El plan de redadas y deportaciones masivas del presidente Donald Trump generó preocupación en muchas familias migrantes en Estados Unidos. Frente a este panorama, se popularizaron en redes sociales distintas herramientas, como las tarjetas rojas, diseñadas para informar a las personas indocumentadas y evitar violaciones de derechos fundamentales, como el ingreso o registro ilegal en un hogar por agentes de inmigración.
Estas tarjetas son promovidas por el Centro de Recursos Legales para Inmigrantes (ILRC, por sus siglas en inglés), una organización sin fines de lucro nacional que se especializa en proporcionar recursos legales a la comunidad migrante. Su objetivo es proteger a quienes puedan enfrentarse a situaciones de posible deportación.
Las tarjetas están disponibles más de una docena de idiomas, aunque todas tienen una parte en inglés. Asimismo, incluyen instrucciones claras sobre cómo actuar si se presentan agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) en el domicilio de una persona.
El contenido de las tarjetas rojas se centra en derechos garantizados por la Constitución de los Estados Unidos. Por un lado, explican a los inmigrantes que tienen la facultad de permanecer en silencio y no abrir la puerta si no se presenta una orden judicial firmada por un juez. El mensaje destaca lo siguiente:
En su reverso, las tarjetas presentan un texto en inglés dirigido a los agentes de inmigración. Este declara que el residente no da permiso para ingresar al hogar ni para registrar pertenencias sin una orden judicial válida. También menciona que, al ejercer sus derechos, la persona se ampara en la Quinta y Cuarta Enmienda de la Constitución de Estados Unidos.
Las tarjetas rojas se convirtieron en un recurso importante tras las políticas adoptadas por el presidente Donald Trump, que incluyeron la firma de órdenes ejecutivas y propuestas para endurecer las medidas contra la inmigración irregular. Por eso, las tarjetas están disponibles para su descarga gratuita en su sitio oficial, lo que facilita su acceso y difusión entre las comunidades más vulnerables.
Sameera Hafizin, directora de políticas del ILRC, señaló en Mashable: “Trump quiere someter a todo el país a su agenda anti-inmigrante y forzar a los estados y localidades a colaborar con la aplicación de las leyes migratorias, incluso si esto va en contra de sus prioridades locales”.
La abogada especializada en migración, Rocío Becerril, compartió en una entrevista con Telemundo una serie de pasos clave para enfrentar una interacción con un agente del ICE.
En primer lugar, recomienda mantener la calma y solicitar una identificación que confirme que se trata de un agente migratorio. Según la magistrada, cualquier persona tiene derecho a pedir que el oficial muestre su placa e identificación oficial antes de proceder.
En espacios públicos, el personal de ICE puede pedir documentos a cualquier individuo. En el caso de los ciudadanos estadounidenses, no están obligados a presentar su partida de nacimiento. Por otro lado, quienes posean un estatus migratorio legal deben presentar documentos como la green card, visas especiales (U, DACA, TPS) o documentos de asilo político.
Sin embargo, si una persona no puede acreditar su estatus migratorio al momento, el agente podría decidir iniciar un proceso migratorio. Ante redadas en lugares privados, como hogares o negocios, las personas tienen el derecho de no abrir la puerta si no se presenta una orden firmada por un juez. Esto también aplica en establecimientos comerciales, aclaró la experta.
