.

NOLA Ready, el departamento de preparación para emergencias de la ciudad, indicó que los lesionados habían sido trasladados a cinco hospitales locales. Dos oficiales de policía que recibieron disparos después de que el conductor salió del vehículo se encuentran en condición estable, informó Kirkpatrick.

“El comité del Sugar Bowl está devastado por los terribles acontecimientos que ocurrieron esta madrugada”, declaró el CEO del Sugar Bowl, Jeff Hundley, a través de un comunicado. “Nuestros pensamientos y oraciones están con las víctimas y sus familias. Estamos en conversaciones con las autoridades a nivel local, estatal y federal y comunicaremos más detalles a medida que estén disponibles.”

Los equipos de Georgia y Notre Dame llegaron a New Orleans el domingo y se han alojado en hoteles del centro de la ciudad a pocas cuadras de donde ocurrió el acto.

La Universidad de Georgia refirió en un comunicado que estaba “horrorizada y entristecida por el acto de violencia sin sentido”.

“El personal de la universidad está trabajando para determinar si algún estudiante, profesor, personal, exalumno o aficionado estaba entre las víctimas”, informó la escuela. “Ofrecemos nuestras más profundas condolencias a todas las víctimas y sus familias, nos solidarizamos con la comunidad de New Orleans“.

El presidente de Notre Dame, el reverendo Robert A. Dowd, indicó que las “oraciones de la escuela están con los familiares y seres queridos de todos aquellos afectados por el terrible ataque en New Orleans esta madrugada. También oramos por todos los lesionados y extendemos nuestra más profunda gratitud a los valientes rescatistas que arriesgaron sus vidas para proteger a los demás”.

Como parte del cierre, personas con oficinas en el Superdome –incluyendo oficiales del Sugar Bowl y de la Sun Belt Conference– fueron informados que no fueran a trabajar hasta nuevo aviso.

El Superdome, que está a unas 20 cuadras del lugar de los ataques de este miércoles, también está programado para recibir el Super Bowl el 9 de febrero.

“Lo que verán hoy con el Sugar Bowl, que se realizará, es que el perímetro de seguridad alrededor del Superdome se ha extendido para ser una zona más grande”, expresó la alcaldesa de New Orleans, Helena Moreno, a la WDSU-TV. “Así que, obviamente, esperen seguridad adicional. Están llegando más oficiales de policía”.

La Casa Blanca dijo que el presidente Joe Biden había sido informado sobre el ataque, y el Departamento de Justicia señaló que el fiscal general Merrick Garland también estaba al tanto.

Biden, hablando con la prensa en Delaware, refirió que sentía “ira y frustración” por el ataque, pero que se abstendría de realizar más comentarios hasta que tuviera mayor información.

“Mi corazón está con las víctimas y sus familias que simplemente estaban tratando de celebrar”, declaró Biden en un comunicado. “No hay justificación para la violencia de ningún tipo y no toleraremos ningún ataque a ninguna de las comunidades de nuestra nación”.

Los New Orleans Saints, que juegan en el Superdome, y los New Orleans Pelicans de la NBA refirieron en un comunicado publicado en X, antes Twitter, que sus “corazones están con todas las víctimas y sus familias durante este difícil momento”. Varios jugadores de los Saints, incluyendo Derek Carr y Cameron Jordan, también compartieron sus condolencias en redes sociales.

Información de Mark Schlabach fue utilizada en la redacción de esta nota.