El Femenino cae y pone fin a la racha de casi tres meses sin conocer la derrota a pesar de merecer mucho más en un partido que fue muy atractivo para el espectador.
El Espanyol ha empezado el nuevo año en casa ante el Athletic Club, cuarto clasificado. Un rival duro de roer que llegaba a la Dani Jarque tras haber cerrado el año con tres victorias consecutivas.
No salió mal al partido el Espanyol, que durante el primer cuarto de hora estuvo muy bien plantado y amenazando el área rival. Pero, a pesar de ello, el Athletic se adelantó en una jugada aparentemente sin peligro: un centro raso lateral que acabó en el fondo de la red tras tocar en Laia Ballesté.
El gol dejó un poco tocado al equipo, que vio cómo en el 25 Romy Salvador evitaba el segundo visitante con una muy buena doble intervención. El Athletic hacía mucho daño por su banda derecha.
La ocasión más clara para las nuestras llegó en el 34, tras un buen centro de Ángeles que remató Iara al lateral de la red un poco desequilibrada. Y de la ocasión del empate, al posible 0 a 2 visitante. Respondió el Athletic con un tiro al palo y, antes del descanso, el Espanyol volvía a generar peligro con un centro de Caracas que se fue envenenando y llegó a impactar en el larguero. Y, de nuevo, respondió el Athletic con otro tiro al larguero. Toma y daca en cuanto a ocasiones.
La segunda parte empezó con los dos equipos también muy bien puestos. El primero en avisar fue el Espanyol, con una doble ocasión de Lice, que entró al descanso por Ángeles, y Arola. Siguieron insistiendo las pericas y cuando se cumplía la hora de partido Chamorro volvía a avisar con un remate al palo que, por nada, no acabó dentro de la meta rival.
Y, por fin, en el minuto 66 llegó el gol del empate, obra de Arola Aparicio que, tras correr toda la banda, chutó sin ángulo y envió el balón al fondo de la red. Premio merecido y, con casi media hora por delante empezaba otro partido.
1-2: Derrota a la Dani Jarque
El Femení cau i posa fi a la ratxa de gairebé tres mesos sense conèixer la derrota tot i merèixer molt més en un partit que va ser molt atractiu per a l’espectador.
