La actriz Blanca Rosa Blanco y el pianista Chucho Valdés fueron dos de las figuras cimeras de la cultura cubana que mostraron su conmoción por la muerte del joven cineasta Jonal Cosculluela y recordaron su legado en el cine cubano.
«Fue una oportunidad ir a esa muestra en Rusia, tomar el avión, hacer la fila juntos, nunca habíamos coincidido, y de pronto hicimos un viaje de película, Jonal con su entusiasmo por la aventura y decidido a acompañarme al Palacio de Iván El Terrible o a los estudios Mosfilm. Hicimos todo un plan en ese largo viaje. Pero yo enfermé de repente eldía de la proyección de mi película. El la presentó por mi. Se ocupó de todo. Siempre que conocemos a alguien en un viaje terminamos sabiendo mucho mas».
«Sus hijas- añadió la actriz- eran las protagonistas de las conversaciones. buscar sus regalos se convirtió en el centro de nuestras horas. Nos hicimos amigos de viaje. Como si hubiéramos estado en la misma aula yo unos años más que él pero él no tenía edad. Era un muchacho. Un muchacho. El me cuidó a tiempo completo cuando no me quedaban fuerzas para levantarme. Buscó médicos. Buscó comida. Me hizo sentir a salvo y eso fue suficiente para quererlo aunque no coincidimos mucho más. La vida. Los días. Los rumbos. Otro vez el proyecto de la querida Maritza que su llamada fue suficiente para decirle que Si. Claro Jonal ! Claro que si! Lo hago. Una escena o dos. La hago. Que suerte no sentir ese dolor hoy. Tengo otro muy profundo. Una tristeza enorme por tu partida. Me quedo con otras cosas y algunas fotos».
Por su parte el laureado Chucho Valdés, quien compuso la música de Esteban, la ópera prima de Cosculluela, indicó: «A la memoria de Jonal, cuanto talento, cuanta imaginación y entrega al arte. Te vamos a extrañar siempre». Su mensaje lo hizo acompañar de un video suyo interpretando la música del filme, que recibió numerosos reconocimientos en Cuba y en eventos cinematográficos internacionales.
Cosculluela se quitó la vida este martes a los 47 años dejando un importante legado en el cine cubano a pesar de su juventud.
