Tras unos recientes rumores sobre una oferta contundente por parte de Aston Martin hacia Aston Martin, la propia escudería lo desmiente de manera tajante.
Hace apenas unos días, el pasado 16 de enero, The Daily Mail publicó un rumor que informaba de que Aston Martin se había puesto en contacto con los patrocinadores del piloto neerlandés para fichar a Max Verstappen, a razón de un sueldo de alrededor de 1000 millones de libras repartido en varios años.
Pese a que esa cantidad se mencionaba como gran aliciente, el interés no debería sorprender. No es ningún secreto que tanto Aston Martin como Mercedes quieren contar con los servicios del actual piloto de Red Bull en algún momento que otro de su carrera deportiva. El jefe de Mercedes, Toto Wolff, comentó que actualmente se centra en sus pilotos, George Russell y Andrea Kimi Antonelli, pero que informó a la prensa holandesa en el pasado GP disputado en Zandvoort de que no cerraría la puerta en ningún momento a Max. “Todavía siento que nuestros caminos se cruzarán algún día” comentó.
Desde el punto de vista de Aston Martin, no sorprende que tengan un punto de vista en Max. El equipo con sede en Silverstone construyó recientemente una fábrica con la última tecnología, y en la que su nuevo túnel de viento desempeñará un papel fundamental, según informan ellos mismos.
Su equipo técnico se reforzó con Enrico Cardile y, además, Adrian Newey. Por si no fuera poco, Honda ha firmado como suministrador de motores desde el año 2026. Teniendo en cuenta que Aston Martin es el único equipo al que la marca japonesa le suministrará unidades de potencia, se convertirá en una estructura de fábrica, similar a lo que actualmente sucede con Red Bull.
Toda esta suma son ingredientes perfectos de cara al éxito, si bien hay dos piezas algo peculiares, sus pilotos, ya que Lance Stroll no ha demostrado en ningún momento esas agallas para poder ser campeón en un futuro, y que Fernando Alonso tendrá 44 años una vez entre la nueva normativa en vigor. Por lo que no es una alineación a tener en cuenta a muy largo plazo. Si a eso se suma que Lawrence Stroll tiene la intención de hacer todo lo posible para que su proyecto de F1 siga adelante, tiene sentido que invierta más si cabe.
Verstapen nunca ocultó su respeto tanto con Newey y con Honda, pero las informaciones de esta semana podrían ser preamaturas. Aston Martin negó que esté abordando a algún nuevo patrocinador el tetracampeón como posible cebo.
Red Bull debe seguir cumpliendo
Por el momento, fuentes internas de Red Bull dicen que el equipo confía en que al menos mantenga a Max hasta finales de 2026. La cláusula de Helmut Marko era, en teoría, una salida fácil y, a su vez, una golosina desde el punto de vista de los de Milton Keynes, si bien el pasado año se reforzó la posición de Marko tras un periodo de convulsión dando algo más de confianza a Red Bull para no perder a Verstappen tan fácilmente.
La situación estaría más abierta de cara a 2026 o 2027, dependiendo del inicio de la nueva era en Red Bull, con motor propio. Ese será sin duda un momento interesante en el mercado de pilotos de la Fórmula 1.
Los contratos de pilotos como Sainz, Piastri, Hamilton y otros acabarán incluso antes. Alonso ha informado que se plantea 2026 como su última temporada en la categoría, después de que siga aspirando a un tercer título y depositando todas las cartas en la nueva normativa.
2026, punto de inflexión
Esa situación hace que el propio Verstappen se encuentre en una gran situación, y que no falte interés en él. El vigente campeón puede esperar a ver quien podría ser competitivo en 2026 y quien no. Este año todo será una apuesta, incluida la permanencia o no en Red Bull, ya que el comportamiento de los nuevos monoplazas en 2026. Ello será una apuesta, incluida la renovación o no de Verstappen, pues nadie sabe predecir quien será el equipo dominante con la nueva normativa.
Con los cambios en el reglamento en lo relativo a motores y chasis, esa temporada será un rumbo hacia lo desconocido para los diez equipos. Otro factor adicional, será, que Red Bull no dependerá de Honda, sino que fabricará sus propias unidades de potencia con Red Bull Powertrains-Ford.
Esas variables y alguna más son las que deberá tener en cuenta Max Verstappen para tomar una decisión pensando más en el largo plazo. Sobre un posible interés de otros equipos, en la prueba disputada en Singapur, a declaraciones a Motorsport.com dijo que “Por supuesto, sé que es posible un cambio, pero no estoy pensando mucho en ello en este momento”.
“Pero si no hay un cambio, no pasa nada. No cambiará mi vida” comenta acto seguido, demostrando lo relajado que está sobre esta situación, y lo importante que serán las nuevas normas desde el 2026.
Esto último no se aplica únicamente a la cuestión sobre quien será competitivo y quien no, sin también a como resulte el nuevo reglamento. Max fue bastante crítico con los planes de 2026 durante el GP de Austria 2023, disputado en el Red Bull Ring, cuando reveló que tuvo que reducir marchas en la recta principal de Monza en el simulador, y que la aerodinámica se notaba “extraña”. “No creo que sea la dirección que busque y deba ir la Fórmula 1” comentó por aquél entonces. Más adelante, la FIA cambió ligeramente y Verstappen sostuvo que se mantenía “neutral” al respecto. El reglamento será clave para futuras consideraciones. “Eso es algo que deberé de juzgar durante 2026, por supuesto, si me sigue divirtiendo conducir”.
Es más que conocido por todos que el cuatro veces campeón del mundo tiene ambiciones fuera de la Fórmula 1. Las emblemáticas 24 Horas de Le Mans es buen ejemplo, y ocupa un lugar más que destacado en la lista de deseos. Por ende, una condición crucial para su elección será que le siga entreteniendo la categoría, como también indica Marko. Ese será la primera pregunta en 2026, la cuestión de quien será competitivo bajo la nueva normativa.
Con Red Bull, Mercedes y Aston Martin no le faltará interés, pues todos esos equipos querrán tenerlo en sus filas. Verstappen tiene el privilegio de poder esperar y no tener que apostar a ciegas, y Aston Martin en estos momentos, es una apuesta interesante.