El Bayern Munich recibe el martes al Paris Saint-Germain en una batalla entre dos equipos que vuelan alto a nivel nacional pero que aparentemente luchan por adaptarse al nuevo formato de la Liga de Campeones. Después de cuatro partidos, el Bayern ha perdido dos veces (incluida una derrota por 4-1 ante el Barcelona, liderado por su ex entrenador Hansi Flick) y se ubica en el puesto 17, lo que lo dejaría sin cabeza de serie para el play-off de la fase eliminatoria. La situación del PSG es aún peor, con los campeones franceses en el puesto 25, un lugar completamente fuera de los octavos de ultimate.
Para dos equipos que disputaron la ultimate de la Liga de Campeones hace apenas cuatro años y que lideran sus ligas por seis puntos, las bajas clasificaciones ya son motivo de preocupación.
Los problemas del Bayern están muy lejos de sus hazañas en la antigua fase de grupos, donde los seis veces campeones de Europa terminaron con una racha récord de 40 partidos invictos, con 36 victorias y cuatro empates.
Su última derrota en la fase de grupos se produjo en 2017: una derrota por 3-0 ante el PSG, rival del martes.
Esta temporada, aparte de la derrota del Bayern en Barcelona, que generó rumores de que el nuevo entrenador Vincent Kompany podría tener problemas contra los mejores equipos, los gigantes alemanes han impresionado.
Invicto en la liga, la única otra derrota del Bayern se produjo en la Liga de Campeones ante el Aston Villa: una derrota por 1-0 en una repetición de la ultimate de la Copa de Europa de 1982.
Como sería para el PSG, una eliminación en la fase de liga sigue siendo una posibilidad impensable, y que podría tener ramificaciones reales para Kompany.
El apretado calendario de fútbol ofrece un verdadero incentivo para terminar entre los ocho primeros y evitar la ronda additional de play-off para los equipos que terminan del noveno al 24.
Thomas Mueller sabe que el PSG, que aún debe jugar contra el Manchester Metropolis, estará ansioso por ganar terreno después de un comienzo decepcionante en Europa.
“La posición del París en la tabla no refleja su rendimiento. Es un súper equipo con jugadores súper individuales”, dijo el veterano del Bayern a BR24 el sábado.
“Hay mucho en juego. Estoy feliz de que sea en casa”.
‘Pareja casada’
La derrota del PSG ante el Bayern en la ultimate de 2020, cuando su ex producto de la academia Kingsley Coman anotó el gol de la victoria contra ellos, sigue siendo lo más cerca que ha estado el equipo francés de la gloria de la Liga de Campeones.
Colectivamente, Bayern y PSG han ganado 21 de los últimos 24 títulos de liga que se ofrecen en casa, y los dos se han acostumbrado a encontrarse en Europa.
El encuentro del martes marca la cuarta vez en seis temporadas que la pareja se enfrentará. El Bayern ganó cuatro de los cinco partidos anteriores, pero el PSG lo eliminó en los cuartos de ultimate de la competición 2020-21.
“En la Liga de Campeones casi parece que somos una pareja casada”, dijo el director basic del Bayern, Jan-Christian Dreesen, a principios de este año después del sorteo.
Los veloces atacantes del PSG esperan causar problemas a un Bayern que carece de los centrocampistas defensivos Aleksandar Pavlovic y Joao Palhinha.
Leon Goretzka, fuera de forma, sustituyó bien en la victoria en casa por 3-0 del viernes sobre Augsburgo, pero es possible que el PSG represente un nivel diferente de amenaza.
El defensa del Bayern, Dayot Upamecano, está en mejor posición que la mayoría para saber qué esperar de sus compañeros franceses Ousmane Dembélé y Bradley Barcola.
“Es un partido importante para nosotros”, dijo Upamecano a Telefoot el domingo.
“Si miras la tabla, no es nada bueno: no estamos donde queremos estar”.
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