Elecciones en vivo 2024: reacciones a la victoria de Trump

Un juez federal anuló una política de la administración de Joe Biden que allanaba el camino a la ciudadanía de algunos inmigrantes indocumentados casados con ciudadanos estadounidenses.

El programa, considerado una de las principales acciones del gobierno para ayudar a las familias inmigrantes en años, permitía a los cónyuges e hijos adoptivos de ciudadanos americanos obtener la tarjeta verde sin necesidad de salir del país.

La iniciativa conocida como “Mantener a las familias unidas” tenía pocas posibilidades de mantenerse luego de que Donald Trump asuma el poder en enero, pero su finalización temprana genera incertidumbre en las familias inmigrantes, muchas de las cuales apoyaron el regreso de Trump a la Casa Blanca.

El primer ministro húngaro Viktor Orbán predijo que la administración de Donald Trump pondrá fin al apoyo a Ucrania en su lucha contra la invasión rusa.

Los comentarios de Orbán fueron una señal de que la victoria de Trump podría abrir una brecha entre los líderes de la Unión Europa (UE) sobre la guerra.

El líder húngaro es el anfitrión del segundo de dos días de reuniones el viernes en la capital Budapest. La guerra en Ucrania es una de las prioridades de la agenda de los 27 líderes de la UE, la mayoría de los cuales cree que continuar proveyendo a Ucrania de armas y asistencia financiera es clave para la seguridad del continente.

El líder nacionalista húngaro lleva mucho tiempo tratando de socavar el apoyo de la UE a Kiev y habitualmente ha bloqueado, retrasado o suavizado los esfuerzos del bloque por proporcionar armas y financiación y sancionar a Moscú por su invasión.

“Si Donald Trump hubiera ganado en (las elecciones de) 2020 en Estados Unidos, estos dos años de pesadillas no habrían ocurrido. Ni siquiera habría una guerra”, dijo Orbán. “La situación en el frente es obvia, ha habido una derrota militar. Los americanos van a salir de esta guerra”.

El presidente turco Recep Tayyip Erdogan elogió a Donald Trump por su victoria electoral y expresó su optimismo por unas relaciones más sólidas entre Turquía y Estados Unidos durante su segundo mandato.

En declaraciones realizadas a última hora del jueves, Erdogan también expresó su esperanza de que los conflictos en Medio Oriente y Ucrania puedan llegar a su fin mediante la colaboración con Trump.

Erdogan dijo que Trump había ganado las elecciones a pesar de enfrentarse a importantes desafíos, como un intento de asesinato y acusaciones penales.

“A pesar de ello, continuó su campaña electoral con mucha fuerza, incansablemente y con resiliencia”, dijo a periodistas del diario Hurriyet y otros medios durante un vuelo de regreso de viajes a Kirguistán y Hungría.

Pese a los periodos de tensiones entre sus países, Erdogan había establecido una estrecha relación con Trump durante su primer mandato. Por el contrario, la administración del presidente Joe Biden había mantenido un enfoque distanciado hacia el líder cada vez más autoritario de Turquía.

Erdogan dijo que plantearía a Trump la cuestión de una posible retirada de las tropas estadounidenses de Siria. Turquía considera que la presencia de tropas estadounidenses que apoyan a una fuerza dirigida por un grupo miliciano kurdo sirio -que está vinculado con militantes kurdos- es una amenaza para su seguridad.

La victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos cambió al instante los cálculos de millones de migrantes, o potenciales migrantes, en todo el mundo.

Pero quizás no de la manera que Trump imaginaba.

El republicano ha prometido reducir la inmigración, pero restringir las ya limitadas vías legales de entrada a Estados Unidos sólo hará que esas personas ajusten sus planes y recurran más a los servicios de traficantes, coinciden los expertos.

Y, en la gran mayoría de los casos, eso significa ponerse en manos del crimen organizado, que ha hecho del tráfico de migrantes uno de sus negocios más lucrativos.

Los líderes republicanos mostraron confianza en que mantendrán el control de la Cámara de Representantes de Estados Unidos a medida que ganaban más escaños, mientras que los demócratas insistieron en que aún pueden lograr la mayoría y buscaron garantías de que se contarán todos los votos.

El Partido Republicano ganó dos escaños más en duras batallas en Pensilvania, un estado donde los demócratas sufrieron una derrota generalizada. Los demócratas se anotaron otra victoria en Nueva York, tras vencer a un tercer legislador republicano en ese estado.

Ambos partidos sostuvieron videollamadas privadas para evaluar el panorama político mientras el Congreso se preparaba para regresar la próxima semana a un Washington distinto, donde Trump podría gozar de una mayoría republicana.

El conservador y combativo líder de Hungría dijo que la victoria de Donald Trump ayudará en su propia batalla contra la inmigración y el multiculturalismo y restaurará los valores familiares tradicionales.

En Argentina, un presidente que una vez abrazó efusivamente a Trump en una conferencia política en Maryland ataca a sus críticos llamándolos ratas y parásitos, despotricando contra lo que él llama una élite corrupta y calificando el cambio climático de “mentira socialista”.

