Buena noche europea del Barça. En fútbol, victoria del femenino en Viena (1-4 ante el Sankt Pölten). En balonmano, victoria en el Palau ante el Nantes (36-30). Era una prueba de fuego para los de Carlos Ortega. Era el primer partido de muchos que debía jugar sin Dika Mem. El líder del equipo, su capitán y el mejor del mundo estará casi tres meses de baja por lesión, tras pasar por el quirófano. Y hay un cambio de roles en un equipo donde, anoche, todos dieron un paso adelante. Desde N’guessan, a los jóvenes Cikusa y Makuc, hasta el nuevo capitán, Aitor Ariño, que se reivindicó con 6 goles desde el extremo. Él tuvo en sus manos la victoria en Nantes, en el último ataque, quedó fastidiado y ayer se desquitó. Mejor noche imposible, para la venganza, ante el único equipo que ha logrado arrancarle un empate a la máquina culé de esta temporada. De nuevo, nota altísima para el portero Nielsen, que incluso detuvo dos penaltis al especialista Valero Rivera, en su discreto retorno al Palau. En Austria, la MVP del partido fue Kika Nazareth.
La delantera fichada al Benfica por fin tuvo su gran noche de protagonismo. Hasta ahora había quedado algo eclipsada por el gran rendimiento de Pajor, una ‘killer’ del área. Ayer fue Kika quién lo aprovechó todo. Marcó el primero buscándose la vida en un robo, marcó también el segundo aprovechando el pase de la muerte de Brügts con una media vuelta estratosférica y dio el pase del cuarto a Alexia. Era el histórico gol 200 de Putellas en el Barça. También el tercer tanto fue de una gran belleza, con asistencia de Patri que sigue estando de dulce. Con sendas victorias, las de Romeu y los de Ortega se aseguran pasar a la siguiente fase. Bravo.