Pete Hegseth, presentador de la cadena Fox News, la favorita del presidente electo Donald Trump, ser el prximo secretario de Defensa de EEUU. Despus de una ristra de nombramientos previsibles y dentro del establishment, desde su jefa de campaa como jefa de gabinete a congresistas, senadores y gobernadores para puestos de primer nivel, el lder republicano ha sorprendido a todo el mundo con una decisin que recuerda a las de 2016, en su primer mandato.
Hegseth, un veterano de las fuerzas armadas, es uno de los rostros de la edicin de fin de semana de Fox and Friends, el programa de referencia de Trump en su cadena fetiche, al que llama regularmente para intervenir o desahogarse. Alguien cercano, conservador y con siete hijos, que comparte su ideologa en trminos generales y que en sus charlas denuncia que “hay un movimiento poltico, que se llama marxista o marxista cultural que busca la destruccin de la civilizacin occidental y de Estados Unidos” desde dentro.
En el comunicado en el que anuncia su designacin, poco despus del nuevo director de la CIA o el abogado de la Casa Blanca, el presidente define al que ser su nuevo cargo, responsable de todo el aparato de Defensa, el despliegue por todo el planeta o la ayuda a Ucrania como un “guerrero que ha dedicado toda su vida a las tropas y a su pas. Con Pete al timn nuestros enemigos estarn prevenidos porque el Ejrcito volver a ser grande de nuevo”, ha escrito en su particular estilo.
Trump destaca que Hegseth, de 44 aos, con ttulos por Harvard y Princeton, sirvi en Guantnamo, Irak y Afganistn y obtuvo reconocimientos como dos cruces de bronce. Y que desde su programa de televisin ha ayudado, durante los ltimos ocho aos, a los veteranos. Sin ningn tipo de experiencia ejecutiva, poltica o diplomtica, el presidente elector apunta a que el presentador ha publicado un best seller en el que, siempre segn l, se denuncia la “traicin de la izquierda” a las tropas. Y promete que con su patriotismo ser el campen de la nueva poltica exterior: “paz mediante la fuerza”.
La designacin es quizs la ms controvertida hasta el momento, o desde luego la que va a generar ms polmica. Por la magnitud de lo que hay en juego, con 1.3 millones de soldados y un presupuesto cercano al billn de dlares anual. Por la aparente falta de cualificacin, pero tambin porque el presentador, muy activo y locuaz, tiene todo tipo de comentarios inapropiados, improcedentes y difciles de justificar en su haber.
En un podcast reciente, Hegseth dijo que no cree que las mujeres deban tener roles de combate en el ejrcito. En otra entrevista para hablar precisamente sobre su libro, publicado en verano, el autor asegura que “en los ltimos 10 o 15 aos el Pentgono tiene un rcord perfecto en las simulaciones de juegos de guerra con China: perdemos en todas las ocasiones”. Segn sus tesis, EEUU siempre llega tarde por culpa del sistema de compra y fabricacin de armas y la burocracia del “complejo industrial militar”, mientras que China “est construyendo su ejrcito con el nico propsito de luchar contra Estados Unidos” en algn momento del futuro, poniendo como ejemplos los misiles hipersnicos.
Su encaje ser complicado. Es un desconocido para casi todo el mundo, empezando por los senadores que deben confirmarlo y siguiendo por el universo de la Defensa, desde las empresas a los lobistas pasando por los polticos, los analistas y los generales o almirantes con los que tendr que trabajar. Por no hablar de los aliados de la OTAN.
El corazn del movimiento Maga estar ms satisfecho, porque est con ellos en las guerras culturales y porque que los nombres puestos sobre la mesa hasta el momento por Trump, desde Marco Rubio como secretario de Estado a Mike Haltz como asesor de seguridad nacional, les parecan peligroso, cercanos al movimiento neoconservador que marc la presidente de George W. Bush.
Hegseth, veterano y 15 aos ms joven que la media de los ocupantes del cargo en el pasado, es totalmente un outsider del sistema, pero al mismo tiempo tiene decenas de opiniones polmicas. Como cuando sugiri que se bombardeara Irn despus de que Trump autorizara la ejecucin con drones en Bagdad de Qasem Soleimani, creyendo que esa accin no era suficiente represalia por sus acciones en la zona.
Lo mismo ha ocurrido recientemente, siempre con Irn de fondo. Explicando cmo despus de las guerras de Irak o Afganistn hay “poco apetito en EEUU por construir naciones o cambios de rgimen”, pero eso no quita que “Irn consiguiendo la bomba atmica sea un gran problema”. Por eso, sostiene el designado como secretario de Defensa, “si Israel quiere lidiar con ellos, deberamos permitirlo. Es ridculo, es una cuestin existencial. Si no fuera por Israel, Irn habra tenido la bomba hoy”.
Trump ha premiado la lealtad y la defensa que Hegseht ha hecho durante aos ante las cmaras. Y ha valorado las conversaciones entre ambos a lo largo de los aos. El rol principal del candidato a Secretario de Defensa, que deber superer las audiencias en el Congreso, fue haciendo presin, lobby, para que una serie de militares investigados por crmenes de guerra fueran exonerados.
En medio de temores de que Trump pueda usar sus poderes como comandante en jefe para purgar a los principales generales o funcionarios pblicos, politizando el Departamento de Defensa, el elegido por Trump para ser jefe del Pentgono ha afirmado explcitamente que hay que empezar por una limpia en los altos cargos militares, incluido el responsable del Estado Mayor Conjunto, el general C.Q. Brown.
“En primer lugar, hay que despedir al jefe del Estado Mayor Conjunto”, dijo Hegseth cuando el presentador del podcast Shawn Ryan le pregunt hace unos das sobre la reforma del ejrcito. “Cualquier general que haya estado involucrado, cualquier general, almirante, lo que sea, que haya estado involucrado en cualquier cosa de diversidad o cosas wokes tiene que irse”.