El segundo mandato de Trump podría reorientar la diplomacia de Estados Unidos para alejarla de las alianzas internacionales tradicionales y acercarse más a políticos populistas y autoritarios, según esos líderes y observadores externos.

Un repaso a posibles escenarios aquí.

Ligeramente más de 8 de cada 10 votantes de Trump en esta elección eran blancos, aproximadamente las mismas cifras de 2020. Alrededor de dos tercios de los votantes de Harris eran blancos, y eso coincidió en gran medida con la coalición del presidente Joe Biden en la elección anterior. Los votantes blancos constituyen una gran parte del electorado en Estados Unidos, y no cambiaron marcadamente su apoyo a nivel nacional en comparación con 2020.

Esa conclusión proviene de AP VoteCast, una amplia encuesta realizada a más de 120,000 votantes a nivel nacional que muestra qué temas importaron a los votantes en esta elección.

La mayoría del electorado blanco votó por Trump, sin cambios respecto a la elección de 2020 que perdió por poco. Alrededor de 4 de cada 10 votantes blancos apoyaron a Harris, lo cual es aproximadamente lo mismo que recibió Biden en 2020.

Los votantes blancos también fueron más propensos a apoyar a Trump sobre Harris y Biden en Pensilvania, Michigan y Wisconsin, aunque Trump perdió esos estados en 2020.

Trump se vio favorecido de un leve incremento de apoyo tanto entre hombres como mujeres, y Harris tuvo un desempeño modestamente por debajo en comparación con Biden en 2020, según la encuesta AP VoteCast.

Harris obtuvo la ventaja entre las mujeres, recibiendo el 53% de sus votos frente al 46% de Trump, pero ese margen fue algo más estrecho que el de Biden. El demócrata ganó el 55% de los votos de las mujeres, y el 43% optó por Trump. Su apoyo se mantuvo estable entre las mujeres blancas: ligeramente más de la mitad apoyaron esta vez a Trump, algo similar a lo ocurrido en 2020.

AP VoteCast es una encuesta del electorado estadounidense realizada por NORC en la Universidad de Chicago para Fox News, PBS NewsHour, The Wall Street Journal y The Associated Press. La encuesta entre más de 120.000 votantes se llevó a cabo durante ocho días y concluyó al cierre de las urnas.

Trump logró una mejoría similar entre los hombres, con un incremento modesto que aumentó su ventaja, según AP VoteCast, una amplia encuesta realizada a más de 120,000 votantes a nivel nacional que muestra qué temas importaron a los votantes en esta elección.

Los cambios por género se concentraron entre los votantes más jóvenes, así como entre los votantes negros y latinos. Los votantes blancos de ambos géneros y los votantes adultos mayores de ambos géneros votaron de manera similar en 2024 como lo hicieron en 2020.

Si bien Harris obtuvo más de la mitad del voto hispano, ese apoyo bajó ligeramente de los aproximadamente 6 de cada 10 votantes hispanos que respaldaron a Biden, según la conclusión de la encuesta APVoteCast.

Los votantes hispanos, de acuerdo con las conclusiones de la encuesta APVoteCast a más de 120.000 electores, estuvieron más abiertos a Trump de lo que estaban en 2020. Aproximadamente la mitad de los hombres latinos votaron por Harris, menos que alrededor de 6 de cada 10 que optaron por Biden.

La encuesta AP VoteCast se realizó entre más de 120.000 votantes se llevó a cabo durante ocho días y concluyó al cierre de las urnas.

Trump logró hacer pequeñas incursiones con los votantes negros a nivel nacional, quienes constituyeron alrededor de 1 de cada 10 votantes en todo el país.

A nivel nacional, alrededor de 8 de cada 10 votantes negros apoyaron a Harris. Pero, eso fue menos que alrededor de 9 de cada 10 que optaron por Biden en la anterior elección presidencial. Los datos son parte de la encuesta AP VoteCaste a más de 120.000 votantes.

Trump aproximadamente duplicó su proporción de hombres negros jóvenes, lo que le ayudó entre un grupo clave de votantes demócratas. Alrededor de 3 de cada 10 hombres negros menores de 45 años optaron por Trump, cerca del doble de la cantidad que obtuvo en 2020.

Los funcionarios de la Reserva Federal redujeron su tasa de interés clave el jueves en un cuarto de punto.

Este recorte se da tras una reducción más grande de medio punto en septiembre y refleja el enfoque renovado de la Fed en apoyar el mercado laboral, así como en combatir la inflación, que ahora apenas supera el objetivo del 2% del banco central.

La medida del jueves reduce la tasa de referencia de la Fed a aproximadamente el 4,6%, desde un máximo de cuatro décadas del 5,3% antes de la reunión de septiembre.

La Fed había mantenido su tasa tan alta durante más de un año a fin de combatir la peor racha de inflación en cuatro décadas.

Trump ha dicho que emitiría indultos a los alborotadores del Capitolio en el “Día 1” de su presidencia, aunque en su discurso de victoria no los mencionó.

