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El Senado votó en la mañana de este sábado para confirmar a Kristi Noem como la secretaria de Seguridad Nacional, instalando a una aliada de larga data de Donald Trump al frente de una agencia que desempeñará un papel central en la prometida ofensiva contra la inmigración del presidente.
La votación fue bipartidista, 59 a 34.
Noem se ha desempeñado como gobernadora de Dakota del Sur desde 2019 y es una exlegisladora estatal y congresista durante cuatro mandatos. Ahora tendrá la tarea de dirigir el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), una agencia en expansión que supervisa todo, desde Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU., el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas hasta la Agencia Federal de Gestión de Emergencias y el Servicio Secreto de EE.UU.
“La misión y el éxito del DHS son más cruciales que nunca”, dijo Noem a los senadores durante su audiencia de confirmación en el Capitolio. “Debemos asegurar nuestras fronteras contra el tráfico ilegal y la inmigración. Debemos salvaguardar nuestra infraestructura para asegurarnos de que estamos protegidos contra los ciberataques, responder a los desastres naturales y también al terrorismo”.
Al calificar la seguridad fronteriza como una “máxima prioridad”, Noem dijo que Trump fue elegido con un “mandato claro” sobre inmigración. “Sacar a los extranjeros criminales de nuestras calles y del país ayudará a que las comunidades estadounidenses vuelvan a estar más seguras”, dijo.
Trump comenzó su segundo mandato tomando una serie de amplios decretos en materia de inmigración que incluyeron la declaración de una emergencia nacional en la frontera sur de Estados Unidos y el inicio del proceso para poner fin a la ciudadanía por derecho de nacimiento, una medida que provocó un cuestionamiento legal casi inmediato.
Además del tema de la inmigración, Noem abordó una variedad de otros temas durante su audiencia de confirmación. En respuesta a las preguntas de los demócratas, dijo que bajo su liderazgo “no habrá sesgo político” en lo que respecta al socorro en caso de desastre y que debe haber un foco en el terrorismo interno, al decir que “el terrorismo local está en aumento”, mientras calificaba el mortal ataque con un camión en Año Nuevo en Nueva Orleans como “un evento horrible”.
El perfil nacional de Noem creció durante la pandemia de covid-19, cuando rechazó la obligatoriedad del uso de mascarillas y del distanciamiento social, y en un momento se la consideró una de las principales candidatas de Trump para recuperar la Casa Blanca.
Pero Noem se vio envuelta en una controversia el año pasado tras la publicación de un extracto de un libro en el que reveló que había disparado y matado a un perro de la familia, un pointer de pelo duro de 14 meses llamado Cricket, en una cantera de grava porque el perro era “imposible de entrenar” y “peligroso para cualquiera con el que entrara en contacto”.
Noem ha defendido sus acciones y ha argumentado que esas anécdotas tenían como objetivo mostrar lo capaz que es capaz de hacer algunos de los trabajos más espantosos de la vida cuando es necesario.
Priscilla Alvarez, Eric Bradner y Kaitlan Collins de CNN contribuyeron a este informe.
