Escribir sobre el precio de Bitcoin es complicado. La criptomoneda más popular del mundo es tan atractiva como volátil y eso genera que predecir su comportamiento sea imposible. Por lo tanto, vale la pena aclarar que, al cierre de esta nota, su precio ronda los US$ 90.000 y que es posible que al momento de su publicación el título haya quedado viejo.
Dicho esto, Bitcoin ha tenido un rally alcista durante el último mes que hace tiempo no se veía. Impulsado por distintas razones, pero sobre todo por la victoria de Donald Trump en Estados Unidos, el activo tuvo una suba del 32% en dólares durante los últimos 30 días, según datos de la plataforma CoinMarketCap. Si bien llegó a posicionarse cerca de US$ 93.000 en un momento, parece haber encontrado una “relativa estabilidad” rondando los US$ 90.000. Por lo que deja una pregunta que intriga a la industria en estos momentos: ¿qué hace falta para que supere por primera vez en su historia los US$ 100.000? .
La respuesta puede encontrarse una vez más en la demanda. Bitcoin sigue siendo un bien escaso ya que solo habrá 21 millones y ya circulan alrededor de 19.78 millones . Durante sus primeros años, cuando todavía no era mainstream como ahora, quienes impulsaron la demanda fueron los usuarios retailers, amantes de esta nueva tecnología y creyentes que podía llegar a cambiar el mundo. Sin embargo, eso hoy cambió y quienes están impulsando la compra de Bitcoin son los clientes institucionales a través de los ETF de Bitcoin, principalmente los grandes fondos de inversión como BlackRock y Fidelity.
Al día de hoy, los ETF de Bitcoin alcanzan los US$ 55.000 millones. “Son extremadamente relevantes porque abrieron la adopción a nuevos jugadores y, por ende, la demanda . Además, muestran una aceptación del activo, que llegó para quedarse y no va a ir a ningún lugar”, explicó Sebastián Serrano, cofundador y CEO de Ripio, en un evento que la empresa organizó para su segmento B2B.
En esa línea, Serrano también remarcó que otra cuestión importante del lado institucional fue una reciente reforma contable en Estados Unidos. “Hasta este año, no se permitía a las empresas que habían comprado y ubicado Bitcoin en sus balances, contabilizarlas al valor de mercado pero si Bitcoin caía por debajo del valor al que habían comprado, sí tenían que registrar las pérdidas. Entonces, era horrible tener Bitcoin para una empresa pública hasta que esto cambió en enero de este año. Al modificarse, muchas empresas públicas pudieron sumar Bitcoin a su tesorería y eso impulsó la compra”, señaló el CEO de Ripio.