Todo lo que toca Sancet lo convierte en oro. Decidió el derbi con un cabezazo, y volvió a resultar determinante en Vallecas. Después de jugar el jueves en la Liga Europa, Valverde le dio descanso hasta el minuto 56. Andaba deprimido y desnortado el Athletic frente a un Rayo Vallecano cada vez más convencido, cuando el pamplonés saltó al césped. En un ratito hizo dos goles, con sendos golpeos espectaculares, y colocó a su equipo en la zona Champions con 26 puntos. Sancet vuelve a darle un toque de atención a Luis De la Fuente con sus siete goles en la Liga más otro en Europa, una cifra interesante para un centrocampista. Fue salir al campo y darle la vuelta al partido.
Empezó el Athletic asustando al Rayo, ya en el primer minuto, con una galopada de Nico Williams que propició un taconazo de Guruzeta que le dejó la pelota a campo abierto frente a Batalla, pero el disparo le salió desviado. Los bilbaínos mandaron durante unos cuantos minutos, con su rival cada vez más atrás, y los Williams provocaban el pánico por las bandas, pero una torpeza de Paredes, que quiso cederle la pelota a Agirrezabala, permitió que Nteka se adelantara a la acción y marcara ante la salida del portero rojiblanco.
Con el marcador a favor, el Rayo se lo creyó durante muchos minutos, aunque el Athletic todavía mandaba en el campo, pero en los últimos instantes de la primera parte dejó de hacerlo y dio opciones al equipo vallecano de disfrutar con su juego y poner en jaque a la defensa del Athletic.
También en el comienzo de la segunda mitad dominó el Rayo, con un Athletic cada vez más apagado, y con bastantes problemas en el medio campo, donde no tenía opciones de controlar, con Ruiz de Galarreta cada vez más fatigado. Así que intervino Valverde, ordenó tres cambios en el equipo. Retiro a Guruzeta, Lekue y Jauregizar y sacó a jugar a Sancet, De Marcos y Unai Gómez. El equipo bilbaíno recuperó el color, y nueve minutos más tarde, un centro de Nico Williams desde la izquierda, le cayó a Sancet, cerca de la línea de fondo, y sin dejarla caer empalmó con la derecha para superar a Batalla. Después fue De Marcos el que vio la llegada del goleador navarro por la frontal, cedió atrás y Sancet disparó duro, otra vez inalcanzable para el portero del Rayo, que con el marcador favorable supo remar en Vallecas, pero cuando se vio por detrás no encontró los recursos necesarios para contrarrestar al Athletic, que se llevó los tres puntos para escalar en la clasificación.
