Traducción de María Aguirre
Dos casos recientes de personas con estatus legal siendo detenidas, o deportadas, después de llegar al Logan Airport en Boston después de viajes internacionales están creando preocupaciones para los abogados de inmigración sobre la aplicación de leyes en el aeropuerto – un principal centro de conexión para viajeros en New Hampshire y el resto del Noreste – y lo que esto significa para los derechos de los que tienen permiso de residencia (green card en inglés) o visas, bajo la actual administración.
“Esta administración, desde el principio, dijo que se centraría en los criminales violentos, y eso no es lo que estamos viendo”, dijo el abogado de inmigración de Manchester, Enrique Mesa. “Los estamos viendo interrogar a residentes que trabajan duro”
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A comienzos de este mes, Fabian Schmidt, un residente de New Hampshire con tarjeta de residencia, fue detenido por Control de Inmigración y Aduanas (CBP por sus siglas en inglés) en el aeropuerto de Boston a comienzos del mes después de viajar a Luxemburgo. Actualmente está detenido en un centro en Rhode Island, y el abogado de Schmidt le dijo a The Public’s Radio esta semana que su cliente sigue en un “limbo legal” mientras espera averiguar si lo acusan, y por qué.
Después del caso de Schmidt, se dio el caso de la doctora libanesa Rasha Alawieh, quien tiene una visa H-1B, un tipo de visa que suele reservarse para trabajadores con experiencia avanzada. Alawieh fue detenida durante el fin de semana y fue regresada a Líbano, a pesar de una orden de una corte de temporalmente prohibir que los funcionarios la regresen a su país.
Viajar con un récord criminal
Bajo las circunstancias actuales, Mesa le está recomendando a sus clientes a pensar detenidamente sobre los riesgos de viajar, incluso si tienen tarjeta de residencia. Sin embargo, si el cliente debe viajar, Mesa les dice que se aseguren de llevar los documentos que certifiquen su estatus, como una tarjeta de residente o una notificación de extensión si la residencia condicional ya expiró.
Si un cliente tiene un récord criminal, Mesa dijo que es importante presentar una disposición certificada por el tribunal que muestre que el caso ha sido desestimado o resuelto.
Este fue el caso de Schmidt, quien probablemente fue marcado por CBP por tener antecedentes penales.
GBH reportó que Schmidt tuvo cargos por delito menor por tener marihuana en su carro en 2015, cargos que luego fueron desestimados después de que cambiaran las leyes en California sobre la posesión de marihuana. La madre de Schmidt, Astrid Senior, le dijo al medio que él también había trabajado y pagado su DUI (multa por conducir bajo la influencia de alcohol) de hace 10 años y se está recuperando exitosamente del alcoholismo.
Hilton Beckham, el comisionado asistente para Asuntos Públicos en CBP le dijo a GBH que los oficiales tomarán la “acción apropiada” cuando alguien tiene cargos vinculados a drogas y trata de reingresar al país.
CBP no ha respondido a preguntas adicionales de NHPR sobre Schmidt.
Jeff Joseph, el presidente electo de la Asociación Americana de Abogados de Inmigración, ha estado en la industria por más de dos décadas. Él dijo que el escrutinio reforzado durante el reingreso es nuevo. Él explicó que los residentes permanentes suelen ser admitidos de nuevo al país – con algunas excepciones, como salir del país durante un proceso de deportación, renunciar a la residencia o cometer un delito durante un viaje fuera del país.
“Esta es una gran advertencia para el universo ahora para viajar, si viajas después de haber cometido un delito, prepárate para una evaluación secundaria y será tu responsabilidad demostrar que ese delito en particular no te hace inelegible para ingresar al país”, dijo en inglés.
Escrutinio de conducta
Estos dos casos se dan casi al mismo tiempo que la indignación pública por la detención de Mahmoud Khalil, un estudiante de posgrado de la Universidad de Columbia y residente permanente que fue detenido por el Departamento de Seguridad Nacional, aparentemente por su papel en las protestas en Columbia contra la guerra de Israel en Gaza.
En el caso de la especialista de trasplante de riñones de Rhode Island regresada a Líbano, el Departamento de Seguridad Nacional dijo que Alawieh fue al funeral de Hassan Nasrallah, un figura religiosa controversial y secretario de Hezbollah.Un vocero para el departamento agregó que Alawieh también compartió su apoyo a Nasrallah.
“Los extranjeros nacionales que promueven las ideologías extremistas o llevan propaganda terrorista son inadmisibles en EE.UU., simple y llanamente”, dijo en inglés el vocero de CBP, Hilton Beckham, en una declaración a NHPR.
Beckham agregó que una visa no garantiza la entrada, y que los oficiales “actuarán con rapidez para denegar la entrada a quienes glorifiquen a organizaciones terroristas, defiendan la violencia o apoyen abiertamente a líderes terroristas y conmemoren sus muertes. Cualquier persona que posea material extremista vinculado a un grupo terrorista designado por EE. UU. será expulsada”.
Para Joseph, lo que es alarmante sobre estos casos es que la conducta, no las convicciones criminales, está siendo utilizada para determinar si una persona es deportable.
“Todos nosotros Americanos, extranjeros que están en el país con documentos o sin documentos, deberíamos estar preocupados sobre el hecho de que nuestra conducta podría, de hecho, considerarnos deportables o inadmisibles”, dijo en inglés.
Joseph dijo que la política exterior de EE.UU. usualmente cambia, y podría ser casi imposible indicar si cierta conducta – como ir a una protesta o a un funeral – será mal vista por las futuras administraciones.
Preocupaciones por la primera enmienda
Para la abogada de inmigración Celine Atallah, la deportación de Alawieh es particularmente preocupante como un caso de libertad de expresión y de religión, ambas protegidas por la Primera Enmienda.
Como una Americana Libanesa, Atallah también señaló que Nasrallah no solo fue un líder político, sino también fue considerado como un líder religioso por muchos Musulmanes Chiítas. Ya que Alawieh también utiliza un velo, Atallah agregó que la deportación de Alawieh puede ser interpretada como una discriminación religiosa.
Atallah explicó que la ley migratoria considera a personas inadmisibles de reingresar al país por “apoyo material” del terrorismo, como prestar servicios, dinero o logística.
Desde que se selló el récord de Alawieh, la información disponible es limitada. Sin embargo, en base a lo que está disponible, Atallah dijo que ir al funeral no debería ser suficiente razón para enfrentarse a una orden del tribunal. Debido a que Alawieh no tuvo la oportunidad de argumentar su caso en corte, Atallah dijo que las preocupaciones de CBP sobre seguridad nacional son un “vacío legal” que elimina su derecho al debido proceso.
Esto hace que Atallah se enfrente al tipo de mensaje que esto envía al mundo. Ella dijo que personas de todo el mundo se mudan a Estados Unidos para escapar de la persecución. Agregó que tomar medidas para castigar a los inmigrantes por sus creencias contradice los principios fundacionales del país.
“Esto es lo que un régimen autoritario hace. Esto es lo que pasa en países donde se criminaliza la disidencia, donde la gente desaparece por asistir al evento equivocado o por decir las palabras equivocadas. Y ahora, lo estamos haciendo aquí”, dijo ella en inglés.
“Si la libertad de expresión ya no es protegida aquí, y si las agencias federales pueden abiertamente imponer órdenes judiciales, entonces América ya no es América”.
