El mandatario Joe Biden y Donald Trump rara vez han estado de acuerdo en algún tema. Eso, al menos, era más que obvio hasta este domingo cuando el saliente presidente de Estados Unidos optó por otorgar clemencia o perdón presidencial a su hijo Hunter Biden.
A 45 días de abandonar la Oficina Oval, Biden firmó un decreto en el que anula las dos condenas que pesaban contra su hijo, una por evasión de impuestos y otra por mentir en un formulario oficial y le otorgó inmunidad frente a cualquier otro delito federal que haya cometido entre el año 2014 y el 2024.
Ninguna persona razonable que mire los hechos en el caso de Hunter puede llegar a una conclusión diferente de que fue perseguido solo porque era mi hijo, y eso no está bien. Esta es la verdad: yo creo en el sistema judicial, pero al mirar este caso también creo que la política infectó el proceso y produjo una injusticia
Pero al tratar de justificarlo, Biden invocó la misma queja que Trump ha venido ventilando desde hace años: que el sistema judicial del país se ha politizado y que se usa como un arma para debilitar o perseguir a rivales.
“Ninguna persona razonable que mire los hechos en el caso de Hunter puede llegar a una conclusión diferente de que fue perseguido solo porque era mi hijo, y eso no está bien. Esta es la verdad: yo creo en el sistema judicial, pero al mirar este caso también creo que la política infectó el proceso y produjo una injusticia”, dijo el presidente.
Biden también trato de buscar la empatía de los estadounidenses al pedirles entender que, cómo padre, no podía optar por una decisión diferente frente a la situación de su hijo, quien pasó décadas batallando con una adicción a las drogas.
“Espero que entiendan por qué un padre y un presidente llega a una decisión como esta. Aquí hubo un esfuerzo por quebrar a Hunter que llega lleva cinco años y medio sobrio pese a los ataques incesantes y una persecución selectiva. Al tratar de romper a Biden me han tratado de romper a mí y no hay razón para creer que esto va a detenerse. Suficiente es suficiente”, continuó el mandatario.
La decisión de Joe Biden de indultar a su hijo supone un giro de 180 grados
Al margen de sus razones, el perdón que Biden le ofreció a su hijo fue un giro de 180 grados frente a lo que venía diciendo hace pocos meses, cuando prometió respetar la conclusión del proceso judicial.
Y lo pone, en cierto sentido, en la misma órbita de Trump cuando dice que los procesos judiciales que se armaron en su contra por tratar de interferir en el proceso electoral del 2020 y poner en riesgo la seguridad nacional, tuvieron una motivación política.
Razón por la cual ha prometido profundas reformas en el Departamento de Justicia y nombrado en los cargos más altos a personas que piensa ejecutar su agenda de retribución contra los “enemigos” que dice lo han perseguido.
Por supuesto los casos son diferentes. Hunter fue hallado culpable de mentir cuando dijo que no había consumido drogas en el pasado cuando aplicó para la compra de un arma de fuego.
Así mismo, por evadir el pago de impuestos por el ingreso que recibió de un contrato con una firma extranjera, pero que ya devolvió al fisco. Se trata de dos delitos menores, pero que en el caso de Hunter se empleó la máxima sentencia posible y que le implicaban una condena de cárcel.
Trump perdona a su consuegro y lo nombra a un cargo diplomático, piensa perdonar a los insurrectos que casi incendian el Capitolio y ahora critican que un padre use ese mismo poder para perdonar a un hijo con problemas de drogas que mintió en un formulario y ya pagó los impuestos que debía. Es el mundo al revés
Trump, por su parte, fue procesado por los esfuerzos que hizo en el 2020 para intentar desconocer el resultado de las elecciones -que perdió frente a Biden- y permanecer en el poder de manera fraudulenta.
El futuro presidente, que ahora critica la decisión de Biden de perdonar a su hijo, ya había usado la misma figura del perdón presidencial en 2020 -al final de su mandato- para conmutar la sentencia de su con suegro Charles Kushner, que había condenado por evasión fiscal y que ahora acaba de sugerir como nuevo embajador ante Francia.
El presidente, además, ha prometido perdonar a todas las personas que fueron condenadas por tomarse el capitolio el enero 6 de 2021 durante un violento día en el que murieron 5 policías.
“Trump perdona a su consuegro y lo nombra a un cargo diplomático, piensa perdonar a los insurrectos que casi incendian el Capitolio y ahora critican que un padre use ese mismo poder para perdonar a un hijo con problemas de drogas que mintió en un formulario y ya pagó los impuestos que debía. Es el mundo al revés”, le dijo a este diario una fuente cercana a la Casa Blanca.
Sea cual sea el caso, el perdón de Hunter, y las razones que invoca Biden, son un nuevo torpedo a la credibilidad de un apartado judicial que sigue insistiendo que tanto los casos contra Trump como los del hijo del presidente se manejaron de manera correcta y con total independencia.
SERGIO GÓMEZ MASERI
CORRESPONSAL DE EL TIEMPO
WASHINGTON