“Hay que salvar al jugador Mbappé“, titula L’Équipe en su portada este viernes, haciendo un juego de palabras con la película “Salvar al soldado Ryan”, de Spielberg, y con la que intenta diseccionar los problemas que atraviesa el delantero del Real Madrid. Después de su partido en Anfield, en el que perdió 15 balones, además de fallar un penalti, en Francia se siguen inquietando por su capitán, ausente en las dos últimas convocatorias de Didier Deschamps.
“Está psicológicamente agotado. Con todo lo que ha asumido en seis meses, su fractura de nariz, su disputa con el PSG, la historia de Suecia, su cabeza no puede permanecer intacta y su cuerpo tampoco“, relata una fuente al periódico francés. Su rendimiento actual, lejos de su mejor versión, podría explicarse a través de un bloqueo mental más que por motivos puramente futbolísticos, después de un inicio de temporada agitado por distintos temas extradeportivos.
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Mbappé tiene muchos frentes abiertos, a pesar de que su comportamiento en el Real Madrid está siendo intachable. Uno de ellos, su compromiso con la selección francesa, en la que se ausentó de sus dos últimas convocatorias y en la que generó una polémica en octubre, tras un viaje a Estocolmo mientras los de Deschamps se enfrentaban en Hungría a Israel. La opinión pública francesa, también la prensa, consideró que podría haber viajado con la expedición francesa tras aducir que quería recuperarse de una lesión sufrida el 24 de septiembre con el Real Madrid y jugar consecutivamente frente al Lille y el Villarreal.
Otro de ellos es el litigio que le enfrenta desde septiembre al Paris Saint-Germain. Mbappé, a través de sus representantes legales, reclamó 55 millones de euros en primas y salarios que el cuadro parisino no quiere abonarle. Después de pasar por dos instancias, la LFP y la Federación, que le dieron la razón al jugador, el procedimiento podría remitirse a la justicia ordinaria, al tribunal laboral, en un litigio que, según fuentes consultadas, podría prolongarse meses, incluso años.
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El diario L’Équipe, además, esgrime que el rendimiento actual de Kylian Mbappé podría sustentarse en el hecho de no haber realizado una pretemporada plena durante los dos últimos años. En 2023, el PSG decidió descartarle de la gira por Japón, por lo que llegó extenuado al final del curso, en el que Luis Enrique le fue quitando minutos tras el delantero comunicarle a Al Khelaïfi que no renovaría. Este año, después de una Eurocopa fallida, principalmente por su fractura en la nariz, Mbappé se reincorporó tarde a los entrenamientos con el Real Madrid y, sin amistosos de por medio, compitió en la Supercopa contra la Atalanta, el 14 de agosto, realizando una mini pretemporada en la que, indudablemente, no pudo ponerse a tono físico.
Dosificar su tiempo de juego es otra de las variables que plantea L’Équipe. El capitán de la selección francesa ha mostrado signos de cansancio en los últimos partidos y a ello hay que añadirle su bloqueo mental, en el que falla muchas ocasiones y algunos controles que antaño se traducían en oportunidades de gol. Lo que es evidente, en Francia lo entienden así, es que, sin Vinicius, lesionado un mes, el exjugador del PSG deberá dar un paso al frente. Y en ese escenario el Real Madrid y sus compañeros, como a Ryan en la película “Salvar al Soldado Ryan”, deberán arroparle para acercarle a su mejor versión.
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