Anteriormente, e dijo a la revista Time que consideraría indultar a todos los acusados del 6 de enero, aunque luego agregó: “Si alguien era malvado y malo, lo vería de manera diferente”.

También le dijo a “Meet the Press”, de NBC, el año pasado que consideraría indultar al exlíder de los Proud Boys, Enrique Tarrio, quien fue condenado a 22 años de prisión después de ser condenado por conspiración sediciosa. Trump dijo que Tarrio fue tratado “horriblemente”.

Cuando fue presionado durante un evento en julio, Trump dijo que “definitivamente” indultaría a los alborotadores acusados de agredir a la policía si eran “inocentes”. Cuando la entrevistadora señaló que estaba hablando de alborotadores condenados, Trump respondió que fueron condenados “por un sistema muy duro”.

El secretario de Economía de México, Marcelo Ebrard, se mostró el jueves optimista sobre el futuro de las relaciones con la administración del presidente electo Donald Trump y sobre la revisión del acuerdo del T-MEC que se debe emprender en los próximos años.

En declaraciones a la prensa, Ebrard expresó que no veía problemas a futuro “porque el tamaño del intercambio entre los dos países comerciales hace que toda la lógica te lleva a que lo fortalezcas”.

“Yo soy optimista. No digo que va a ser fácil, porque nada es fácil, pero la relación con el presidente Trump va a ser muy buena”, agregó.

Al ser preguntado sobre la amenaza que lanzó Trump durante la campaña de que incrementaría los aranceles a las importaciones provenientes de México para presionar al gobierno a que frene el flujo migratorio, el excanciller recordó que esos riesgos también se dieron en el sexenio pasado y aseguró que eso se enfrenta “con sangre fría e inteligencia”.

Biden tiene previsto visitar Brasil del 17 al 19 de noviembre, con una primera parada en Manaos para visitar la selva amazónica y reunirse con comunidades locales, incluidos líderes indígenas.

La Casa Blanca indicó que después viajará a Rio de Janeiro para una cumbre del G-20 con los líderes de las mayores economías del mundo.

El presidente estadounidense dijo, además, que mantuvo una charla telefónica con su par brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, quien había mostrado su apoyo a la candidata demócrata Kamala Harris durante las elecciones que ganó Donald Trump.

Antes de su llegada a Brasil, el presidente saliente de Estados Unidos visitará Lima, en Perú, para el encuentro anual del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC, por sus siglas en inglés). Las dos citas de líderes del mundo ofrecerán a Biden una de sus últimas oportunidades, como presidente, para encontrarse con jefes de estado con los que ha trabajado en los últimos años.

Susie Wiles dirigió la triunfante campaña electoral de Donald Trump y ahora será la jefa de gabinete de la Casa Blanca.

Wiles es ampliamente reconocida dentro y fuera del círculo más cercano de Trump por manejar lo que fue, de lejos, la campaña más disciplinada y mejor ejecutada. Mantuvo un perfil bajo evitando los focos e incluso rechazando tomar el micrófono el miércoles en la celebración de Trump de su victoria.

“Susie es dura, inteligente, innovadora y es abiertamente admirada y respetada. Susie seguirá su trabajo incansable para hacer grande a Estados Unidos”, dijo Trump en un comunicado, haciendo un guiño a su lema “Make America Great Again”.

“Será un honor bien merecido que se convierta en la primera mujer jefa de gabinete de la historia de Estados Unidos”, resaltó, añadiendo que hará sentirse orgullosos a los estadounidenses.

Wiles es una estrategia republicana de largo recorrido en Florida. Manejó la campaña de Trump para el estado en 2016 y 2020.

El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, apeló a los militares a facilitar una transición sin complicaciones ante la elección de Donald Trump, recordándoles su compromiso de seguir las órdenes del siguiente comandante en jefe.

Ese tipo de recordatorios no son usuales, pero tampoco es la primera vez que el jefe civil de los uniformados conmina a los militares a obedecer a la Constitución, con miras al cambio de mando de Trump.

Sin embargo, con la sugerencia del presidente electo de que podría desplegar a las fuerzas federales en la frontera sur como contexto y con el Proyecto 2025 que planea forzar la salida de civiles de carrera para colocar a leales a Trump en esos cargos de civiles de carrera, la administración de Joe

Biden ha tomado medidas inusuales tanto para tratar de aislar a esos funcionarios como para recordar a los militares sus propios juramentos.

Para Donald Trump, no hay otra opción que llevar adelante su plan de deportaciones masivas de migrantes promovido en campaña.

En una entrevista en NBC, el presidente electo dijo que “no es una cuestión de costo. No lo es. Realmente no tenemos otra opción”.

En su propuesta de campaña, ofreció la mayor deportación de la historia de Estados Unidos.
“Cuando hay gente que ha asesinado, cuando los líderes de los cárteles han destruido países, ahora van a tener que volver a esos países porque aquí no se van a quedar. No hay costo para eso”.

Después de que el expresidente Donald Trump diera su discurso de victoria el miércoles temprano en el Centro de Convenciones de Palm Beach, en Florida, docenas de sus seguidores se reunieron en un vestíbulo para cantar “How Great Thou Art,” (“Cuán Grande Eres”), recitando de memoria la letra y armonías de una alabanza clásica, popular entre los cristianos evangélicos.

