Según un sondeo a boca de urna publicado a última hora del martes, uno de cada tres votos que obtuvo Donald Trump fueron emitidos por personas de color.
Los resultados de la encuesta de NBC News demuestran que el electorado estadounidense está menos polarizado políticamente en términos raciales y étnicos, lo que indica que es menos probable que ciertos grupos voten como bloques homogéneos.
Y ello a pesar de que la campaña del expresidente se ha visto salpicada por una serie de polémicas raciales.
Por ejemplo, Trump se quejó de que su oponente birracial, la demócrata Kamala Harris, “casualmente se volvió afroamericana” a finales de julio. Asimismo, menospreció a la ciudad de Detroit, de mayoría afroamericana y, más recientemente, el cómico Tony Hinchcliffe catalogó a Puerto Rico como una “isla flotante de basura” durante el acto de campaña del exmandatario llevado a cabo en el Madison Square Garden a finales de octubre.
Durante sus campañas, ambos candidatos trataron de convencer a las minorías mediante la organización de actos dirigidos a grupos demográficos específicos, como debates públicos con la Asociación Nacional de Periodistas Afroamericanos y con la cadena de noticias en español Univisión.
Trump insistió reiteradamente en que los miembros de las diásporas afroamericanas, judía y católica “tendrían que hacerse ver el cerebro” si votaban a Harris, quien trató de retratar su vida como una gran historia de éxito estadounidense.
Si se compara el desglose demográfico de los votos entre 2020 y 2024, Harris siguió ganando el voto afroamericano como lo hizo Joe Biden cuatro años antes, ya que obtuvo el 86 %, pero perdió terreno entre los votantes latinos y asiáticos, a pesar de superar a Trump en ambas categorías.
Con respecto a la comunidad latina, el 65 % votó por Biden en 2020, pero, en esta ocasión, el 53 % votó por Harris. En cuanto a la comunidad asiática, el 61 % votó a Biden, mientras que su sucesora obtuvo solo el 56 % el martes.
Por otra parte, los encuestados afirmaron que la democracia y la economía eran las dos cuestiones que más les preocupaban en estas elecciones: un 34 % citó a la primera y un 31 % a la segunda como su principal prioridad.
El aborto y la inmigración, los temas de los que más hablaron los demócratas y republicanos, ocuparon el tercer y cuarto lugar, con un 14 % y un 11 %, respectivamente.
Solo el 4 % de los encuestados se mostró preocupado por la política exterior, a pesar de las guerras que están ocurriendo en Ucrania y Gaza.
Hombres y mujeres coincidieron en la importancia de la democracia, mientras que el 20 % de las mujeres y el 8 % de los hombres afirmaron que el derecho al aborto era una cuestión más importante.
La encuesta también reveló que el estado de ánimo de la población era ampliamente pesimista: un 43 % de personas indicaron que estaban “insatisfechas” con la situación del país y un 29 % expresaron que estaban “enfadadas”. Solo el 26 % manifestó que estaba “satisfecho” o “entusiasmado”.
Por último, un 45 % de los encuestados manifestó estar en una peor situación económica que hace cuatro años, cuando Trump aún estaba al mando y antes de que la pandemia del covid-19 hubiera empezado a afectar la economía y provocar el aumento de los precios de los bienes de consumo.
Traducción de María Luz Avila
