El presidente en funciones Joe Biden llegó este martes a Angola, país africano que prometió visitar el año pasado después de la cumbre EEUU-África. Biden pretende reforzar la presencia occidental en el país, donde Rusia y China tienen grandes ambiciones para su expansión internacional y consolidación en África.
En la agenda de Biden y de su homólogo angoleño, João Lourenço, están las fuertes inversiones estadounidenses en el país africano. Varias empresas norteamericanas tienen el compromiso de construir una conexión ferroviaria en el Corredor de Lobito que conecta Zambia, RD Congo y Angola. Se trata de un proyecto similar a lo que China ha llevado a cabo en otros países de la región, por tanto en competición directa con Pekín.
Como segundo plato fuerte, Estados Unidos tiene interés en reforzar las infraestructuras mineras de Angola y los contratos de suministro con las empresas que operen allí, con el objetivo de no depender de China para la extracción de metales y otros recursos minerales entre los cuales destaca el cobalto.
La visita se da justamente cuando Pekín ha anunciado restricciones en las exportaciones hacia Estados Unidos de componentes esenciales para la fabricación de semiconductores electrónicos en respuesta a medidas similares tomadas el lunes por Washington hacia el gigante asiático. De acuerdo con AFP, entre los materiales afectados figuran el galio, el antimonio y el germanio.
Biden esquiva la cuestión del indulto a Hunter
El presidente se presentó a la prensa que le acompañó al viaje junto con el presidente angoleño. En ese momento, los medios de comunicación le hicieron varias preguntas en relación con el indulto presidencial a su hijo, Hunter Biden, que el presidente esquivó por completo.
De acuerdo con AP, rechazó las preguntas “con una carcajada” durante su paso por el palacio presidencial de Luanda. Entonces, Biden dijo a la delegación angoleña “bienvenidos a América”, en lo que podría ser o una metáfora, o otro equívoco del presidente.
Biden no tenía previsto aceptar preguntas de la prensa durante su viaje a África, dijo el lunes a los periodistas su secretaria de prensa, Karine Jean-Pierre, y ha evitado en gran medida cualquier interacción con los periodistas desde la victoria del presidente electo Donald Trump el mes pasado.