Fue un cierre apropiado para una elección en la que Trump una vez más ganó el apoyo de aproximadamente 8 de cada 10 votantes cristianos evangélicos blancos, según AP VoteCast, una amplia encuesta de más de 120.000 votantes.

Ese margen, entre un grupo que representaba alrededor del 20% del electorado total, repite márgenes igualmente impresionantes de apoyo evangélico que Trump recibió en 2020.

El Departamento de Estado dice que ha empezado a tomar acciones para facilitar la transición de la administración de Joe Biden a la del presidente electo Donald Trump.

El secretario de Estado Anthony Blinken le ha indicado a los empleados del Departamento que trabajen junto a los funcionarios entrantes para asegurar una transición pacífica y ordenada que proteja la seguridad nacional.

El vocero del Departamento, Matthew Miller, dijo el jueves que al exdiplomático Stephen Mull, quien fuera embajador y actualmente es vicerrector de la Universidad de Virginia, se le ha encargado la tarea de liderar el trabajo conjunto con el equipo de Trump.

Miller dijo que el Departamento todavía no ha sido contactado por el equipo de Trump que lidera Brian Hook –un exrepresentante ante Irán durante la administración de Trump- y Joel Rayburn, un ex enviado especial a Siria.
Miller dijo que el Departamento va a recopilar la información sobre política y procedimientos y que estará listo para responder todas las preguntas.

El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, tuvo el jueves una conversación telefónica con Donald Trump tras su “amplia victoria” electoral, según dijo, y hablaron de los “efectos dañinos” de los fondos de ayuda estadounidense a las ONG que, asegura el mandatario salvadoreño, mantienen una agenda contra su gobierno.

“Lo felicité por su amplia victoria el martes y discutimos el fuerte mandato que recibió del pueblo estadounidense y la importancia que tiene su elección para el mundo”, dijo Bukele en su cuenta oficial de la red social X, antes Twitter.

“Tuvimos una conversación interesante sobre su estrategia de podcast (por medio de la cual hizo campaña), la bala que casi lo mata, las personas increíbles que lo rodean, los efectos a veces dañinos de los fondos de ayuda estadounidenses, las ONG respaldadas por (George) Soros y nuestro compromiso compartido de abordar los desafíos venideros”, manifestó el mandatario salvadoreño.

Mientras el presidente electo Donald Trump se prepara para su segundo mandato en la Casa Blanca, China lo hace para imprevistos en su relación con Estados Unidos.

La primera vez que China enfrentó a Trump en el poder, hubo una guerra comercial, hubo una violación en el protocolo que involucró a la exgobernante de Taiwán, y un distanciamiento entre dos mandatarios que alguna vez fueron muy cercanos.

Si Trump cumple sus promesas de campaña, quizá la mayor consecuencia para China está relacionada con sus amenazas de imponer aranceles del 60% a todas las exportaciones chinas hacia Estados Unidos.

También existe un escenario en el que Trump ha amenazado con imponer aranceles aún más altos —del 150% al 200%— sobre los bienes chinos: si China invade Taiwán, una democracia autónoma que Beijing reclama como parte de su territorio.

Trump enfureció a Beijing en diciembre de 2016 cuando aceptó una llamada de felicitación de la entonces gobernante de Taiwán, Tsai Ing-wen, lo que significó una violación al protocolo diplomático. Ningún presidente de Estados Unidos había hablado directamente con un presidente taiwanés desde que Washington y Beijing establecieron relaciones en 1979.

El primer ministro canadiense Justin Trudeau dijo el jueves que ha restablecido un comité de gabinete especial sobre las relaciones entre Estados Unidos y Canadá para analizar las preocupaciones de su administración sobre la nueva presidencia de Donald Trump.

La viceprimera ministra Chrystia Freeland, que también es la ministra de Finanzas canadiense, liderará el comité que también incluirá a otros altos funcionarios como ministros de Relaciones Exteriores, Seguridad e Industria.

“Siguiendo la elección del presidente Donald Trump para un Segundo período, el comité de gabinete se enfocará en asuntos críticos entre Canadá y Estados Unidos”, dijo la oficina de Trudeau en un comunicado el jueves.

El presidente ruso felicitó el jueves a Donald Trump por su victoria electoral. Es el primer pronunciamiento del líder de Rusia tras los resultados en Estados Unidos.

Su mensaje llega después de dar un discurso en un foro internacional en Sochi, en el Mar Negro.

“Me gustaría aprovechar esta oportunidad para felicitarlo por su elección como presidente de los Estados Unidos de América”, dijo en un espacio abierto para preguntas.

El presidente colombiano Gustavo Petro cuestionó el jueves el trato a los migrantes en Estados Unidos sin referirse explícitamente a las potenciales medidas que podría tomar el presidente electo Donald Trump.

