El preso político cubano José Daniel Ferrer García fue excarcelado en la mañana de este jueves, informó el Observatorio Cubano de Derechos Humanos en un comunicado y detalló que el coordinador general de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) salió de la cárcel de Mar Verde, en Santiago de Cuba, “después de pasar casi cuatro años tras las rejas y de sufrir torturas físicas y psicológicas”.
La noticia fue confirmada por el Consejo para la Transición Democrática en Cuba, de la cual el líder opositor es presidente.
Ferrer García fue encarcelado nuevamente el 11 de julio de 2021, cuando pretendía unirse a las protestas antigubernamentales que estallaron en más de 50 ciudades de Cuba.
Amnistía Internacional, Human Rights Watch, Freedom House, y el Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria de Naciones Unidas, así como varios Relatores Especiales de ese organismo, entre otros, denunciaron con frecuencia los abusos que sufría el líder opositor en prisión y exigieron su liberación. La excarcelación de este jueves se habría producido a instancias del Vaticano, como parte del acuerdo con el Gobierno cubano para la salida de las cárceles de la Isla de 553 prisioneros, y como presunta moneda de cambio por el anuncio de la Administración de Joe Biden de sacar al régimen de la lista de estados patrocinadores del terrorismo.
El Consejo para la Transición Democrática en Cuba, del que Ferrer García es líder, celebró su excarcelación y denunció “la brutalidad de su encarcelamiento”.
“Durante más de tres años y medio, José Daniel ha sido sometido a aislamiento extremo, torturas físicas y psicológicas, negación de atención médica, golpizas y la sistemática privación de visitas familiares. Estos abusos no solo vulneraron sus derechos, sino también los de su familia, quienes han enfrentado una represión cruel e inhumana”, detalló la organización en un comunicado.
En tal sentido, Ferrer García recibió una golpiza a mediados de noviembre de 2024 debido a su negativa a someterse a exámenes médicos en el hospital de la prisión de Boniato. Para obligarlo a ello, sus carceleros lo trasladaron a la fuerza, según contó posteriormente su esposa, Nelva Ismarays Ortega Tamayo.
Asimismo, en diciembre de 2024 realizó una huelga de hambre para protestar por la prohibición de las autoridades de Mar Verde de conservar los alimentos que le suministraba su familia.
En septiembre, Ferrer García denunció, en una carta escrita en prisión de su puño y letra: “La dictadura me ha sepultado vivo, quieren silenciarme a toda costa, por eso no escuchan mi voz, por eso no reciben mis opiniones, mis razones, mis denuncias sobre lo que ocurre en este infierno”.
En esa carta, aseguró: “José Daniel Ferrer García no se rinde jamás, José Daniel Ferrer García es y morirá siendo un firme defensor de la libertad, la democracia, los derechos humanos, la justicia y los valores fundamentales: independencia de poderes del Estado, libertades de expresión, prensa, asociación, reunión y manifestación pacífica, economía de mercado y justicia social”.
El Consejo para la Transición Democrática en Cuba exigió asimismo que la excarcelación “implique su libertad inmediata e incondicional”.
“Él ya cumplió su sentencia hace varios meses y, por tanto, su permanencia en prisión era a estas alturas ilegal, inmoral y arbitraria“, señaló la organización.
“Estamos convencidos de que José Daniel Ferrer, como ha demostrado incansablemente, no renunciará a su derecho a continuar luchando pacíficamente por el triunfo de la democracia y el estado de derecho en Cuba”.
Ferrer fue uno de los 75 opositores encarcelados en la Primavera Negra de 2003. En esa oleada represiva fue condenado a 25 años de prisión. Estuvo ocho años preso y fue excarcelado con una licencia extrapenal.
