Ayer el Real Madrid s quiso, pero esta vez no pudo. El conjunto de Carlo Ancelotti sali bien mentalizado a Anfield. Estuvo ordenado y compacto durante la primera media hora. Fue solidario, mantuvo la concentracin y cerr bien el carril central.
S que esto es lo mnimo, pero es que este ao el Real Madrid esta parte se la ha saltado en la mayora de encuentros. Adems de todo esto, por medio de Camavinga y Luka Modric logr recuperar varios balones para luego iniciar sendos contragolpes que podan tener mucho peligro.
As, con esta frmula, han empezado muchas victorias importantes del Real Madrid en la Champions. En Liverpool saben precisamente de lo que hablo. Pero esta vez al Real Madrid le fall lo que le lleva sin fallar muchos aos: la calidad de sus atacantes.
Cada transicin del conjunto blanco mora nada ms iniciarse porque los de arriba eran incapaces de generar nada positivo. Brahim quizs estuvo ms fino y Bellingham dej algn toque bueno, aunque para m insuficiente para un jugador de su calidad, pero el partido de Arda Guler y sobre todo de Kylian Mbapp fue ahogando a un Real Madrid que se iba haciendo cada vez ms chico al mismo tiempo que el Liverpool iba creciendo.
Sin salida y sin la calidad defensiva de otros aos, era cuestin de tiempo que pasara lo que finalmente pas. En cierto modo era lo esperado.
El Real Madrid se plant ante el rival ms en forma de Europa con muchas bajas y siendo, adems, un equipo inmaduro e incompleto por haber tirado los primeros meses de competicin. Slo le poda salvar esa calidad individual que brill por su ausencia y es aqu donde tenemos que hablar de Kylian Mbapp. Sin paos calientes, el de ayer es el peor partido que le he visto en mi vida. Es imposible saber qu est pasando por su cabeza, pero es muy evidente la consecuencia que est teniendo en sus pies.
Mbapp est torpe. Juega sin confianza y se precipita constantemente. Ayer cada vez que conduca el baln tena que corregir dos o tres veces la marcha porque la pelota iba de lado a lado como un conejo. Fall pases imposibles de fallar. No consigui marcharse de nadie. Que fallase el penalti pareci hasta lgico.
Un Mbapp normal le hubiese dado tiempo y aire al Real Madrid. Un buen Mbapp hubiese amenazado en cada contra al Liverpool hacindole dudar. Un gran Mbapp incluso hubiera ganado un partido aun siendo su equipo inferior
Pero lo de ayer…
Lo de ayer me record a ese momento en el que los monstruos de Space Jam le roban las habilidades a Charles Barkley, Patrick Ewing y compaa.
Slo hay que ver ese momento previo al penalti en el que Mbapp, inseguro, mira a cada lado esperando que el rbitro le deje lanzar.
Mbapp est tremendamente bloqueado y su bloqueo, sobre todo ahora sin Vinicius, amenaza con bloquear por completo al Real Madrid. Porque ayer el Real Madrid no pierde por Mbapp, pero Mbapp le alej completamente de la victoria. Y en realidad el Real Madrid le fich precisamente para que ganara partidos que el equipo quizs no mereca ganar.