“Nos han dicho que no vayan más a su tierra prometida… ¿Qué va a pasar? ¿Cuál es la línea política? ¿Poner los muros, poner las zonas de concentración? ¿Dejar morir a la mamá y su hija colombiana en el desierto del sur de los Estados Unidos y el norte de México?”, señaló Petro en el discurso de apertura de la Primera Conferencia Ministerial Mundial para poner fin a la violencia contra la niñez que se realiza en Colombia.

El mandatario aseguró que la solución para los crecientes flujos migratorios “debería ser la prosperidad de estos pueblos”, en referencia a los países nativos de los migrantes, una idea que ya había delineado la víspera cuando felicitó a Trump por su triunfo electoral.

Los iraníes, como muchos en todo el mundo, están divididos sobre lo que traerá la próxima presidencia de Donald Trump: Algunos prevén una guerra total entre Teherán y Washington, especialmente en un momento en que otros conflictos arden en la región. Otros mantienen la esperanza de que el 47mo presidente de Estados Unidos pueda participar en una diplomacia inesperada como lo hizo con Corea del Norte.

Pero casi todos creen que algo cambiará en la relación entre Estados Unidos e Irán.

Las elecciones presidenciales estadounidenses son el momento en que la nación se mira en un espejo. Son un reflejo de valores y sueños, de agravios y cuentas por saldar.

Los resultados dicen mucho sobre el carácter, el futuro y las creencias fundamentales de un país. El martes, Estados Unidos se miró en ese espejo y una mayoría de votantes vieron al expresidente Donald Trump y le dieron una victoria de amplio alcance en los estados más disputados.

Ganó por muchas razones. Una de ellas fue que una cantidad formidable de estadounidenses, desde diferentes ángulos, dijo que el estado de la democracia era una preocupación primordial.

Cuando estuvo claro que Donald Trump volvería a la Casa Blanca, el hombre de Florida que posó para las fotos con el atril de la portavoz de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, durante la toma del Capitolio abrió una botella de vino espumante de la marca Trump. “Todos están en problemas”, dijo luego de tomar un trago en un video compartido en las redes sociales.

Los atacantes del Capitolio el 6 de enero de 2021 están celebrando la victoria de Trump y esperan que cumpla su promesa de campaña de indultarlos.

Trump no ha mencionado a los acusados del ataque, a quienes ha llamado “rehenes” y patriotas”, durante su discurso de victoria del miércoles. Pero haber vencido a la vicepresidenta Kamala Harris pone en duda el futuro de la mayor acusación en la historia del Departamento de Justicia por el asalto sin precedentes a una sede de la democracia estadounidense.

En un encuentro el mes pasado en Univision, le preguntaron a Trump por algún error o lección de su primer mandato en la Casa Blanca. Dijo entonces que era un extraño en Washington, que había visitado 17 ciudades en toda su vida y que confió en el conocimiento de otras personas para formar su gabinete.

Recalcó que hubo personas “con las que no volvería a contar”.

“En general, escogí bien”, dijo. “Pero también había personas con las que no volvería a contar. Ahora, tengo tremenda experiencia. Creo que tengo más experiencia que nadie en la historia en términos de personal, en términos de ese tipo de gente, la experiencia que necesitas. Y conozco a toda la gente. Conozco a los jugadores”.

La presidenta mexicana Claudia Sheinbaum mantuvo el jueves su primera conversación con Donald Trump tras su victoria, una llamada que calificó de “muy cordial”. “Hablamos de la buena relación que habrá entre México y Estados Unidos”, dijo la mandataria en su cuenta oficial de X, antes Twitter.

Sheinbaum había adelantado que sería una plática de felicitación porque ya habría momento después de dialogar sobre de la agenda bilateral.
La mandataria mexicana aspira a mantener encuentros de alto nivel con integrantes de la futura administración estadounidense para hablar en detalle sobre migración, comercio bilateral y cuestiones de seguridad.

Los funcionarios de la Reserva Federal se preparan para reducir su tasa de interés clave por segunda vez consecutiva el jueves, respondiendo a una desaceleración constante de las presiones inflacionarias que exasperaron a muchos estadounidenses y contribuyeron a la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales.

Sin embargo, los futuros movimientos de la Fed ahora son más inciertos tras las elecciones, dado que las propuestas económicas de Trump han sido ampliamente señaladas como potencialmente inflacionarias.

Su triunfo también ha levantado suspicacias de intromisión por parte de la Casa Blanca en las decisiones de política de la Fed, con Trump proclamando que como presidente debería tener voz en las decisiones sobre las tasas de interés del Banco Central.

La Fed ha protegido durante mucho tiempo su estatus como una institución independiente capaz de tomar decisiones difíciles sobre las tasas de préstamo, libre de interferencias políticas.

La economía también está nublando el panorama al mostrar señales contradictorias, con un crecimiento sólido pero una disminución en la contratación. Aun así, el gasto del consumidor ha sido saludable, alimentando preocupaciones de que no es necesario que la Fed reduzca los costos de endeudamiento y que hacerlo podría sobreestimular la economía e incluso acelerar de nuevo la inflación.

Joe Biden reconoció el jueves que “los contratiempos son inevitables, pero rendirse es imperdonable”.

