El ultra Javier Milei quiere convertirse en el gran aliado de Donald Trump en América Latina. El presidente argentino no estuvo en la lista de los primeros líderes mundiales con los que se comunicó por teléfono el ganador de las elecciones estadounidenses, pero desde la Casa Rosada destacan que será el primero en felicitarlo en persona. Milei viajará a Estados Unidos la próxima semana para participar de la Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC) que se celebra entre el 14 y el 16 de noviembre en Mar-a-Lago, en Florida, donde Trump tiene su residencia.
Fuentes oficiales han confirmado el viaje de Milei, pero falta por conocerse la fecha exacta del encuentro con Trump. Según medios locales, la comitiva incluirá a su hermana y secretaria de la Presidencia, Karina Milei y al nuevo canciller, Gerardo Werthein, quien fue embajador en Washington hasta la semana pasada.
El mandatario argentino, admirador confeso del líder republicano, ya tuvo un intercambio con él en otra cumbre conservadora el pasado 24 de febrero. En ese momento, con Trump en campaña electoral y Milei recién asumido, el encuentro se limitó a un abrazo efusivo, un breve diálogo y una fotografía.
El miércoles, nada más conocerse los resultados electorales, el presidente argentino se mostró eufórico por el triunfo del candidato republicano que le concede un segundo mandato en la Casa Blanca. “Felicidades por tu formidable victoria electoral. Ahora, Make America Great Again. Sabes que puedes contar con Argentina para llevar a cabo tu tarea. Éxitos y bendiciones. Saludos cordiales”, escribió Milei en X (antes Twitter). Horas más tarde, también lo saludó por Instagram y por TikTok.
Alineamiento con Estados Unidos
Milei ha dado un fuerte giro a la política exterior argentina y ha expresado un alineamiento incondicional con Estados Unidos e Israel. La votación de Argentina en contra del embargo estadounidense a Cuba motivó la expulsión inmediata de la canciller y su reemplazo por Werthein, quien ha puesto en marcha una purga ideológica para desplazar a aquellos diplomáticos que cuestionan la agenda del líder de ultraderecha. Aunque Milei aseguraba que el alineamiento con Estados Unidos era independiente de su Gobierno, durante la contienda electoral había expresado su preferencia por el republicano frente a la demócrata Kamala Harris.
El Gobierno argentino confía en sacar rédito de la sintonía ideológica con el nuevo inquilino de la Casa Blanca a partir del próximo 20 de enero, en un nuevo paralelismo de la Argentina actual con la de los noventa, cuando se hablaba de “relaciones carnales” con la potencia americana. Milei y Trump comparten posiciones contrarias al aborto, al feminismo y a la lucha contra el cambio climático y los unen también sus críticas a la burocracia y a los organismos internacionales. El presidente argentino tiene a su favor que otros aliados de Estados Unidos en la región, como Brasil, Chile o Colombia, están gobernados ahora por fuerzas de centroizquierda. Sin embargo, está por verse qué espacio otorga Trump a América Latina en su agenda exterior.
El equipo de Milei espera que un buen vínculo con Trump contribuya a promocionar inversiones de Estados Unidos en Argentina en áreas como energía y minería, claves para el crecimiento económico de la economía latinoamericana. Las miradas están puestas también sobre las negociaciones en curso con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para obtener un nuevo préstamo que ayude a Argentina a acelerar su salida de la recesión. Argentina debe devolver todavía los 44.000 millones que adeuda al FMI desde 2018, pero la intermediación del Gobierno estadounidense podría beneficiar la obtención de otro acuerdo que significase la llegada de fondos frescos.
Desde el lado comercial, sin embargo, el panorama es más sombrío. Las políticas proteccionistas del republicano y su promesa de aumentar los aranceles a las importaciones suponen una inquietud para economías que, como la argentina, dependen de la exportación de materias primas.
Nuevo encuentro con Musk
El viaje de Milei a Florida será el séptimo que realice a Estados Unidos desde que asumió como presidente, hace 11 meses. En esta ocasión tiene previsto volver a reunirse con el empresario Elon Musk, con quien mantiene un diálogo fluido a través de las redes sociales que retomaron tras la victoria electoral de Trump.
Musk suena como uno de los asesores estrella de Trump en materia de recorte de gasto público y Milei aseguró este jueves que el dueño de Tesla está en contacto con su ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, y quiere “replicar la motosierra” que se implementó en Argentina en Estados Unidos. Según Milei, el trabajo de Sturzenegger está “haciendo furor en todo el mundo”. Dos meses atrás fue aún más allá y en una entrevista con la prensa local se autoproclamó uno de los dos políticos “más relevantes del planeta Tierra” junto a Trump.
