En un movimiento que ha reavivado el debate internacional sobre la relación de Estados Unidos con los organismos multilaterales, el presidente Donald Trump ha firmado nuevamente una orden ejecutiva para retirar al país de la Organización Mundial de la Salud (OMS). La decisión, anunciada desde el Despacho Oval de la Casa Blanca, ha generado una oleada de críticas y reacciones, tanto dentro como fuera del país, por las implicaciones políticas, económicas y sanitarias que conlleva.
Durante su primer mandato, en 2020, firmó una medida similar como respuesta a lo que consideró una mala gestión de la pandemia de COVID-19
Trump justificó su decisión criticando lo que considera un desbalance en las contribuciones económicas de los Estados miembros. “China estaba pagando 39 millones de dólares. Nosotros pagábamos 500 millones. Me parecía un poco injusto”, señaló, en referencia a las aportaciones anuales realizadas por los dos países a la organización. El presidente también acusó a la OMS de estar demasiado influenciada por China, lo que, según él, ha comprometido la eficacia y la imparcialidad del organismo.
Esta no es la primera vez que Trump opta por desvincular a Estados Unidos de la OMS. Durante su primer mandato, en 2020, firmó una medida similar como respuesta a lo que consideró una mala gestión de la pandemia de COVID-19 por parte de la organización. Sin embargo, la salida nunca se concretó debido a la llegada de Joe Biden al poder en enero de 2021. El demócrata revocó la decisión de su predecesor y reafirmó el compromiso de Estados Unidos con el organismo sanitario internacional, argumentando la importancia de la colaboración global en cuestiones de salud.
Consecuencias para la salud global
La salida de Estados Unidos de la OMS podría tener profundas repercusiones en los esfuerzos globales para combatir las crisis sanitarias. Históricamente, el país ha sido uno de los mayores contribuyentes financieros de la organización, aportando aproximadamente el 15% de su presupuesto total. Estos fondos han sido esenciales para iniciativas como la erradicación de enfermedades, la distribución de vacunas y la coordinación de respuestas rápidas ante brotes epidémicos.
La desvinculación podría debilitar significativamente la capacidad de la OMS para cumplir su mandato, especialmente en países en desarrollo que dependen de la asistencia técnica y financiera
Los expertos en salud global temen que la desvinculación podría debilitar significativamente la capacidad de la OMS para cumplir su mandato, especialmente en países en desarrollo que dependen de la asistencia técnica y financiera del organismo. Además, la medida podría erosionar la credibilidad de Estados Unidos como líder en temas de salud pública y cooperación internacional.
Polarización
En el ámbito político interno, la decisión de Trump ha generado una fuerte división. Los partidarios del presidente argumentan que Estados Unidos no debe subvencionar desproporcionadamente a un organismo que, según ellos, no representa adecuadamente sus intereses. Por otro lado, los críticos señalan que el abandono de la OMS es un acto irresponsable que podría poner en peligro la seguridad sanitaria tanto a nivel nacional como global.
“Es un error estratégico. En un mundo interconectado, ninguna nación puede enfrentar sola las amenazas a la salud pública”
Partido demócrata
“Es un paso necesario para corregir una distribución injusta de responsabilidades”
Partido republicano
“Es un error estratégico. En un mundo interconectado, ninguna nación puede enfrentar sola las amenazas a la salud pública”, afirmó un destacado legislador demócrata. Por su parte, algunos republicanos han respaldado la medida, calificándola de un paso necesario para corregir lo que consideran una “distribución injusta de responsabilidades” en la OMS.
Reacción internacional
A nivel global, la decisión de Trump también ha sido recibida con preocupación. Varios líderes mundiales han expresado su apoyo a la OMS, destacando la importancia de mantener una respuesta coordinada ante los desafíos sanitarios que enfrenta el mundo. Al mismo tiempo, algunos gobiernos han instado a Estados Unidos a reconsiderar su postura y trabajar desde dentro del organismo para impulsar reformas.
La UE recalca que la OMS es esencial para garantizar la salud pública global
“La OMS no es perfecta, pero es esencial. La salida de Estados Unidos sería un duro golpe para los esfuerzos globales por garantizar la salud pública”, declaró un alto funcionario de la Unión Europea.
Perspectivas de futuro
Aunque Trump ha dejado abierta la posibilidad de que Estados Unidos regrese a la OMS bajo ciertas condiciones, su postura subraya una tendencia más amplia hacia el aislacionismo y el cuestionamiento de los organismos multilaterales. El desenlace de este episodio dependerá en gran medida del resultado de las elecciones presidenciales de 2024, así como de la capacidad de la comunidad internacional para abordar las preocupaciones planteadas por el expresidente.
La postura de Trump subraya una tendencia más amplia hacia el aislacionismo y el cuestionamiento de los organismos multilaterales
En un momento en que el mundo enfrenta retos sanitarios cada vez más complejos, la decisión de Estados Unidos podría marcar un punto de inflexión en la forma en que las naciones colaboran para proteger la salud global.