En su primer discurso público tras la derrota electoral demócrata frente a Donald Trump, dijo que “Estados Unidos resiste” y aseguró que van a “estar bien pero necesitamos permanecer comprometidos”.

El mandatario habló desde el jardín de las rosas de la Casa Blanca luego de que el martes la demócrata Kamala Harris fuera derrotada por el republicano Donald Trump.

El presidente Joe Biden reapareció públicamente tras la derrota electoral demócrata y dio un discurso desde la Casa Blanca el jueves en el que ofreció una transición pacífica de poder a Donald Trump.

Biden aseguró que “en una democracia, el deseo del pueblo siempre prevalece” y agregó que habló con Trump y le aseguró que su administración hará una “transición pacífica y ordenada” porque es lo que la gente merece.

El sistema electoral estadounidense, recalcó es “honesto, es justo y es transparente. Y se puede confiar en él, se gane o se pierda”.

El presiente hizo una velada referencia a cómo Trump, en 2020, se negó a aceptar el resultado de la elección. Trump fue reelecto esta semana.

Donald Trump ganó la presidencia de Estados Unidos tras mantener firme su base principal de votantes y expandir ligeramente su coalición para incluir varios grupos que tradicionalmente han sido parte de la base demócrata. Esa conclusión proviene de AP VoteCast, una amplia encuesta realizada a más de 120.000 votantes a nivel nacional que muestra qué temas le importaron a los votantes en esta elección.

Trump captó una pequeña pero significativa proporción de votantes negros e hispanos y logró avances estrechos con hombres y mujeres. Mientras Trump erosionaba partes de la coalición demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris no pudo lograr suficientes avances por su cuenta. Trump logró asegurar su base tradicionalmente mayoritaria de votantes blancos y adultos mayores y expandió ligeramente sus márgenes con otros grupos hasta formar una coalición ganadora.

Los ciudadanos de Arizona votaron a favor de una propuesta que permite a la policía local arrestar a migrantes que se sospecha que han ingresado ilegalmente desde México, una autorización que podría colisionar con el poder del gobierno federal en el combate a la inmigración pero que no tendrá efecto inmediato.

Con la aprobación de la llamada propuesta 134, Arizona se ha convertido en el último estado en probar los límites de lo que las autoridades locales pueden hacer para frenar la inmigración ilegal. En el último año los legisladores el Partido Republicano en Texas, Iowa y Oklahoma han aprobado leyes de inmigración. En cada caso, las cortes federales han frenado los esfuerzos estatales por aplicarlas.

Las discrepancias sobre la política migratoria no son nuevas en Arizona. Desde principios de los 2000, la frustración sobre el control federal de la frontera del estado con México ha inspirado un movimiento para atraer a los departamentos de policía locales, que tradicionalmente habían dejado las tareas fronterizas en manos del gobierno federal, a la aplicación de las leyes de inmigración.

Cerca de 50 líderes europeos hicieron un llamado el jueves a adoptar una postura de mayor defensa del continente que ya no dependa de Washington al dar una cautelosa bienvenida al presidente electo Donald Trump.

La reunión de la Comunidad Europea en la capital de Hungría, Budapest, reaseguró las relaciones transatlánticas con la esperanza de que la segunda presidencia de Trump evitará los conflictos de su primera administración.

“Fue elegido por el pueblo americano. Defenderá los intereses americanos”, dijo el presidente francés Emmanuel Macron y agregó que no es el rol de los líderes de la Unión Europea “hacer comentarios sobre la elección… preguntarse si es buena o no”.

“La pregunta es si estamos dispuestos a defender los intereses europeos. Esa es la única pregunta. Es nuestra prioridad”, dijo Macron.

El nombre de Joe Biden no estaba en la boleta, pero es probable que la historia recuerde la rotunda derrota de Kamala Harris como un fracaso también para él.

Mientras los demócratas se recomponen tras la decisiva victoria del presidente electo Donald Trump, algunos simpatizantes de la vicepresidenta expresan su frustración porque la decisión de Biden de buscar la reelección hasta este verano —a pesar de las largas preocupaciones de los votantes sobre su edad y de la inquietud por la inflación posterior a la pandemia, así como por la frontera entre Estados Unidos y México— prácticamente garantizó que su partido perdiera la Casa Blanca.

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, mantendrá el jueves por la mañana su primera conversación con Donald Trump tras su victoria electoral, una llamada “de felicitación”, según dijo, porque “ya habrá momento de platicar de la agenda bilateral”.

La mandataria mexicana quiere mantener encuentros de alto nivel con integrantes de la futura administración estadounidense para hablar en detalle sobre migración, comercio y seguridad dados los anuncios del republicano de deportaciones masivas e imposición de aranceles.

Sheinbaum felicitó a Trump por la victoria después de la que vicepresidenta Kamala Harris reconociera su derrota y tras mandar un mensaje de tranquilidad a todos los mexicanos para que no se preocuparan por el resultado electoral de sus vecinos. En sus redes sociales dijo que estaba segura de “continuar trabajando juntos de manera coordinada, con diálogo y respeto a nuestras soberanías”.

