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En un giro inesperado que ha sacudido al mundo académico y religioso, un equipo de investigadores ha desvelado la existencia de un antiguo papiro que contiene información inédita sobre la infancia de Jesucristo.
El descubrimiento, realizado por el brasileño Gabriel Nocchi Macedo y el húngaro Lajos Berkes, ha sido calificado como uno de los hallazgos más significativos en el campo de los estudios bíblicos de las últimas décadas.
El manuscrito, que data de los siglos IV y V, fue encontrado en los archivos de la Biblioteca Estatal y Universitaria de Hamburgo, donde había permanecido inadvertido durante años.
Con unas dimensiones de apenas 11 por 5 centímetros, el fragmento contiene 13 líneas de texto en griego antiguo que, según los expertos, forman parte de una copia del Evangelio de Tomás, un texto apócrifo que narra episodios de la niñez de Jesús.
Lajos Berkes, del Instituto para el Cristianismo y la Antigüedad de la Universidad Humboldt de Berlín, explica: «Inicialmente, pensamos que se trataba de un documento cotidiano, como una carta privada. Fue al identificar la palabra ‘Jesús’ en el texto cuando nos dimos cuenta de que estábamos ante algo extraordinario».
El contenido del papiro describe el comienzo de la «vivificación de los gorriones», considerado el segundo milagro en el Evangelio apócrifo de Tomás. En este relato, Jesús, con tan solo cinco años, moldea doce gorriones de arcilla y les da vida, desafiando las normas del sábado judío.
Gabriel Nocchi Macedo, de la Universidad de Lieja, añade: «Este hallazgo es valioso no solo por su antigüedad, sino porque nos ofrece una ventana a las creencias populares sobre Jesús durante los primeros siglos del cristianismo».
La controversia de la fecha de nacimiento
El descubrimiento ha reavivado el debate sobre la fecha real del nacimiento de Jesús. Tradicionalmente celebrado el 25 de diciembre, los expertos coinciden en que esta fecha fue elegida por razones más simbólicas que históricas.
Laura García, presentadora e investigadora, señala: «En realidad, no hay evidencia bíblica que respalde el 25 de diciembre como la fecha de nacimiento de Jesús. Esta elección tiene más que ver con la adaptación de festividades paganas preexistentes».
La teoría más aceptada sugiere que la Iglesia primitiva eligió esta fecha para coincidir con el solsticio de invierno, una celebración importante en muchas culturas antiguas.
Esta estrategia habría facilitado la conversión de paganos al cristianismo.
Otras hipótesis sobre la fecha real del nacimiento de Jesús incluyen:
- Finales de septiembre: Basada en la presencia de pastores en los campos y la celebración de la cosecha mencionada en los relatos bíblicos.
- Antes del año 4 a.C.: Fundamentada en la narración de la matanza de los inocentes ordenada por el Rey Herodes, quien se sabe que murió en ese año.
Edison Vega, investigador histórico, comenta: «La falta de una fecha precisa en los textos bíblicos ha permitido que la celebración del nacimiento de Jesús se adapte a diferentes contextos culturales a lo largo de la historia».
Implicaciones para la fe y la historia
El descubrimiento de este papiro no solo tiene relevancia académica, sino que también plantea preguntas importantes para los creyentes.
¿Cómo afecta este nuevo texto a la comprensión de la vida temprana de Jesús? ¿Qué implicaciones tiene para la doctrina cristiana?
Nathalia Passarinho, productora de contenidos religiosos, opina: «Aunque estos textos apócrifos no forman parte del canon bíblico, nos ofrecen una visión fascinante de cómo las primeras comunidades cristianas entendían y veneraban a Jesús».
Es importante destacar que la autenticidad y el valor histórico de los evangelios apócrifos son temas de debate entre los estudiosos.
Mientras algunos los ven como fuentes valiosas de información sobre las creencias tempranas, otros los consideran elaboraciones posteriores con poco valor histórico.
El futuro de la investigación
Los investigadores Macedo y Berkes planean continuar su estudio del papiro utilizando tecnologías avanzadas de imagen y análisis textual. Su objetivo es descifrar más detalles del texto y posiblemente descubrir conexiones con otros manuscritos antiguos.
«Este hallazgo nos recuerda que aún hay mucho por descubrir en el campo de los estudios bíblicos y la historia temprana del cristianismo», concluye Berkes.
Mientras tanto, el debate sobre la fecha real del nacimiento de Jesús y la autenticidad de los relatos sobre su infancia continúa.
Lo que es indudable es que descubrimientos como este siguen fascinando tanto a creyentes como a escépticos, demostrando el perdurable impacto de la figura de Jesús en la cultura y la historia mundial.
En un mundo donde la fe y la ciencia a menudo se encuentran en conflicto, este papiro nos recuerda la importancia de mantener un diálogo abierto entre la investigación histórica y las creencias religiosas.
Quizás, en la intersección de estos dos mundos, podamos encontrar nuevas perspectivas sobre una de las figuras más influyentes de la historia humana.
