El nuevo año trae muchos retos a nivel laboral, profesional y personal; para algunas personas es esencial adquirir nuevos hábitos alimenticios y bajar de peso, para lo cual se requiere de ejercicio y, sobre todo, de una alimentación saludable.
El ejercicio y una dieta balanceada deben ir de la mano y complementarse para así hallar resultados óptimos.
Ana Cristina Gutiérrez, máster en nutrición y alimentación e integrante del Consejo Consultor de Dietistas de la marca Herbalife, habló del papel de la nutrición y del enfoque más recomendado.
La experta, además, sugirió las tendencias alimenticias que podrían sobresalir en el 2025 y que deben ir de la mano con actividad física y manejo del estrés y la ansiedad.
Proteínas vegetales
Según expertos, las proteínas vegetales son una opción nutritiva y sostenible, ya que son bajas en grasas saturadas. No contienen colesterol y fortalecen la salud cardiovascular. Adicional, aportan para el organismo fibra, vitaminas y minerales esenciales. Su combinación correcta brinda un perfil de aminoácidos esenciales para la fácil digestión.
Alimentos funcionales
En este grupo alimenticio se hallan las frutas cítricas, el té verde y los vegetales de hojas verdes. Su ingesta continua ayuda a combatir el estrés y protege las células. Los alimentos fermentados como el yogurt y el kéfir también son muy recomendados para la protección y fortalecimiento de los sistemas intestinal y digestivo.
De este grupo hacen parte los fitonutrientes que actúan como antioxidantes y antiinflamatorios, brindando una gran protección a la salud celular y el sistema inmune.
No es solo comer
Una importancia tendencia que ha surgido con el nuevo año es consumir alimentos con una baja carga procesal, es decir, con un origen más natural, en el que predomine la frescura. Muchas personas han optado por elegir alimentos naturales, en lugar de seguir dietas restrictivas y con posibles efectos secundarios.
Las dietas restrictivas
Expertos afirman que el primer consejo a tener en cuenta para este año es que el enfoque alimenticio sea equilibrado y sostenible, y para ello cada persona debe adaptar un modelo y estilo particular, pues todos los organismos funcionan de forma distinta. En ese orden de ideas asumen relevancia dietas como la cetogénica o las que no contienen gluten.
Red de acompañamiento
Ya sea a la hora de iniciar un nuevo plan alimenticio o una dieta, expertos señalan la importancia de una red de apoyo. En ella, se pueden establecer metas, monitorear progresos y acceder a recursos educativos, todo con el objetivo de que su salud no se vea en riesgo por algún cambio brusco en la alimentación.