By LISA MASCARO, MARY CLARE JALONICK

La mayoría en la Cámara de Representantes de Estados Unidos aún pendía de un hilo el miércoles, oscilando entre un control republicano que daría inicio a una nueva era de gobierno unificado del Partido Republicano en Washington o pasaría a manos de los demócratas como una última línea de resistencia a la agenda de Donald Trump durante su segundo mandato.

Unos pocos escaños, o incluso uno solo, determinarán el resultado. Los recuentos finales tardarán un poco, lo que probablemente extienda la decisión hasta la próxima semana.

“Construyan el muro” fue el lema de la campaña de Donald Trump en 2016, y actuó en consecuencia al recurrir a presupuestos militares para construir cientos de kilómetros de muro fronterizo con México. “Deportación masiva” fue la expresión de moda que entusiasmó a quienes lo apoyaron en su contienda por la Casa Blanca en 2024.

La victoria de Trump prepara el escenario para una rápida ofensiva después de que una encuesta de AP VoteCast mostró que los partidarios del presidente electo se centraron principalmente en la inmigración y la inflación, temas que el republicano recalcó durante toda su campaña.

El secretario de Estado del Vaticano, cardenal Pietro Parolin, dijo que espera que Donald Trump cumpla su promesa de poner fin a las guerras que convulsionan al mundo, al tiempo que se abstenga de “extremismos” para combatir la inmigración.

Luego de una conferencia en Roma el jueves, Parolin dijo que la Santa Sede “le desea lo mejor” a Trump.

“Le deseamos mucha sabiduría porque ésta es la principal virtud de los gobernantes según la Biblia”, dijo Parolin, según Vatican News.

Aunque reconoció que nadie tiene una “varita mágica” para poner fin a las guerras en Ucrania y Gaza, Parolin dijo que la Santa Sede espera que Trump “pueda efectivamente ser un elemento de distensión y pacificación en los actuales conflictos que ensangrientan el mundo”.

Agregó que espera que Trump trabaje para poner fin a la polarización en Estados Unidos, incluso sobre el aborto. “Espero también que esta defensa de la vida que Trump ha asegurado que hará durante su mandato pueda ampliar el consenso”, indicó.

Sobre la migración, recordó el llamamiento del papa Francisco a acoger a quienes huyen de las guerras, la pobreza y el cambio climático.

“Estamos por una política sabia hacia los migrantes y, por tanto, que no llegue a estos extremos”, dijo y pidió respuestas “humanas” al fenómeno migratorio.

Después de visitar la frontera entre Estados Unidos y México en 2016 y preguntado por el llamamiento de Trump a construir un muro, Francisco dijo que cualquiera que construya un muro para mantener alejados a los migrantes “no es cristiano”. Más recientemente, en papa recomendó a los votantes estadounidenses elegir el “mal menor” cuando se le preguntó cómo debería votar un católico estadounidense ante la promesa de Trump de deportar a los migrantes y el apoyo de la vicepresidenta Kamala Harris al derecho al aborto.

El Dalai Lama felicitó el jueves al presidente electo Donald Trump y sostuvo que espera que ejerza el liderazgo para lograr la paz y la estabilidad en estos tiempos de gran incertidumbre y agitación en varias partes del mundo.

“Siempre he admirado a los Estados Unidos de América como el campeón de la democracia, la libertad y el Estado de Derecho”, dijo el líder espiritual tibetano en un mensaje a Trump desde la norteña ciudad india de Dharamshala, donde ha vivido en el exilio desde que salió del Tíbet en 1959.

“El pueblo tibetano y yo hemos tenido el honor de recibir el apoyo de los respectivos presidentes de Estados Unidos y del pueblo estadounidense en nuestro esfuerzo por proteger y preservar nuestra antigua cultura budista, una cultura de paz, no violencia y compasión que puede beneficiar a toda la humanidad”, declaró.

El conservador y combativo líder de Hungría dijo que la victoria de Donald Trump ayudará en su propia batalla contra la inmigración y el multiculturalismo y restaurará los valores familiares tradicionales.

En Argentina, un presidente que una vez abrazó efusivamente a Trump en una conferencia política en Maryland ataca a sus críticos llamándolos ratas y parásitos, despotricando contra lo que él llama una élite corrupta y calificando el cambio climático de “mentira socialista”.

El segundo mandato de Trump podría reorientar la diplomacia de Estados Unidos para alejarla de las alianzas internacionales tradicionales y acercarse más a políticos populistas y autoritarios, según esos líderes y observadores externos.

El presidente venezolano, Nicolás Maduro, afirmó el miércoles que “se le abre una oportunidad de oro a Donald Trump para pacificar el mundo, para cambiar los relacionamientos que Estados Unidos ha tenido y que ha hecho daño a países de América Latina y el Caribe”.

Su mensaje se centró en recordar ofertas de campaña sobre economía y relaciones exteriores del presidente electo de Estados Unidos, un país que ha cuestionado las últimas elecciones de Venezuela que tanto Maduro como la oposición dicen haber ganado.

