Estilos de Vida|Corrí 42 kilómetros para escapar de la vergüenza
https://www.nytimes.com/es/2025/01/12/espanol/estilos-de-vida/maraton-infidelidad-culpa.html
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Modern Love
Después de tener una aventura con un hombre casado, corrí un maratón para absolver mis pecados, pero no funcionó.
Mi primer maratón, hace 15 años, fue un llamado de auxilio. Resultó ser un grito silencioso, porque no se lo dije a casi nadie. Me inscribí a una carrera en Fresno, California, para intentar borrar un mal año. Pensé que, si forzaba mi cuerpo lo suficiente, de algún modo sería como un borrón y cuenta nueva y se absolverían mis pecados.
Elegí Fresno porque allí había empezado mi mal año. Mi hermana se había divorciado y vivía sola con su hija de 2 años. Además, consumía drogas y estaba teniendo problemas con eso.
Con veintitrés años y sin ataduras, había ido a ayudarla con su hija. Pero no duré mucho, porque me resultaba demasiado difícil vivir de cerca la drogadicción de mi hermana. Ojalá hubiera sido lo suficientemente madura para quedarme, pero, cuando eres joven y tus seres queridos no quieren tu ayuda, es fácil marcharse.
Viajé tan lejos como pude, hasta Sídney, Australia, donde había conseguido un trabajo como “au pair”, es decir, niñera.
Ser au pair en un país extranjero era el trabajo más solitario que había tenido en la vida. Una noche conocí a un hombre en un gimnasio para escalar. Tenía 39 años, era profesor y estaba casado. Nos hicimos amigos. Cuando me llevó a su casa y me presentó a su mujer y a sus hijos, nos dimos cuenta de que nos gustaban los mismos libros. También coincidían nuestras películas favoritas.
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