En el mundo del atletismo en Medellín y Colombia su nombre ya es una marca registrada. De cariño, a Mauricio Restrepo lo llaman Mao, a quien en el imaginario de los que practican este deporte lo ven como un teso, o mejor, un súper humano. Él simplemente expresa que los retos que se traza sobre el pavimento van encaminados no solo a superarse, también a luchar por el bienestar de niños con cáncer y a motivar a otras personas para que luchen por sus metas y entiendan que, con disciplina y actitud, todo es posible.
Ahora este antioqueño de 37 años de edad, y quien desde hace 12 incursionó en el running, será una de las figuras del Clásico EL COLOMBIANO, certamen que por primera vez, en 51 años de historia, incluyó dicha disciplina en su programa de competencias.
Sin titubear, Restrepo comenta que ha participado en 18 maratones, en 96 medias maratones y que ha tenido la oportunidad de correr en Estados Unidos, Perú, España, México y diferentes ciudades de Colombia.
Hace dos años llamó la atención al desafiar una ultramaratón en Medellín. Corrió 75 kilómetros en 8 horas y 12 minutos; mientras que en agosto pasado subió al alto de Las Palmas cuatro veces en un mismo día, lo que simboliza un everesting, una ascensión total de 8.848 metros (la altura del Everest). Registró esa vez 5 horas y 18 minutos en 48 kilómetros.
Restrepo recuerda que incursionó en el cuento del running por medio de una fundación que tiene y la cual es de niños con cáncer.
“El motivo para empezar a correr fue por ellos. El reto mío cada año era buscar regalos y ayudas para mi fundación por medio del deporte. Lo que más he resaltado en este medio ha sido impactar, de atraer a la gente hacia la actividad física, hacia las cosas sanas, de ayudar a otros a ser mejores cada día”, comentó Restrepo, licenciado en Educación Física e ingeniero de Producción.
Casado con Claudia Zapata, trabajadora independiente, y padre de Samanta, de 11 años, y Matías, de 8, Mao se muestra complacido al saber que en Antioquia nace una nueva carrera atlética como es la del Clásico EC, que se celebrará este 24 noviembre rumbo a El Escobero, cima ubicada en el municipio de Envigado.
“Es valioso el nacimiento de una prueba como esta, ya que contaron con la participación de un deporte que en estos momentos da mucho de qué hablar y que está impactando muchas vidas”, indicó Mao, quien motivó a otros seis compañeros de su equipo de running para asistir a la cita.
“Me parece muy bonito lo que están haciendo porque siempre el Clásico había sido de ciclismo y de este evento salieron personas muy importantes. Entonces que incluyan ahora el running es algo ganador, debido a que es una especialidad que libera dopamina. Al correr te sientes libre, feliz, hay socialización y se integra a la familia. Con un certamen como este crece la comunidad del atletismo”.
Más allá del buen rendimiento que posee, Mao, especialista a la vez en triatlón, manifiesta que al Clásico no llega a competir.
“Terminar el recorrido es un objetivo, y la otra misión es inspirar a muchas más personas para que entiendan que el deporte es un gran aliado para tener una vida saludable”, concluyó este apasionado del atletismo, un deporte que llegó para quedarse en el tradicional evento recreativo y social de El COLOMBIANO.
Se viene presentación del Reto El Escobero
La edición 51 del Clásico El COLOMBIANO será en bicicleta y trotando. El certamen, que se celebrará con el ascenso a El Escobero Smart Fit, este 24 de noviembre, tiene abiertas sus inscripciones a través de la página web del Clásico. La Fundación del Grupo El COLOMBIANO hará la presentación del evento este martes 19 de noviembre a las 11:00 a.m. en la sede de esta casa editorial, en Envigado.