“En la campaña electoral, él ofreció vehementemente recuperar a los Estados Unidos en su economía, en su capacidad tecnológica, concentrarse en el desarrollo de los Estados Unidos y además ofreció acabar con la guerra contra el pueblo de Gaza y Palestina”.

Sobre las sanciones impuestas a Venezuela para forzar un cambio de gobierno, Maduro comentó que en el primer gobierno de Trump “no nos fue bien”. Ahora “éste es un nuevo comienzo para que apostemos a ganar”.

El Colegio Electoral es el sistema único de Estados Unidos para elegir presidentes. Es diferente al voto popular y tiene un impacto enorme en la forma en que los candidatos compiten y ganan las campañas.

Los republicanos Trump y Bush perdieron el voto popular durante esas campañas presidenciales, pero ganaron el Colegio Electoral para reclamar la Casa Blanca.

Algunos demócratas sostienen que el sistema favorece a los republicanos y que preferirían que Estados Unidos eligiera a los presidentes por una mayoría simple de votos. Pero los fundadores del país establecieron el sistema en la Constitución y se necesitaría una enmienda para cambiarlo.

¿Qué es?
Es un organismo de 538 miembros que elige al presidente. Los votantes colegiados de cada estado votan por el candidato que ganó el voto popular en ese estado. Para ganar la presidencia, un candidato debe obtener 270 votos colegiados.

¿Cuántos votos colegiados tiene cada estado?
Los votantes colegiados se asignan con base en cuántos representantes tiene un estado en la Cámara de Representantes, más sus dos senadores. California tiene la mayor cantidad de votos colegiados con 54, seguido por Texas con 40 y Florida con 30. Pensilvania con 19 votos colegiados es el premio más grande de los campos de batalla presidenciales, seguido por Georgia y Carolina del Norte con 16 cada uno.

¿Cómo y cuándo se cuentan los votos?
Una vez que los votantes colegiados de un estado han certificado el voto —el 17 de diciembre este año—, envían un certificado al Congreso. El Congreso después cuenta formalmente el voto y lo certifica en una sesión especial el 6 de enero. El o la vicepresidente preside cuando se abren y verifican los sobres de cada estado.

Algunas votantes lamentaron el miércoles la oportunidad perdida de que una mujer ocupara el Despacho Oval, y se preguntaron cuándo —si es que alguna vez— sucederá eso.

“Estoy horrorizada”, dijo Precious Brady-Davis, una mujer transgénero de raza negra que acaba de ganar un mandato de dos años en una junta de gestión del agua del área de Chicago, y cuya alegría por ello se vio atenuada. “Estoy decepcionada con mis compatriotas estadounidenses porque, una vez más, no elegimos a una mujer calificada para la presidencia”.

Quienes apoyaron a Trump —como Katherine Mickelson, una estudiante universitaria de 20 años, de Sioux Falls, Dakota del Sur— dijeron que la contienda se redujo a valores y a cuestiones como la economía, no al género. Incluso la misma Harris buscó ganarse un lugar en la historia sin hacer énfasis en su género.

“Si bien creo que a muchas mujeres les gustaría ver a una presidenta, incluida yo misma”, argumentó Mickelson, “no vamos simplemente a votar a ciegas por una mujer”.

A pesar del potencial histórico de la campaña de Harris, ella no pudo ampliar el apoyo que las mujeres dieron al presidente Joe Biden en 2020 para cimentar una victoria, según AP VoteCast, una encuesta nacional de más de 120.000 votantes de todo el país. El 53% de las mujeres apoyaron a Harris, en comparación con el 46% que apoyaron a Trump, un porcentaje ligeramente inferior a la ventaja de Biden entre ellas en 2020.

Presente en el discurso de reconocimiento de la derrota de Kamala Harris, su compañero de fórmula en la candidatura demócrata habló después de lo que seguirá haciendo ahora que Trump ganó la Presidencia de Estados Unidos.

Tim Walz, acompañado de su esposa Gwen, respondió a un periodista que le preguntó “¿qué viene ahora?”.

“Minnesota”, zanjó Walz. Se refería a su cargo como gobernador del estado.

La campaña del presidente electo Donald Trump dijo el miércoles que él aceptó la invitación de Joe Biden de reunirse en la Casa Blanca para hablar de la transición presidencial.

No se dio a conocer una fecha para el encuentro pero Steven Cheung, director de Comunicación de Trump, dijo que podría ocurrir en breve. Cheung dijo que Trump “apreció mucho” la llamada de felicitación de Biden del miércoles.

En un comunicado de la Casa Blanca, el presidente Joe Biden reconoció a Kamala Harris como “una compañera tremenda y una servidora pública de integridad total, valentía y carácter”. Era su primero pronunciamiento desde la victoria de Trump.

El mandatario apuntó que Harris entró en campaña bajo “circunstancias extraordinarias”, tras su salida de la contienda presidencial 108 días antes del día de las elecciones ante el aumento de la presión por su catastrófico debate ante Trump.

Biden añadió que Harris dio un paso adelante y lideró una campaña histórica y recalcó que la vicepresidenta tiene una visión del país “más libre, más justa y con más oportunidades para los estadounidenses”.