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JOS LUIS HURTADO
Actualizado
Con Espaa en el csped la Liga de las Naciones hasta parece una idea brillante. No hay competicin de baratija para este grupo. Copenhague fue la nueva estacin para los reyes de Europa. El Parken dans fue un saln para que Dani Olmo enseara una joyera, el mejor muestrario para sellar el liderato del grupo.
Sin diez posibles titulares de inicio, -Unai Simn, Carvajal, Le Normand, Rodri, Fabin, Pedri, Morata, Lamine Yamal y Nico Williams, hay pocas selecciones que no derrapen. No es el caso de Espaa, que sabe a lo que juega aunque cambie el dueo de la camiseta. Por encima del resultado merece la pena esperar un partido de Espaa, un mrito que no se puede medir con nmeros. Se sabe que no habr un encuentro aburrido con estos jugadores.
Si adems hay un jugador en estado de premio, Dani Olmo, todo resulta ms divertido. Su partido fue una golosina para los debates. Lo suyo fue una actuacin digna para estrenar una red social, uno de los extraos asuntos de moda.
Una movilidad letal
Delante no haba un rival de goma. Dinamarca, con nuevo seleccionador, Brian Riemer, entr en el partido con una presin de la de soplar en el tatuaje del rival. Cuando Espaa se ajust la pajarita se inici la danza de la movilidad y la calidad. El primer aviso llev la firma de Ayoze, que envi un zapatazo a la madera tras un gran pase de Pedro Porro, que le est cogiendo la medida al puesto. Sin pastillas para el susto, los daneses mostraban sntomas de mareo.
Tras un robo de baln en el balcn del rea danesa, una combinacin entre Merino, Ayoze y Oyarzabal concluy con un gol del hroe de Berln, con la derecha, la misma pierna que entrar un da en el museo del ftbol espaol.
En el paseo de ese tramo del partido brillaba Dani Olmo, un futbolista que con un toque, una finta o un pase, quema el laboratorio del rival. Desde la mediapunta dio un recital digno de quien lleva el dorsal ’10’, un honor que no es tontera en el ftbol. Cada vez que el baln llegaba al del pelo platino haba motivo para no acordarse ni de la nevera ni de noviembre ni del parn de selecciones.
Ayoze diseca a Schmeichel
Espaa jugaba como lo haca Dinamarca en los aos 80, aquella seleccin de aire libertino que entraba en el csped como si fuera una comuna. Los aficionados ms veteranos del Parken de Copenhague rebobinaban con deleite. Sin aquel goteo de talento, Dinamarca se refugi en los centros del veterano Christian Eriksen.
No era suficiente para atemorizar a Espaa, implacable cuando en la segunda mitad encontraba metros para las transiciones. En una de ellas, Dani Olmo, que ya se haba pedido la cabalgata por Copenhague, puso un baln certificado para que Ayoze disecara a Schmeichel.
Con Nico Wiliams, Casad y Morata en el verde, la ltima recta slo trajo malos noticias con las lesiones de Alex Baena y Zubimendi y un gol regalado a medias entre Fabin Ruiz y David Raya. El medio retras el baln, el portero se confi y el baln se lo qued a puerta vaca Isaksen. Dinamarca se descongel y tir de refriegas para igualar la contienda. En la ltima, David Raya estir un guante para evitar el empate. No era un antdoto para la Espaa de Dani Olmo.