Alrededor de las 11:40 aparecía Hansi Flick en el Campo 2 de la Ciutat Esportiva Joan Gamper. Algunos de sus ayudantes habían saltado al verde un poco antes. La plantilla no se ejercitaba en su habitual Campo Tito Vilanova al estar haciendo labores de mejora en el césped. Ya entrenaron allí el sábado previo al duelo ante el Sevilla.
Los jugadores aparecían sobre las 11:45. El equipo había hecho la activación previa que a veces hacen sobre el césped en el vestuario antes de ese Barça-Bayern. Además, el técnico germano había preparado una sesión de vídeo para analizar al rival. Algo habitual los días previos a partido.
PARTIDO MUY ESPECIAL PARA HANSI
Lo que no es tan habitual es el contrincante. Hansi jamás se ha enfrentado a su Bayern. El club de su vida, del que es seguidor y del que fue tanto jugador como técnico. Como entrenador su periplo no llegó a dos años, tiempo suficiente para lograr un sextete histórico. Con un estilo genuino que ahora intenta (de momento con éxito) implantar en Barcelona.
A nivel de altas y bajas, sin mucha novedad. Eric Garcia, que este lunes ya no se entrenó con sus compañeros, trabajó al margen. Descartado para el duelo ante el Bayern y pensando ya en el clásico. Al central de Martorell se le vio entrenando por una rendija detras de ese Campo 2 en el que se ejercitaban sus compañeros.
CHRISTENSEN AVANZA
La nota positiva, que allí también trabajaba Christensen, lesionado del Aquiles e inactivo desde el pasado 17 de agosto. Ahí jugó su último partido con el Barça. Como pivote. La recuperación, a priori, va bien. Veremos si regresa antes de diciembre a la competición.
Buen ambiente, los habituales juegos de velocidad y reacción iniciales y todo listo para buscar este miércoles una victoria de orgullo ante el Bayern. Son seis derrotas seguidas en partido oficial ante los bávaros. Entre ellas, varias muy dolorosas.